El BID prevé contracción del PIB de Latinoamérica de hasta 5,5% en 2020 por COVID-19
México, Ecuador y Colombia son algunos de los países que más riesgo presentan por la caída de los precios del petróleo que se ha dado en esta coyuntura.
AFP.
La economía de Latinoamérica y el Caribe se contraerá entre 1,8% y 5,5% en 2020 debido de la pandemia de COVID-19, dijo el jueves el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). (Lee también México acuerda con Estados Unidos recorte de producción de petróleo)
El BID prevé estos escenarios en su Informe Macroeconómico 2020, en el que presenta el impacto del nuevo coronavirus como el mayor desafío económico desde la Gran Depresión mundial de 1929.
"Nuestra región va a sufrir un shock de proporciones históricas", dijo el economista jefe del BID, Eric Parrado, citado en un comunicado.
El BID esperaba un 1,6% de recuperación del crecimiento de Latinoamérica en 2020, pero dijo que ese panorama cambió "radicalmente" como resultado de la crisis humanitaria y económica provocada por el coronavirus, reportado por primera vez en China a fines de diciembre pasado.
Para evitar la propagación de la enfermedad, los países de Latinoamérica y el Caribe han adoptado medidas de contención, que suponen una paralización parcial de la actividad económica y conllevarán "una pérdida significativa" de su Producto Interno Bruto (PIB), dijo el informe.
El BID dijo además que el daño económico de la región se extenderá en 2021 y 2022 si los gobiernos no implementan programas que busquen amortiguar el golpe de la emergencia sanitaria.
"Los países necesitan salvar vidas, asegurando el distanciamiento social y otorgando los recursos necesarios a sus sectores de salud. Medidas complementarias y temporales pueden apoyar a las economías durante el cierre parcial y organizado", dijo Parrado, llamando a "preservar el corazón productivo" de la región.
Entre las medidas, mencionó ayudar a las personas más vulnerables que perdieron su fuente de ingreso, incentivar a las empresas para que se mantengan a flote y conserven las fuentes de trabajo, y asegurar la liquidez a los bancos.
Un estudio del Imperial College London estimó hasta en 3,2 millones las muertes por el nuevo coronavirus en Latinoamérica y el Caribe si no se adoptaban políticas para contener los contagios, señaló el informe.
Según el tablero de impacto del coronavirus del BID, hasta la noche del jueves había 44.000 casos confirmados de COVID-19 y 1.756 muertes en 26 países de la región, no tan golpeada por la pandemia como Europa y Estados Unidos.
Los que más riesgo presentan
El reporte del BID señaló que durante la Gran Recesión que siguió a la crisis financiera de 2008, Latinoamérica sufrió una caída de su PIB del 2%, pero la región logró recuperarse y crecer al 6% en 2010. La clave entonces fue el renovado acceso a los mercados de capitales, la solidez fiscal y los altos precios de materias primas.
El reto ahora, según el BID, será encontrar "la mezcla correcta de políticas que aseguren una rápida recuperación".
El informe también destacó que las "grandes pérdidas" en el PIB de China, Estados Unidos y Europa, "sin duda" repercutirán en la región.
Según los modelos de choque aplicados, México verá un "grave impacto" por su estrecha asociación con Estados Unidos y los bajos precios del petróleo.
El vínculo con Estados Unidos también golpeará a Centroamérica, pero no tanto por el comercio, sino por la caída del turismo y las remesas, algo que sufrirán también los países del Caribe, que no exportan productos básicos.
La subregión del Cono Sur, que incluye a Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, "se verá muy afectada en términos de pérdida del PIB" por el impacto de la crisis en los precios de los productos básicos, la perturbación en los mercados financieros y la caída de los flujos de ingreso de capital.
Brasil, una economía más grande y cerrada y con menor dependencia del financiamiento externo, sufrirá menos, señaló el reporte.
Otros afectados por las consecuencias económicas de la pandemia serán Ecuador, como exportador de petróleo y por tener su economía dolarizada, y Colombia, también país petrolero y acostumbrado a atraer "una considerable inversión extranjera para financiar un déficit en cuenta corriente".
La situación de cada uno de los países miembros prestatarios del BID está analizada en 26 informes disponibles en su sitio web, que repasan los principales canales de transmisión del shock global para la región, el impacto potencial en su crecimiento y las medidas adoptadas por los gobiernos.
La economía de Latinoamérica y el Caribe se contraerá entre 1,8% y 5,5% en 2020 debido de la pandemia de COVID-19, dijo el jueves el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). (Lee también México acuerda con Estados Unidos recorte de producción de petróleo)
El BID prevé estos escenarios en su Informe Macroeconómico 2020, en el que presenta el impacto del nuevo coronavirus como el mayor desafío económico desde la Gran Depresión mundial de 1929.
"Nuestra región va a sufrir un shock de proporciones históricas", dijo el economista jefe del BID, Eric Parrado, citado en un comunicado.
El BID esperaba un 1,6% de recuperación del crecimiento de Latinoamérica en 2020, pero dijo que ese panorama cambió "radicalmente" como resultado de la crisis humanitaria y económica provocada por el coronavirus, reportado por primera vez en China a fines de diciembre pasado.
Para evitar la propagación de la enfermedad, los países de Latinoamérica y el Caribe han adoptado medidas de contención, que suponen una paralización parcial de la actividad económica y conllevarán "una pérdida significativa" de su Producto Interno Bruto (PIB), dijo el informe.
El BID dijo además que el daño económico de la región se extenderá en 2021 y 2022 si los gobiernos no implementan programas que busquen amortiguar el golpe de la emergencia sanitaria.
"Los países necesitan salvar vidas, asegurando el distanciamiento social y otorgando los recursos necesarios a sus sectores de salud. Medidas complementarias y temporales pueden apoyar a las economías durante el cierre parcial y organizado", dijo Parrado, llamando a "preservar el corazón productivo" de la región.
Entre las medidas, mencionó ayudar a las personas más vulnerables que perdieron su fuente de ingreso, incentivar a las empresas para que se mantengan a flote y conserven las fuentes de trabajo, y asegurar la liquidez a los bancos.
Un estudio del Imperial College London estimó hasta en 3,2 millones las muertes por el nuevo coronavirus en Latinoamérica y el Caribe si no se adoptaban políticas para contener los contagios, señaló el informe.
Según el tablero de impacto del coronavirus del BID, hasta la noche del jueves había 44.000 casos confirmados de COVID-19 y 1.756 muertes en 26 países de la región, no tan golpeada por la pandemia como Europa y Estados Unidos.
Los que más riesgo presentan
El reporte del BID señaló que durante la Gran Recesión que siguió a la crisis financiera de 2008, Latinoamérica sufrió una caída de su PIB del 2%, pero la región logró recuperarse y crecer al 6% en 2010. La clave entonces fue el renovado acceso a los mercados de capitales, la solidez fiscal y los altos precios de materias primas.
El reto ahora, según el BID, será encontrar "la mezcla correcta de políticas que aseguren una rápida recuperación".
El informe también destacó que las "grandes pérdidas" en el PIB de China, Estados Unidos y Europa, "sin duda" repercutirán en la región.
Según los modelos de choque aplicados, México verá un "grave impacto" por su estrecha asociación con Estados Unidos y los bajos precios del petróleo.
El vínculo con Estados Unidos también golpeará a Centroamérica, pero no tanto por el comercio, sino por la caída del turismo y las remesas, algo que sufrirán también los países del Caribe, que no exportan productos básicos.
La subregión del Cono Sur, que incluye a Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, "se verá muy afectada en términos de pérdida del PIB" por el impacto de la crisis en los precios de los productos básicos, la perturbación en los mercados financieros y la caída de los flujos de ingreso de capital.
Brasil, una economía más grande y cerrada y con menor dependencia del financiamiento externo, sufrirá menos, señaló el reporte.
Otros afectados por las consecuencias económicas de la pandemia serán Ecuador, como exportador de petróleo y por tener su economía dolarizada, y Colombia, también país petrolero y acostumbrado a atraer "una considerable inversión extranjera para financiar un déficit en cuenta corriente".
La situación de cada uno de los países miembros prestatarios del BID está analizada en 26 informes disponibles en su sitio web, que repasan los principales canales de transmisión del shock global para la región, el impacto potencial en su crecimiento y las medidas adoptadas por los gobiernos.