“Convertir heridas en sabiduría y problemas en prosperidad”, aconseja Robin Sharma
Capítulo de “La riqueza que el dinero no puede comprar. Los 8 hábitos ocultos para una vida plena”, el más reciente libro del reconocido autor canadiense de libros de liderazgo y crecimiento personal. En Colombia con el sello editorial Grijalbo.
Robin Sharma * / Especial para El Espectador
La otra tarde, Elle se sentó en el sofá a mi lado, en la sala de estar de nuestra casa en la campiña italiana. Nos mudamos aquí hace unos años, con las posesiones más importantes de mi vida metidas en tres maletas. Necesitaba una nueva aventura, así que vendí mi casa, regalé muchas cosas y abandoné el país en el que había vivido durante cincuenta y cinco años. Después de aterrizar en Roma, esperamos en la cinta de equipajes, emocionados ante el inicio de nuestra nueva vida. Esperamos un rato más, y otro. Sí, nuestro equipaje se había perdido.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
La otra tarde, Elle se sentó en el sofá a mi lado, en la sala de estar de nuestra casa en la campiña italiana. Nos mudamos aquí hace unos años, con las posesiones más importantes de mi vida metidas en tres maletas. Necesitaba una nueva aventura, así que vendí mi casa, regalé muchas cosas y abandoné el país en el que había vivido durante cincuenta y cinco años. Después de aterrizar en Roma, esperamos en la cinta de equipajes, emocionados ante el inicio de nuestra nueva vida. Esperamos un rato más, y otro. Sí, nuestro equipaje se había perdido.
El universo tiene un delirante sentido del humor, ¿verdad? En fin, la tarde que estaba a punto de describirte, la perrita de Elle, Holly, que ahora se ha convertido en mi perrita porque está conmigo casi todo el tiempo, se sentó en mi regazo ronroneando como un gato (aunque sea una perra). Llamo a Holly «SuperChum» (Superamiga), porque eso es exactamente para mí. Al otro lado de los antiguos marcos de la ventana, vi el cielo del atardecer, ardiente y cautivador, de tonos rojizos con toques de naranja tostado. Era magia en su forma más simple. Italia tiene estas cosas. Un amigo me dijo hace poco: «Cuando vives aquí, lloras dos veces. La primera cuando llegas, porque no es el lugar más eficiente del mundo. Y después lloras una segunda vez, cuando tienes que marcharte». Sí, tan especial es.
Elle tenía una leve sonrisa en el rostro. Y de vez en cuando algunas lágrimas en los ojos. Estaba leyendo el manuscrito de este libro por primera vez. La escena era muy sencilla. Y profundamente perfecta. Entonces pensé: «Esto es riqueza». No digo que mi vida sea o haya sido alguna vez ideal. En absoluto. He pasado por dificultades dramáticas y he soportado momentos tremendamente duros. Me han derribado, me han tratado mal, me han traicionado y me han desanimado. Y, desde luego, no quiero que pienses que soy una especie de gurú que lo sabe todo. Porque no es así. Pero he descubierto cómo convertir los contratiempos en fortalezas, las heridas en sabiduría y los problemas en prosperidad. He aprendido a golpes muchas lecciones sobre cómo llevar una vida hermosa que compartiré contigo durante el tiempo que pasemos juntos en las siguientes páginas. Una vez tuve un monitor de esquí que me ayudó a esquiar mejor (porque es lo que hacen los monitores de esquí). Un día, mientras subíamos la montaña en el telesilla, me dijo: «Mira, los monitores de esquí no somos ricos, pero tenemos una vida rica».
Y ese hombre, con las mejillas siempre sonrosadas por el sol y el frío, una mujer a la que adoraba, hijos a los que quería y que vivía en una montaña con vistas que me dejaban sin aliento, era la persona más rica que he conocido nunca. De esto trata La riqueza que el dinero no puede comprar, de las riquezas verdaderas que a menudo tenemos ante nosotros, pero pasamos por alto porque nos han programado para no valorarlas. Pienso en esta cita de Dale Carnegie: «Todos soñamos con un mágico jardín de rosas en el horizonte en lugar de disfrutar de las rosas que florecen hoy al otro lado de nuestras ventanas». Así es, ¿verdad? Permíteme que te haga una pregunta: ¿por qué nuestra cultura adora al multimillonario y no al maestro que encuentra la manera de inspirar a una clase de veinte niños semana tras semana? ¿O al bombero que vela por la seguridad en nuestros hogares y nuestra comunidad con heroica dedicación? ¿O al jardinero que embellece las calles gracias a su incansable labor plantando, regando y cuidando las flores del barrio? Este libro trata de una filosofía y una metodología del éxito y la riqueza completamente nuevas que no nos enseñan y ni siquiera nos animan a considerar, pero que te proporcionarán felicidad constante, libertad personal y paz interior duradera. Ahora bien, como he comentado, estoy de acuerdo en que el dinero es importante.
Todos tenemos facturas que pagar, obligaciones que cumplir y actividades que cuestan dinero. Y contar con ahorros y una sólida situación económica te permite vivir con menos estrés, más libertad y una sensación de soberanía personal (hacer lo que quieres, donde quieres, cuando quieres y con las personas a las que quieres). De modo que sí, el dinero es un elemento fundamental para llevar una vida más rica. Debo ser muy claro a este respecto. Es importante, pero no lo único que importa. Como verás en el sistema de aprendizaje que estoy a punto de exponerte (que he enseñado durante muchos años a los clientes a los que asesoro con excelentes resultados), la prosperidad económica es solo una de las ocho formas de riqueza. He sido mentor de muchos multimillonarios en mis casi tres décadas de trabajo con grandes empresarios, deportistas famosos, estrellas de cine y líderes de movimientos de todo el mundo. Y puedo decirte sin temor a equivocarme que muchos de ellos lo único que tienen es dinero. Son ricos en dinero, pero pobres en vida. Debe irte bien en cada una de las ocho formas de riqueza para que puedas considerarte exitoso y una persona que de verdad vive en la abundancia. Y de forma hermosa (...)
En las páginas siguientes consideraremos con atención cada una de estas ocho formas de riqueza para que te resulte sencillo aplicarlas y divertido entenderlas, y marquen la diferencia en tu vida. En capítulos breves pensados como sesiones personales de mentoría diaria, te ofreceré ideas, sugerencias, instrucciones e historias inspiradoras para que puedas vivir con más plenitud cada una de ellas. Y, mientras lo haces, verás que serás recompensado con una vida más rica. El modelo de aprendizaje de las ocho formas de riqueza se basa en ocho hábitos ocultos (porque no se suelen considerar) que te insto a que adoptes:
Crecimiento: El hábito diario de la superación personal. Este hábito se basa en la idea de que los seres humanos somos más felices y más verdaderamente ricos cuando somos conscientes de nuestros dones personales y nuestros talentos primordiales. La búsqueda constante de crecimiento personal es uno de tus activos más valiosos.
Bienestar: El hábito de optimizar tu salud constantemente. Este hábito se basa en la profunda comprensión de que alcanzar la máxima vitalidad mental, emocional, física y espiritual y vivir una larga vida llena de energía, bienestar y alegría son fundamentales para que seas rico de verdad.
Familia: El hábito de que una familia feliz es una vida feliz. Este hábito se basa en el conocimiento de que tener todo el dinero y el éxito material del mundo no tiene ningún valor si estás solo. Así que enriquece las relaciones con tus seres queridos. Y llena tu vida de amigos fantásticos que aumenten tu felicidad.
Trabajo: El hábito del trabajo como plataforma para tus propósitos. Este hábito se basa en la práctica constante de ver tu trabajo como una búsqueda noble y una oportunidad no solo para sacar mayor partido de tu talento, sino también para hacer de nuestro mundo un lugar mejor. La maestría es un valor en el que merece la pena invertir.
Dinero: El hábito de la prosperidad como combustible para la libertad. Este hábito se rige por el principio de que la abundancia económica no solo está lejos de ser mala, sino que es necesaria para vivir de manera generosa, fascinante y original.
Comunidad: El hábito de convertirte en tu red social. Este hábito se estructura en torno al hecho científico de que el pensamiento, el sentimiento, el comportamiento y la producción de los seres humanos están profundamente influidos por sus relaciones, conversaciones y mentores. Para llevar una gran vida, llena tu círculo de grandes personas.
Aventura: El hábito de que la alegría procede de explorar, no de poseer. Este hábito se formula en torno a la realidad de que lo que crea gran alegría no son los bienes materiales, sino los momentos mágicos que pasamos haciendo cosas que nos llenan de gratitud, fascinación y asombro. Enriquece tus días con ellos y tu vida se elevará a un nuevo universo de inspiración.
Servicio: El hábito de que la vida es corta, así que sé muy servicial. Este hábito se basa en el convencimiento de que el objetivo principal de una vida rica es mejorar la vida de los demás. A medida que te pierdas en una causa que es más grande que tú, no solo encontrarás tu mejor yo, sino que iluminarás el mundo. Y descubrirás tesoros que van mucho más allá de los límites del dinero, las posesiones y el estatus social.
* Se publica con autorización de Penguin Random House. Robin Sharma también es respetado en todo el mundo por su labor humanitaria. Entre sus clientes en liderazgo y desarrollo personal ha tenido a empresas como Nike, FedEx, Microsoft, Unilever, Expedia, GE, HP, Starbucks, Yale University, PwC, IBM Watson y YPO.