Publicidad

Crearon una marca de arepas “vallenatas” que le hace homenaje al sabor del maíz

“Nuestras arepas están impregnadas con la esencia y el sabor auténtico de las tradiciones arraigadas de las tierras del Cesar y La Guajira. Un bocado que se convierte en un tributo a la rica herencia cultural, con una fusión de maíz puro y queso costeño para crear una sinfonía perfecta de texturas y sabores”, cuenta su emprendedora.

Tatiana Gómez Fuentes
17 de enero de 2024 - 08:00 p. m.
Ella es Claudia Cabello, la emprendedora detrás de un negocio gastronómico que le hace homenaje a las arepas.
Ella es Claudia Cabello, la emprendedora detrás de un negocio gastronómico que le hace homenaje a las arepas.
Foto: Cortesía Son de Maíz
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

“En enero de 2024, el éxito de Son de Maíz es innegable. ¿Quién iba a imaginar que pasaríamos de entregar 500 arepas al mes a más de 500.000 al año? La evolución es impresionante. Iniciamos en la cocina de la casa familiar, ahora tenemos seis puntos de venta estratégicamente ubicados en centros comerciales de Barranquilla y Cartagena.

La historia de nuestro emprendimiento no solo es un testimonio de triunfo empresarial, sino también un recordatorio de que los sueños, cuando se siembran con amor y dedicación, pueden crecer más allá de las expectativas. En esta familia no solo creamos una empresa, también le dimos paso al nacimiento de un legado delicioso que seguirá deleitando paladares y contagiando alegría en cada arepa que sale de nuestras manos”, así llegó esta historia a nuestra sección de 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos. Hablamos con Claudia Cabello, la emprendedora detrás de esta idea de negocio y esto fue lo que nos contó:

1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?

54 años, hice seis semestres de Ingeniería de Mercados.

2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?

Mi idea comenzó en el 2016 con la creación de una marca de arepas de maíz, un producto muy conocido en la región donde nací y me crié, Villanueva, en la Guajira. Luego de pasar por varios procesos, pruebas de ensayo y error, llegó la pandemia y en medio de esta situación, decidí junto a mi esposo comenzar a hornear las arepas que en sus inicios eran preasadas. De esta manera y pasado un tiempo, decidimos darle nombre al emprendimiento y darlo a conocer en el mercado, es importante decir que antes vendía el producto sobre pedido, ahora ya tenemos seis puntos físicos, cinco en Barranquilla y uno en Cartagena para comercializar nuestras arepas.

Lo que comenzó como el sueño emprendedor de una familia se ha transformado en una vibrante odisea culinaria que ha conquistado corazones y paladares por igual. Soy Claudia Cabello y junto a mi esposo y mis dos hijos mayores, cada uno con sus esposas, decidimos hace un año y diez meses aventurarnos en el fascinante mundo del emprendimiento. Lo que comenzó con apenas seis valientes almas, hoy se ha convertido en una familia empresarial de más de 30 personas, unidas por la pasión de llevar la auténtica esencia de las arepas vallenatas a cada rincón de la costa Caribe.

3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?

Por la necesidad de tener un proyecto de vida que nos permitiera tener una mejor calidad de vida y mejorar nuestros ingresos. En 2022 invité a mi familia a hacer parte de este proyecto y fue cuando empezó a tomar fuerza Son de Maíz y empezamos a aportar desde las fortalezas que tenía cada uno.

Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.

4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?

Creamos una sociedad con mis hijos y mi esposo. Cada uno aportó un capital que nos permitió poner en marcha este proyecto gastronómico.

5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?

Son de Maíz nos ha permitido brindar oportunidades de trabajo y estabilidad laboral directa e indirecta. Además. hemos logrado llevar el producto de la arepa de maíz a una experiencia gastronómica con la que muchos clientes se pudieran identificar. La arepa es un alimento de tradición colombiana, así como el maíz, esto hace que resaltemos nuestros sabores y nuestra identidad.

6. ¿Soy feliz?

Inmensamente feliz, cada día amo más lo que hago. Son de Maíz me ha despertado una cantidad de sentimientos que me han demostrado de qué estoy hecha. Sigo subiendo escalones para darle más fuerza y potencial a mi negocio.

7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?

No, nuestro sueño es dejar este legado para que nuestras futuras generaciones sigan con el proyecto tan hermoso llamado Son de Maíz.

8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?

Todo emprendimiento conlleva un proceso hasta llegar a la idea final. Lo duro para mí, fue ese proceso, muchas veces me sentí desmotivada, estancada y frustrada.

9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?

Lo estoy cumpliendo, sin embargo, me hace falta posicionar más mi marca a nivel nacional. Esperamos que con la apertura del nuevo punto en Cartagena nos conozcan más y se corra el voz a voz de esta marca que tiene como ingredientes principales la familia y el amor.

Una historia para destacar: Ella creó una plataforma digital que conecta la industria textil con el mundo

10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?

Seguir mejorando el producto y el plan de negocio para seguir creciendo a nivel nacional.

11. ¿Mi emprendimiento es escalable?

Sí, claro que es escalable, de hecho nuestro emprendimiento en estos momentos ha escaldo, nos expandimos a Cartagena. Abrimos nuestro primer local en esta ciudad el pasado 11 de enero.

12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?

No, en estos momentos estamos enfocados en que sea nuestra familia quienes inviertan en este proyecto.

13. ¿Qué no volvería a hacer?

A desconfiar de mis capacidades.

14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?

Mi abuela fue mi mayor inspiración, de ella aprendí el valor de llevar sabores ricos al paladar, la importancia de la familia y de luchar por lo que siempre se quiere. Gracias a ella el amor por la cocina late en mí, no solo se trata de cocinar sino de transmitir emociones en cada bocado.

15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?

Muchas veces, el fracaso siempre aparece en el proceso de emprender. Hay miedo, pero las ganas siempre vencen esos sentimientos, la mejor motivación es la comida, así que gracias a ella no hemos desfallecido como empresa familiar.

16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?

No, este es un proyecto familiar y cada uno tiene un rol dentro de la empresa.

17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?

Sí, nuestro proyecto es un modelo para los futuros emprendedores que deseen iniciar con sus ideas de negocio y desarrollarlos. El sector gastronómico abre muchas posibilidades, así que otros pueden ver lo que nosotros hemos logrado para alentarse a hacerlo con el producto que se ajuste a sus necesidades.

18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?

Llevando mi experiencia gastronómica a otros países, expandiendo mis puntos de venta e innovando el producto con el sabor de mi tierra.

19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?

Definitivamente han sido fundamentales en este proyecto. Su apoyo y respaldo han sido indispensables para lograr este sueño que tiene altas y bajas. El acompañamiento ha permitido que cada día se aterrice mejor la idea para impactar el sector gastronómico de todas las formas posibles.

Puede interesarle: “Aplicar ciencia en problemas de negocio te puede solucionar la vida”

20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?

Sí, claro. Lo bueno debe replicarse y compartirse.

21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?

Mi equipo es mi familia, ellos son mi mayor soporte y apoyo. Mi esposo, mis hijos, mis empleados, todos han puesto su corazón al servicio de este proyecto.

22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?

El amor a mis raíces de provincia es mi sello. Nuestras arepas invitan a conectar con las emociones, es un producto que refleja lo que somos y de dónde venimos.

23. ¿Qué he aprendido de todo esto?

Principalmente, a vencer los obstáculos que implica emprender una idea de negocio. Por otra parte, aprendimos la importancia de la constancia, la organización y la disciplina.

Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻‍💻 🤓📚

Temas recomendados:

 

Jose(11868)18 de enero de 2024 - 03:02 p. m.
Que poco ingenio
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar