Dólar en Colombia: ¿cómo terminará febrero y qué le espera a la moneda en marzo?
La divisa llega a la última semana de febrero con un panorama relativamente estable. Estas son las variables nacionales e internacionales que moldearán su precio las próximas semanas.
Tras la volatilidad propia del inicio de año, el dólar en Colombia se perfila hacia un final de mes con relativa estabilidad. Salvo algunos repuntes en la semana que acaba de pasar (entre el 19 y el 23 de febrero de 2024), la divisa sigue esquivando el umbral de los $4.000, manteniéndose en una brecha entre los $3.909 y los $3.949.
“Algunos eventos relevantes para explicar esto son: primero, la tasa de inflación anual en Estados Unidos disminuyó, ubicándose en el 3,1 % en enero, lo que generó un efecto positivo en el peso colombiano, así como la disminución de la inflación colombiana de enero. Segundo, el Banco de la República disminuyó recientemente su tasa de interés, pasando al 12,75 %, lo que hasta ahora no ha generado mayor impacto en el mercado cambiario. Tercero, los aumentos del precio del petróleo hacen que el dólar se pueda estabilizar”, afirma Michael Ortegón, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de UNINPAHU.
El académico agrega que el comportamiento de las exportaciones es relevante para mantener el precio del dólar estable, “si este se dispara significa que puede haber una caída en las exportaciones nacionales”, asevera. Igualmente, la publicación de datos económicos como el PIB y las solicitudes de desempleo podrían afectar la percepción del riesgo global y, por ende, el precio del dólar, según Ortegón.
Para la última semana de febrero y los primeros días de marzo, se prevén fluctuaciones en el precio del dólar por factores de tipo internacional y nacional que podrían incrementar su cotización.
El camino del dólar en Colombia
En la semana que acaba de pasar, la mayoría de las monedas de la región perdieron valor frente al dólar. “El peso colombiano no fue la excepción y expuso una depreciación semanal del 1,42 %. Este comportamiento se reforzó con el descenso de los precios del petróleo (-1,92 %)”, explica Diego Gómez, analista de contexto externo y mercado cambiario de Corficolombiana.
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Para Gómez, la publicación de las actas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por su sigla en inglés) revelaron que el banco central no tiene afán en reducir de forma anticipada las tasas de interés en ese país. De hecho, no se esperan recortes hasta junio o meses posteriores.
Con intereses altos, los más altos en más de una década, los inversionistas no verían un motivo razonable para llevar sus inversiones a economías emergentes, como la colombiana. Recuerde que, a mayor flujo de dólares, menor será su precio. De ahí que, en principio, la tasa de cambio permanecería sin cambios bruscos esta semana.
No obstante, la publicación de los datos de inflación de productos de consumo personal (un indicador alternativo al Índice de Precios al Consumidor) en Estados Unidos y en la zona euro serán claves para confirmar esa expectativa de tasas de interés elevadas hasta, por lo menos, mitades de este año.
El analista de Corficolombiana explica que lo anterior podría afectar la demanda de activos emergentes como el peso colombiano. “Si la inflación sigue sorprendiendo al alza en las economías desarrolladas, anticipamos que el peso seguirá sufriendo presiones de depreciación, como lo hizo al finalizar la semana pasada”, precisa.
En lo que respeta a Europa, con la inflación en retroceso y la economía regional en la lucha por ganar impulso, el debate sobre cuándo comenzar a deshacer la histórica campaña de aumento de tasas del BCE se ha vuelto más intenso. Algunas autoridades han sugerido que estarían listas para tomar medidas en abril, aunque muchas han señalado su preferencia por esperar y asegurarse de que la inflación no repunte.
¿Qué esperar sobre el precio de la divisa?
Ahora bien, de cara a la semana que inicia, el dólar en Colombia seguiría en niveles cercanos a los $4.000. Incluso, los analistas prevén que esta dinámica podría continuar en las primeras semanas de marzo, pues no se esperan decisiones de bancos centrales hasta finales de dicho mes.
El Banco de la República, si bien tiene prevista una reunión este jueves 29 de febrero donde los miembros de la junta directiva empezarán a discutir su siguiente paso en materia de política monetaria, solo dará a conocer su nueva tasa de intervención hasta finales de marzo, es decir, la tasa con la que el banco central presta dinero a los bancos comerciales. Los cambios en la tasa de intervención del Banrep, además, son un mensaje para el resto del mercado.
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“Es sabido por todos que los resultados de la inflación y el dato de crecimiento de la economía colombiana en 2023 (0,6 % en su cifra anual), dejaron ver los efectos de los ajustes del Banrep. Estos datos dan un margen claro para que el Banrep pueda bajar su tasa de intervención entre 75 y 100 puntos básicos en su próxima decisión. Esto va a ser determinante para la tasa de cambio”, afirma Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública y Presupuesto de la Universidad del Rosario.
Entre otros factores que harán fluctuar el precio del dólar en Colombia en marzo de 2024, Pablo Garlati, director de la carrera de Economía de la Universidad Javeriana, explica que una baja en las tasas de interés produciría una ligera devaluación del peso colombiano respecto al dólar, porque esto implica la salida de algunos dólares por la reducción en la rentabilidad.
“Habrá que ver si en la próxima reunión el Banrep bajará tasas. Tampoco se sabe qué hará la Fed. Ahí empieza la dinámica sobre quién mantiene las tasas más altas. Los dólares, generalmente, van donde las tasas estén más altas, donde pagan más. Además, hay incertidumbre internacional por los problemas en las redes de suministro en el Mar Rojo, por donde pasa el 30 % del comercio global. Esto podría hacer subir los precios del transporte a nivel global y se podría ver reflejado en la inflación de marzo”.
Los analistas consultados por este diario coinciden en que las discusiones sobre las reformas laboral y pensional en el Congreso de la República, que se retomarán las próximas semanas, incidirán en la cotización de los billetes verdes, teniendo en cuenta que una parte del sector privado (un actor de peso en los flujos de inversiones en Colombia) ha mostrado resistencia a ambos proyectos del Gobierno.
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“Otro aspecto importante es el manejo del Presupuesto Nacional para el presente año. De cómo se manejen las finanzas públicas dependerá la confianza en la economía colombiana y, por lo tanto, el comportamiento del peso frente al dólar”, indica Sebastián Chacón, director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano.
Pronósticos sobre el precio de la divisa
Todo este recuento de posibilidades a nivel nacional e internacional arrojan un guarismo para la tasa de cambio. Los pronósticos de los analistas sitúan a la tasa de cambio entre un piso de $3.940 y un techo de $3.960 para la semana entrante.
“Para la semana que inicia, el dólar estará de manera estable por debajo de los $4.000. Esto atendiendo a que la Fed tomará decisiones hasta marzo con respecto a su tasa de interés, lo que afecta directamente la cotización del dólar frente al peso. Además, porque la economía colombiana en 2024 se muestra estable en los principales indicadores macroeconómicos”, puntualiza el director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano.
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Tras la volatilidad propia del inicio de año, el dólar en Colombia se perfila hacia un final de mes con relativa estabilidad. Salvo algunos repuntes en la semana que acaba de pasar (entre el 19 y el 23 de febrero de 2024), la divisa sigue esquivando el umbral de los $4.000, manteniéndose en una brecha entre los $3.909 y los $3.949.
“Algunos eventos relevantes para explicar esto son: primero, la tasa de inflación anual en Estados Unidos disminuyó, ubicándose en el 3,1 % en enero, lo que generó un efecto positivo en el peso colombiano, así como la disminución de la inflación colombiana de enero. Segundo, el Banco de la República disminuyó recientemente su tasa de interés, pasando al 12,75 %, lo que hasta ahora no ha generado mayor impacto en el mercado cambiario. Tercero, los aumentos del precio del petróleo hacen que el dólar se pueda estabilizar”, afirma Michael Ortegón, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de UNINPAHU.
El académico agrega que el comportamiento de las exportaciones es relevante para mantener el precio del dólar estable, “si este se dispara significa que puede haber una caída en las exportaciones nacionales”, asevera. Igualmente, la publicación de datos económicos como el PIB y las solicitudes de desempleo podrían afectar la percepción del riesgo global y, por ende, el precio del dólar, según Ortegón.
Para la última semana de febrero y los primeros días de marzo, se prevén fluctuaciones en el precio del dólar por factores de tipo internacional y nacional que podrían incrementar su cotización.
El camino del dólar en Colombia
En la semana que acaba de pasar, la mayoría de las monedas de la región perdieron valor frente al dólar. “El peso colombiano no fue la excepción y expuso una depreciación semanal del 1,42 %. Este comportamiento se reforzó con el descenso de los precios del petróleo (-1,92 %)”, explica Diego Gómez, analista de contexto externo y mercado cambiario de Corficolombiana.
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Para Gómez, la publicación de las actas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por su sigla en inglés) revelaron que el banco central no tiene afán en reducir de forma anticipada las tasas de interés en ese país. De hecho, no se esperan recortes hasta junio o meses posteriores.
Con intereses altos, los más altos en más de una década, los inversionistas no verían un motivo razonable para llevar sus inversiones a economías emergentes, como la colombiana. Recuerde que, a mayor flujo de dólares, menor será su precio. De ahí que, en principio, la tasa de cambio permanecería sin cambios bruscos esta semana.
No obstante, la publicación de los datos de inflación de productos de consumo personal (un indicador alternativo al Índice de Precios al Consumidor) en Estados Unidos y en la zona euro serán claves para confirmar esa expectativa de tasas de interés elevadas hasta, por lo menos, mitades de este año.
El analista de Corficolombiana explica que lo anterior podría afectar la demanda de activos emergentes como el peso colombiano. “Si la inflación sigue sorprendiendo al alza en las economías desarrolladas, anticipamos que el peso seguirá sufriendo presiones de depreciación, como lo hizo al finalizar la semana pasada”, precisa.
En lo que respeta a Europa, con la inflación en retroceso y la economía regional en la lucha por ganar impulso, el debate sobre cuándo comenzar a deshacer la histórica campaña de aumento de tasas del BCE se ha vuelto más intenso. Algunas autoridades han sugerido que estarían listas para tomar medidas en abril, aunque muchas han señalado su preferencia por esperar y asegurarse de que la inflación no repunte.
¿Qué esperar sobre el precio de la divisa?
Ahora bien, de cara a la semana que inicia, el dólar en Colombia seguiría en niveles cercanos a los $4.000. Incluso, los analistas prevén que esta dinámica podría continuar en las primeras semanas de marzo, pues no se esperan decisiones de bancos centrales hasta finales de dicho mes.
El Banco de la República, si bien tiene prevista una reunión este jueves 29 de febrero donde los miembros de la junta directiva empezarán a discutir su siguiente paso en materia de política monetaria, solo dará a conocer su nueva tasa de intervención hasta finales de marzo, es decir, la tasa con la que el banco central presta dinero a los bancos comerciales. Los cambios en la tasa de intervención del Banrep, además, son un mensaje para el resto del mercado.
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Entre otros factores que harán fluctuar el precio del dólar en Colombia en marzo de 2024, Pablo Garlati, director de la carrera de Economía de la Universidad Javeriana, explica que una baja en las tasas de interés produciría una ligera devaluación del peso colombiano respecto al dólar, porque esto implica la salida de algunos dólares por la reducción en la rentabilidad.
“Habrá que ver si en la próxima reunión el Banrep bajará tasas. Tampoco se sabe qué hará la Fed. Ahí empieza la dinámica sobre quién mantiene las tasas más altas. Los dólares, generalmente, van donde las tasas estén más altas, donde pagan más. Además, hay incertidumbre internacional por los problemas en las redes de suministro en el Mar Rojo, por donde pasa el 30 % del comercio global. Esto podría hacer subir los precios del transporte a nivel global y se podría ver reflejado en la inflación de marzo”.
Los analistas consultados por este diario coinciden en que las discusiones sobre las reformas laboral y pensional en el Congreso de la República, que se retomarán las próximas semanas, incidirán en la cotización de los billetes verdes, teniendo en cuenta que una parte del sector privado (un actor de peso en los flujos de inversiones en Colombia) ha mostrado resistencia a ambos proyectos del Gobierno.
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“Otro aspecto importante es el manejo del Presupuesto Nacional para el presente año. De cómo se manejen las finanzas públicas dependerá la confianza en la economía colombiana y, por lo tanto, el comportamiento del peso frente al dólar”, indica Sebastián Chacón, director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano.
Pronósticos sobre el precio de la divisa
Todo este recuento de posibilidades a nivel nacional e internacional arrojan un guarismo para la tasa de cambio. Los pronósticos de los analistas sitúan a la tasa de cambio entre un piso de $3.940 y un techo de $3.960 para la semana entrante.
“Para la semana que inicia, el dólar estará de manera estable por debajo de los $4.000. Esto atendiendo a que la Fed tomará decisiones hasta marzo con respecto a su tasa de interés, lo que afecta directamente la cotización del dólar frente al peso. Además, porque la economía colombiana en 2024 se muestra estable en los principales indicadores macroeconómicos”, puntualiza el director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano.
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