El panorama alrededor de las tasas de interés
Esta semana se reúne la junta directiva del Banco de la República y la Reserva Federal de Estados Unidos para tomar decisiones sobre sus respectivas tasas de interés. Ambas decisiones conllevan implicaciones para la economía en Colombia.
Este martes, la junta directiva del Banco de la República se reúne para tomar decisiones alrededor de sus tasas de interés.
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Este martes, la junta directiva del Banco de la República se reúne para tomar decisiones alrededor de sus tasas de interés.
Para este punto de la historia, el Banco ya ha avanzado en tres recortes consecutivos: 25 puntos básicos en los dos primeros y 50 en el tercero. Estos movimientos se dieron luego de 14 subidas consecutivas, que arrancaron en septiembre de 2021, cuando el coletazo inflacionario de pospandemia ya comenzaba a hacer estragos en Colombia y en el resto del mundo.
Y si bien el último incremento representó una aceleración en el ritmo de ajuste de la política monetaria del Banco de la República, una de las palabras más sonadas al hablar de tasas de interés en Colombia es cautela.
Durante una intervención en el Congreso, Leonardo Villar, gerente del Banco, aseguró que los movimientos recientes en tasas de interés son guiados por la cautela, a la vez que admitió que la junta es plenamente consciente de lo doloroso que es restringir la política monetaria.
El gerente aseguró que, si las condiciones se dan, el Emisor podría acelerar el ritmo de reducción en las tasas “en un contexto en el que veamos que la inflación está moviéndose en la dirección de cumplir con la meta”, aseguró el gerente.
Por cierto, la meta del Banco está fijada en 3 %, y la entidad espera que se alcance en el primer semestre del próximo año.
Sin embargo, las proyecciones de analistas señalan que, si bien la junta efectuará una nueva reducción en sus tasas este martes, la velocidad de la bajada no se incrementaría, sino que se mantendría igual.
En otras palabras, lo que se espera es que la reducción en las tasas sea, de nuevo, de 50 puntos básicos, llevándolas así a 11,75 %. Esta es la cifra predominante entre los analistas consultados en la Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo, así como la que maneja el equipo de investigaciones económicas de Corficolombiana.
¿Por qué no habría una bajada más drástica en las tasas del Banco de la República?
Hablar de tasas de interés es hacerlo también de inflación.
Y si bien este es un indicador que ha mostrado una notable mejoría en un año (pasando del 13,34 % en marzo del año pasado al 7,36 % en el mismo mes de 2024), el indicador aún se encuentra muy lejos de la meta del Banco, que la ubica en 3 % (y espera que se alcance en el primer semestre del próximo año).
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) ha ido torciendo el brazo, pero su reducción ha ido registrando una especie de desaceleración.
“La reducción de la inflación esperada a 12 meses tan solo fue de 3 pbs de marzo a abril (Del 4,66 al 4,53 %), considerablemente inferior a la reducción promedio mensual de los últimos cinco meses, que rondó los 22 pbs. La baja credibilidad en el cumplimiento de la meta de inflación se refleja en los ajustes del salario mínimo de los últimos años, basados más en la inflación observada que en la meta de inflación”, según se lee en un análisis e Corficolombiana.
En este escenario hay noticias positivas y otras no tanto.
En el lado de las positivas se cuenta un impulso menor de los alimentos a la inflación general.
Esto es clave si se tiene en cuenta que cuando la inflación llegó a su pico, el gran motor detrás del IPC eran los alimentos, que crecían de la mano de una dura subida en los precios de los insumos agrícolas (asociados a problemas en las cadenas logísticas globales y a la invasión de Rusia a Ucrania, principalmente).
Ese panorama ha cambiado drásticamente. De acuerdo con la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (UPRA), entre febrero de 2023 y 2024, los precios de los insumos agrícolas registraron una contracción del 32,37 %. Este resultado contrasta notablemente con la información de 2021 y 2022, cuando estos productos crecieron a doble dígito.
Este descenso es clave si se considera que, según el Ministerio de Agricultura, para el pico de inflación pospandemia los aumentos en los precios de la comida respondieron en 50 % al alza en los insumos agrícolas (especialmente los que son importados).
Con los alimentos en una senda más estable, las malas noticias en inflación llegan un poco por el lado del comportamiento de los precios de la electricidad.
Según los datos más recientes del DANE, este servicio público registró una variación anual del 19,51 % para marzo de este año y del 0,12 % bajo la mirada mensual (en comparación con febrero pasado).
En sus crecimientos anuales en el Índice de Precios al Consumidor, la electricidad se encuentra en niveles similares a los registrados en el primer semestre del año pasado, que a su vez son los más altos desde 2016, según los datos del DANE.
La situación es crítica cuando se le mira por regiones. La información del DANE permite ver que, entre las 10 ciudades en donde más subió la electricidad en el IPC para marzo de este año, siete son capitales de la Costa Caribe.
Por otra parte, lejos de los terrenos de la inflación, el crecimiento económico es otra de las variables que pesan en las decisiones de tasas de interés del Banco de la República.
Si bien el año pasado el crecimiento del PIB sorprendió a la baja, los datos más recientes del Indicador de Seguimiento de la Economía (febrero) estuvieron por encima de las expectativas del mercado, al igual que los datos de marzo (1,6 y 2,4 %).
Y esto también le resta algo de presión a la junta del Banco para relajar más rápido su política monetaria. Todo lo cual contribuye al argumento de cautela en la bajada de las tasas.
El panorama en la Reserva Federal
Para comienzos del año las expectativas del mercado daban casi por hecho que la Reserva Federal de Estados Unidos efectuaría la primera bajada en sus tasas de interés en el primer semestre de este año.
Pero el calendario (y la inflación) han hecho lo suyo, y esta posibilidad comienza a verse cada vez más lejana.
Datos recientes de inflación indican que probablemente le tomará más tiempo a la Reserva Federal alcanzar la confianza necesaria para bajar las tasas de interés, dijo el presidente de la entidad, Jerome Powell.
“Los datos recientes claramente no nos han dado mayor confianza y, en cambio, indican que es probable que se necesite más tiempo de lo esperado para lograr esa confianza”, afirmó Powell a mediados de este mes.
Los comentarios representan un cambio en el mensaje de Powell. En los últimos tres meses una medida clave de inflación superó las proyecciones de analistas. También muestra que los funcionarios ven poca urgencia para recortar las tasas y que cualquier reducción en 2024 podría llegar relativamente tarde en el año.
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