Consejos para alcanzar un estado óptimo de gran productividad y satisfacción
Fragmento de “Optimal”, nuevo libro de Daniel Goleman, autor del bestseller “La inteligencia emocional”. En Colombia con el sello editorial Ediciones B.
Daniel Goleman y Cary Cherniss * / Especial para El Espectador
El modelo óptimo ofrece un equivalente de desempeño que coincide con la noción de que, en el marco de la crianza, no tenemos que ser la mamá o el papá perfecto todo el tiempo, sino esforzarnos lo más posible. Mientras que el flujo ideal nos obliga a apegarnos a un estándar demasiado alto, a la visión de “nuestro máximo esfuerzo” del perfeccionista en nuestro interior, el estándar óptimo nos permite relajarnos y disfrutar de lo que hacemos sin juzgarnos a nosotros mismos de manera constante. Solo acalla esa voz crítica dentro de ti y enfócate en la tarea que tienes por delante.
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El modelo óptimo ofrece un equivalente de desempeño que coincide con la noción de que, en el marco de la crianza, no tenemos que ser la mamá o el papá perfecto todo el tiempo, sino esforzarnos lo más posible. Mientras que el flujo ideal nos obliga a apegarnos a un estándar demasiado alto, a la visión de “nuestro máximo esfuerzo” del perfeccionista en nuestro interior, el estándar óptimo nos permite relajarnos y disfrutar de lo que hacemos sin juzgarnos a nosotros mismos de manera constante. Solo acalla esa voz crítica dentro de ti y enfócate en la tarea que tienes por delante.
En la primera parte de este libro, esbozaremos el sentimiento de encontrarnos en el estado óptimo, y para ello nos basaremos en diarios de cientos de personas que describen la arquitectura interior de lo que les parece un buen día. Luego veremos cómo se ve ese edificio privado desde el exterior, lo miraremos a través del lente del desempeño extraordinario en el lugar de trabajo.
Como psicólogos, buscamos resultados de otras investigaciones para guiar nuestro pensamiento. Seguir ese tipo de investigación nos permite distinguir un componente esencial del estado óptimo en el que somos inteligentes respecto a nuestras emociones, es decir, ejercer la inteligencia emocional.
Para nosotros fue una epifanía ver que las métricas del lugar de trabajo para la excelencia producen un mapa de lo que la gente reporta a partir de su experiencia en el interior, un mapa que nos indica por qué la inteligencia emocional ofrece una entrada a la excelencia personal. A pesar de que en la actualidad las habilidades de la inteligencia emocional tienen varios nombres, nosotros llegamos a la conclusión de que los ingredientes activos del desempeño óptimo dependen de la inteligencia emocional.
Hemos utilizado información de décadas de descubrimientos científicos sobre la inteligencia emocional, con implicaciones directas para ese estado óptimo y lo que nos mantiene alejados de él. Tener un día satisfactorio, en lugar de solo una experiencia extraordinaria en alguna cumbre durante el flujo, nos ofrece la clave para el desempeño y la realización, sin mencionar que, además, evita el desgaste profesional.
Hay muchas maneras en que la inteligencia emocional nos ofrece las fuentes internas para tener un acceso más inmediato al estado óptimo. En este libro encontrarás métodos prácticos para llegar a ese estado fácilmente, en vez de tener que esperar a que lleguen aquellos elementos elusivos que te lanzarán a un momento de flujo.
¿Por qué ahora?
Para Dan, este libro representa la culminación y la confirmación de una corazonada que tuvimos hace casi tres décadas: la inteligencia emocional ofrece un mapa para ser la mejor versión de nosotros mismos. Este libro, su quinto sobre el tema, contiene una abundante cosecha de investigaciones con la que se confirma aquella corazonada original.
Cary y Dan fundaron el Consortium for Research on Emotional Intelligence in Organizations (Consorcio para la Investigación de la Inteligencia Emocional en Organizaciones) algunos años después de que se publicara el primer artículo académico sobre este tema, en 1990, y compartieron la presidencia de dicho Consorcio los primeros 25 años. La misión era alentar a una investigación profunda que conjugara los estándares de la metodología académica y las necesidades prácticas de las organizaciones en operación.2
El objetivo del Consorcio fue reunir a profesionales que estuvieran poniendo a prueba aplicaciones de la inteligencia emocional en organizaciones como negocios y escuelas, con investigadores académicos que pudieran aplicar sus habilidades metodológicas a dichos estudios.
Ahora, más de un cuarto de siglo después, se realizan montones de estos estudios. Aunque en los primeros años del concepto varios críticos se quejaron, de manera justificada, de que había poca evidencia para sustentar la importancia de la inteligencia emocional para, digamos, el desempeño en el trabajo o el liderazgo, hoy en día se puede defender de manera sustancial su relevancia para la eficacia de todo tipo, en especial, como suele suceder con frecuencia, para las tareas donde se requiere de empatía, habilidades sociales o resiliencia ante el estrés.
Nosotros nos reunimos para recolectar esta abundante cosecha de investigación. En la primera parte del libro ahondaremos en los ingredientes de lo que sucede cuando brillamos y cómo la inteligencia emocional nos puede ayudar a llegar a ese punto.
En la segunda parte pondremos al día nuestro entendimiento de las habilidades que traducen la inteligencia emocional en acciones eficaces. Desglosaremos los ingredientes básicos de la inteligencia emocional en la conciencia de nosotros mismos, la forma en que nos autodirigimos, cómo sintonizarnos con otras personas y cómo juntar todo esto para propiciar relaciones eficaces.
En la tercera parte exploraremos un aspecto muy importante de nuestra vida: cómo trabajar de la mejor manera. Analizaremos formas en que la inteligencia emocional nos ayuda a tener un desempeño óptimo, ya sea como individuos, líderes o miembros de un equipo. En todos estos casos, la inteligencia emocional estimula la eficacia con una notable similitud entre el estado óptimo y las maneras en que las investigaciones muestran que la inteligencia emocional promueve nuestro desempeño individual en el lugar de trabajo. Ofreceremos sugerencias detalladas para ayudar a cualquier persona interesada en fortalecer estas habilidades. También analizaremos lo que significa tener una organización inteligente en el aspecto emocional, un lugar donde esta característica se haya incrustado en el ADN de la cultura organizacional.
Por último, en la cuarta parte exploraremos el futuro de la inteligencia emocional y sugeriremos la manera en que estas habilidades, combinadas con otras capacidades emocionales y mentales, pueden prepararnos para el incierto mañana que todos enfrentamos.
Es urgente que llevemos a cabo esta exploración. Parecería que en los últimos años la rudeza se hubiese extendido como virus, así como lo atestiguan los reportes sobre pasajeros aéreos rebeldes que son arrestados cuando los vuelos aterrizan. En las redes sociales se ha vuelto muy difícil ignorar las voces de odio. Las escuelas muestran un incremento en los índices de riñas, acoso y depresión, así como niveles elevados de ansiedad entre niños y adolescentes.3 Y, como veremos en la tercera parte, la serie de habilidades de la inteligencia emocional ofrece una ventaja esencial en el desafiante y duro clima de negocios de nuestra época. La necesidad de inteligencia emocional, no solo en nuestra vida, sino también en la sociedad, es más grande que nunca.
* Se publica con autorización de Penguin Random House Grupo Editorial.