Después de 10 años, propuestas para radio comercial en el país

Por falta de cobertura, porque son lugares apartados donde no hay medios de comunicación o de radio comercial en las respectivas bandas o frecuencias y por evitar la concentración y el monopolio de empresarios dedicados a proporcionar estos servicios, 59 municipios de Colombia fueron escogidos por el Ministerio de Comunicaciones para contar con un nuevo espacio comercial en Amplitud Modulada (AM) y Frecuencia Modulada (FM).

Y para eso, hoy a las cuatro de la tarde se cierra el plazo para que los interesados y proponentes presenten en las oficinas del Ministerio dos sobres: uno con los requisitos generales del proceso, y el otro, con la propuesta económica. Allí deben aclarar que son los interesados en la prestación del servicio de radiodifusión sonora comercial y que se comprometen con ser voceros de la comunidad, servir de agente de convivencia pacífica y proteger el medio ambiente.

Además de eso, deben acatar las normas de publicidad, preservar la calidad del lenguaje y la expresión, reconocer la diversidad étnica y cultural, respetar la veracidad en la información y tener disposición para contrastar fuentes, ayudando en la prevención del consumo de bebidas alcohólicas y del tabaco.

La ministra de Comunicaciones, María del Rosario Guerra, explicó sobre las licitaciones: “Ya cerramos una para emisoras comunitarias de ciudades como Mitú, Puerto Carreño, Riohacha, Quibdó. La segunda para 15 capitales como Montería, Sincelejo, Valledupar, Cúcuta, Neiva e Ibagué. La tercera no se ha cerrado y es para ciudades principales, Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cali; son siete para Bogotá, cuatro para Medellín, cinco para Cali y tres para Barranquilla. Y la otra, después de 10 años, es la de licencias de radiodifusión sonora comercial, en 59 municipios de Colombia, con 69 frecuencias para FM y AM”.

Los proponentes deben demostrar capital de trabajo y patrimonio, además de una oferta económica que no tiene piso ni techo en lo que estimen la concesión. “Se conformará un comité de evaluación con funcionarios y asesores externos, 60 días después se termina la evaluación y no se van a dar resultados parciales”, aclaró Daniel Medina, viceministro de Comunicaciones .

Estás frecuencias, como lo indica su nombre, son con ánimo de lucro, en las cuales temas como la pauta y la venta de espacios están a libertad de cada uno de los contratantes, pues ese tipo de control sólo se ejerce sobre los comunitarios. Se estima que para noviembre y diciembre de este año ya se estén adjudicando las primeras licitaciones y luego cada uno de los ganadores tendrá seis meses para hacer estudios pertinentes, como el de la Aeronáutica Civil y temas electromagnéticos.

Este proceso no se vivía desde hace diez años, cuando estalló el escándalo del ‘miti-miti’, en el que estuvieron implicados los entonces ministros de Comunicaciones y de Minas, Saulo Arboleda y Rodrigo Villamizar, respectivamente, de quienes se filtró una conversación en la que  aparentemente se hacía una repartición de las frecuencias, pero que después del proceso, fueron declarados inocentes.

Por falta de cobertura, porque son lugares apartados donde no hay medios de comunicación o de radio comercial en las respectivas bandas o frecuencias y por evitar la concentración y el monopolio de empresarios dedicados a proporcionar estos servicios, 59 municipios de Colombia fueron escogidos por el Ministerio de Comunicaciones para contar con un nuevo espacio comercial en Amplitud Modulada (AM) y Frecuencia Modulada (FM).

Y para eso, hoy a las cuatro de la tarde se cierra el plazo para que los interesados y proponentes presenten en las oficinas del Ministerio dos sobres: uno con los requisitos generales del proceso, y el otro, con la propuesta económica. Allí deben aclarar que son los interesados en la prestación del servicio de radiodifusión sonora comercial y que se comprometen con ser voceros de la comunidad, servir de agente de convivencia pacífica y proteger el medio ambiente.

Además de eso, deben acatar las normas de publicidad, preservar la calidad del lenguaje y la expresión, reconocer la diversidad étnica y cultural, respetar la veracidad en la información y tener disposición para contrastar fuentes, ayudando en la prevención del consumo de bebidas alcohólicas y del tabaco.

La ministra de Comunicaciones, María del Rosario Guerra, explicó sobre las licitaciones: “Ya cerramos una para emisoras comunitarias de ciudades como Mitú, Puerto Carreño, Riohacha, Quibdó. La segunda para 15 capitales como Montería, Sincelejo, Valledupar, Cúcuta, Neiva e Ibagué. La tercera no se ha cerrado y es para ciudades principales, Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cali; son siete para Bogotá, cuatro para Medellín, cinco para Cali y tres para Barranquilla. Y la otra, después de 10 años, es la de licencias de radiodifusión sonora comercial, en 59 municipios de Colombia, con 69 frecuencias para FM y AM”.

Los proponentes deben demostrar capital de trabajo y patrimonio, además de una oferta económica que no tiene piso ni techo en lo que estimen la concesión. “Se conformará un comité de evaluación con funcionarios y asesores externos, 60 días después se termina la evaluación y no se van a dar resultados parciales”, aclaró Daniel Medina, viceministro de Comunicaciones .

Estás frecuencias, como lo indica su nombre, son con ánimo de lucro, en las cuales temas como la pauta y la venta de espacios están a libertad de cada uno de los contratantes, pues ese tipo de control sólo se ejerce sobre los comunitarios. Se estima que para noviembre y diciembre de este año ya se estén adjudicando las primeras licitaciones y luego cada uno de los ganadores tendrá seis meses para hacer estudios pertinentes, como el de la Aeronáutica Civil y temas electromagnéticos.

Este proceso no se vivía desde hace diez años, cuando estalló el escándalo del ‘miti-miti’, en el que estuvieron implicados los entonces ministros de Comunicaciones y de Minas, Saulo Arboleda y Rodrigo Villamizar, respectivamente, de quienes se filtró una conversación en la que  aparentemente se hacía una repartición de las frecuencias, pero que después del proceso, fueron declarados inocentes.