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El emprendedor que creó un modelo, diez veces más rápido, para pagos con tarjeta

“Estamos cambiando la manera en la que se mueve el dinero. Queremos que cualquier persona o empresa con una cuenta bancaria (o billetera) pueda ser parte de la economía global”, dice.

Edwin Bohórquez Aya
02 de febrero de 2023 - 11:39 p. m.
Alejandro Pinzón tiene 32 años y es el CEO de Druo.
Alejandro Pinzón tiene 32 años y es el CEO de Druo.
Foto: FERNANDO OTERO

Esta ha sido una de las explicaciones más didácticas y claras que nos han entregado cuando hacemos aquella pregunta de qué es lo que hacen: “Pagar es demorado y difícil porque cada transacción debe pasar por casi 12 intermediarios. Cuando, por ejemplo, se paga la cuenta en un restaurante con tarjeta, esa transacción pasa por lo menos por: la empresa que hizo el datáfono, una pasarela de pagos, el banco al que pertenece la tarjeta, una red que conecta a todos los bancos, la tarjeta de crédito y el banco del restaurante al que se le está pagando ¡Una locura! Y al final el restaurante termina recibiendo el dinero entre 1 y 3 días después. Durante el proceso de pago cada intermediario cobra un porcentaje y además agrega tiempos al procesamiento. Esa es la razón detrás de las demoras en las transacciones y si hablamos de transacciones internacionales es aún más complejo y demorado”.

La explicación sigue: “Druo es un sistema de pago completamente diferente porque le permite a las empresas cobrar y pagar directamente a su cuenta bancaria sin necesidad de pasar por tantos intermediarios. Lo que quiere decir, que con Druo el dinero pasa de la cuenta de origen a la cuenta destino, optimizando el proceso. Esto resulta no solo en una transacción más rápida, sino también más segura porque nos conectamos directamente con los bancos. Al eliminar a tantos intermediarios, las empresas también pagan menos, lo que es importante porque estas ganan solo un porcentaje de lo que venden. Si una empresa gana el 10% por un celular, a veces termina pagando entre el 3% y el 4% sólo por procesar la transacción”. La respuesta estuvo en manos de Alejandro Pinzón, CEO de Druo, a quien entrevistamos en nuestra sección 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos:

1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?

Alejandro Pinzón, tengo 32 años y estudié Administración de Empresas.

2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?

La idea de Druo nació hacia finales del 2021 y responde a lo que por muchos años fue también una necesidad personal. A lo largo de mi vida he creado 4 empresas y siempre los pagos han sido de los procesos más difíciles y dolorosos de manejar, a pesar de ser una de las partes más importantes de cualquier negocio.

Me gustan los retos difíciles y resolver problemas grandes, por lo que decidí hace varios años dedicarme a construir sistemas de pago tradicionales, esto me llevó a desarrollar 6 en diferentes países, incluyendo Colombia, Perú, Estados Unidos y Australia. Sin embargo, me cansé de lo engorroso que puede ser el procesamiento de pagos tradicionales debido a la cantidad de intermediarios que lo conforman, pues cada intermediario termina agregando costos, tiempos y complejidad innecesaria al proceso.

Es por esto que me puse la meta de crear una solución 10 veces mejor a lo actual, que resolviera los grandes retos que tienen las empresas hoy en día para recibir pagos y pagarle a terceros: mover dinero directamente desde la cuenta origen a la cuenta destino sin intermediarios.

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3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?

Mi objetivo siempre fue claro, poder debitar y acreditar cuentas bancarias directamente sin necesidad de pasar por tantos intermediarios. Aunque el proceso suena fácil e incluso intuitivo, es el claro ejemplo de que la simplicidad es compleja de lograr.

Para materializar ese objetivo no solo fue necesario poner en práctica el conocimiento para construir tecnología, sino también crear un modelo de negocio, un modelo legal, y un modelo operativo que funcionara y nos permitiera operar y garantizar rentabilidad tanto para nosotros como para nuestros clientes.

4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?

Con mi socio utilizamos nuestros ahorros, lo que nos otorgó lo suficiente para empezar a poner Druo en marcha con un equipo de 10 personas. No requerimos de inversionistas para completar el producto, venderlo, ni operarlo. Druo es una muestra viva de que trabajando engranados inteligentemente se logran resultados enormes sin necesidad de tanto capital.

5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?

En Druo creemos en la tecnología como herramienta para mejorar la vida de las personas, optimizar los procesos empresariales y la productividad de la economía. Con este sistema de pagos simple, las empresas mueven su dinero sin intermediaciones, reduciendo los tiempos y los procesos en el sistema financiero.

De esta forma estamos cambiando la manera en la que se mueve el dinero. Queremos que cualquier persona o empresa con una cuenta bancaria (o billetera) pueda ser parte de la economía global.

6. ¿Soy feliz?

Definitivamente así es y además de feliz soy un optimista sin cura que ama lo que hace.

7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?

En un futuro incierto todo es una posibilidad, sin embargo, tengo claro que quiero crecer mucho con Druo, es un proyecto que no solo representa el esfuerzo y trabajo que con mi socio hemos consagrado a los sistemas de pago, sino que también es un recordatorio de que siempre se puede ser disruptivo y que solo cuando nos atrevemos a pensar diferente es posible evolucionar y crear soluciones a necesidades que a veces pensamos que no pueden ser satisfechas.

Druo es una herramienta que sabemos que puede mejorar la vida de las personas y las empresas optimizando un proceso muy necesario y a la vez engorroso: los pagos.

8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?

Emprender es difícil, es un reto constante que en la mayoría de los casos solo es movido por la pasión y la certeza de que existe un objetivo por cumplir y una necesidad por solucionar. Sin embargo, la montaña rusa de emociones que acompañan el proceso tiende a ser abrumante a veces.

Cuando la mente, el corazón y el esfuerzo están conectados a un mismo objetivo es posible tener días muy buenos y otros muy malos, donde todo arde en fuego y el emprendedor es el único que lo debe resolver. Me apasiona tanto lo que hago que solo tener los primeros me permite sobrellevar los segundos, porque sé que trabajo por una causa y que existe un bien mayor al final de todo el caos.

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9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?

Definitivamente sí, mi sueño y propósito de vida es contribuir, quiero contribuir al mundo y ayudarle a las personas a tener vidas más prósperas. Me siento muy afortunado porque encontré mi forma de hacerlo y con la tecnología como aliada he podido construir y desarrollar herramientas que me permiten serle fiel a ese propósito.

10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?

El camino es largo aún, busco continuar creando productos que deleiten a nuestros usuarios para resolver uno de los problemas más relevantes de nuestra generación: facilitar el movimiento de dinero.

11. ¿Mi emprendimiento es escalable?

Definitivamente es un emprendimiento escalable, desde Druo vamos a conectar el mundo entero una cuenta bancaria a la vez.

12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?

Como compañía no nos cerramos a esa posibilidad. En Druo creemos que los inversionistas, particularmente los institucionales, que cuentan con buena reputación y estabilidad, nos ayudarán a escalar este modelo globalmente.

13. ¿Qué no volvería a hacer?

Para mi esta respuesta es más que clara, emprender solo. El camino del emprendedor/fundador individual tiende a ser muy solitario, y es esta perspectiva la que me ha llevado a entender cuánto valor tiene poder construir de la mano con otra persona, es un proceso mucho más enriquecedor y da el soporte que se necesita para soñar en grande.

Ahora uno de mis lemas es, que es mejor tener un porcentaje menor de algo grande que el 100% de algo que se queda pequeño y limitado por nuestra capacidad individual.

14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?

Se podría decir que Steve Jobs y Elon Musk son grandes referentes en mi trabajo, líderes y visionarios que no se detuvieron ante grandes retos y terminaron cambiando el status quo y desarrollando nuevas reglas de juego.

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15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?

Definitivamente, como dicen por ahí, el fracaso siempre hace parte de las grandes historias. He cerrado varias compañías y cada una me trajo nuevos y diferentes aprendizajes. De hecho, lo que hace Druo hoy en día es el resultado de 2 fracasos anteriores que cambiaron mi forma de pensar y me enseñaron lo que necesitaba para desarrollar una herramienta que hoy sabemos que puede mejorar la vida de las personas y las empresas optimizando los procesos de pago.

16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?

Claro que sí, pertenezco a Fintech Colombia, al igual que a la comunidad de Founders LGBTQ+ de Latam.

17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?

Definitivamente, sabemos que Druo es una herramienta que puede mejorar la vida de las personas y las empresas, por ende, son muchas las comunidades y espacios a los que puede impactar al permitir optimizar los procesos de pago. Con la trayectoria que visualizamos esperamos impactar a varias generaciones.

18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?

En 10 años nos vemos atendiendo al mundo entero y cambiando la manera en la que se mueve el dinero con nuestro producto.

19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?

Mi familia y mis amigos han jugado un papel fundamental en el proceso, pues siempre han estado ahí, ya sea para dar ideas, apoyar con contactos, o simplemente acompañarme tanto en los días buenos como en los malos. Contar con ellos en todo momento y sentirme respaldado definitivamente ha hecho la diferencia. Es una de las razones por las que me siento tan afortunado, ya que no solo estoy cumpliendo día a día mi propósito de vida sino que lo he hecho siempre contando con el respaldo y el cariño de personas especiales.

20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?

Por supuesto que sí, por experiencia propia sé lo importante que es el apoyo y el consejo en el camino del emprendimiento, es por esto que llevo varios años ayudando contínuamente a otros emprendedores. Me encanta poder transmitir mis experiencias para aportar en el camino de soñadores, que como yo tienen una pasión y un objetivo que los impulsa a soñar en grande.

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21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?

Una empresa es tan exitosa como su capacidad de construir un buen equipo, y en Druo hemos sido afortunados de contar con el mejor. La mayoría de personas que conforman esta empresa han estado conmigo tanto en las buenas como en las malas. Todas las emociones que acompañan las montañas rusas del emprendimiento las hemos vivido juntos, y eso ha hecho que creemos un lazo maravilloso siempre guiado por un objetivo común, mejorar la vida de las personas por medio de la tecnología. Con algunos de ellos he vivido las experiencias más difíciles de mi vida y tenerlos a mi lado no tiene precio.

22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?

Primero las personas, creo que no hay nada que represente tanto mi trabajo como esa frase. Procuro cuidar mis relaciones personales antes que cualquier otra cosa. En los momentos más difíciles es ese relacionamiento el único que puede cambiar todo para bien, son las buenas personas las que tienen ideas que generan buenas acciones. Ese es mi propósito de vida, hacer el bien, mejorar la vida de las personas de la mano de la tecnología.

23. ¿Qué he aprendido de todo esto?

Aprendí que siempre debo hacer lo que me gusta y lo que me apasiona. Todo lo demás se logra si existe ese componente, pues es este, el encargado de otorgar la energía y persistencia que se necesita para luchar por ello y afrontar los momentos difíciles. Creo que el mayor consejo que le puedo dejar a los lectores es que no creen empresas para solucionar problemas que no les interesen o les apasionen.

Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻‍💻 🤓📚

Edwin Bohórquez Aya

Por Edwin Bohórquez Aya

Comunicador social-periodista. MBA Inalde Business School. Premio Iberoamericano de Periodismo Económico IE Business School, Madrid (España). Premio a Mejor trabajo periodístico de Analdex, categoría prensa@EdwinBohorquezAebohorquez@elespectador.com

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