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“Es difícil proyectarse en un periodo tan largo de tiempo, la vida me ha enseñado a vivir el día a día con su afán para ir construyendo de a poco una empresa sólida que a futuro pueda unirse con mi carrera, lograr que de alguna forma pudiese empezar a financiar algún tipo de proyecto social que tenga algún impacto en jóvenes de territorios con bajos recursos o pocas oportunidades de estudio, y poder motivar a emprender teniendo en cuenta sus capacidades y cualidades”, así respondió Paula Cuéllar a la pregunta de cómo se ve en 10 años y el futuro de su emprendimiento en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos. Hablamos con ella en Emprendimiento y Liderazgo y aquí está la historia de Gitana, su idea de negocio:
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
Tengo 27 años, soy politóloga de la Universidad Javeriana y actualmente estoy estudiando la maestría de Gerencia y Practica del Desarrollo en la Universidad de los Andes.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
Hace muchos años yo empecé a usar las llamadas tote bags, o bolsas de tela rústica para diferentes actividades: hacer mercado, hacer deporte, salir a caminar y hasta para ir a la universidad. Me encantaban por su comodidad e informalidad, pero no encontraba muchas opciones de diseños que tuvieran cierto humor o ilustraciones que hicieran alusión a las vivencias de la vida diaria.
Las tote bags Gitana tienen una vida útil muy larga debido al material que usamos para fabricarlas, la tela de lienzo permite ser lavada y planchada sin ningún problema, además de ser super resistente al peso y al uso constante, no hacemos grandes cantidades de impresiones de nuestros diseños precisamente evitando el desperdicio de material o acumulación de mercancía que terminaría siendo desechada y logrando una cierta exclusividad en mis diseños.
3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
Duré varios meses investigando y preparando los diseños tratando de que fueran los más llamativos y exclusivos posible, con una mezcla de sátira y realidad, buscando los proveedores de telas y estudiando la mejor técnica de impresión, no solo para que quedara bien en la tela sino para que durara mucho tiempo sin desgastarse.
Mi papá es editor y me contactó con su impresor, que es ahora mi proveedor de etiquetas y stickers de la marca, él a su vez me ayudó a contactar al proveedor de las telas, que me ayuda a ensamblar las bolsas y luego imprimirlas. Empecé empacando las bolsas en papel Kraft con un sello de la marca y una nota de agradecimiento. Ahora van empacadas como un regalo en cajitas individuales acompañadas de unos stickers de regalo de parte de Gitana para todos los que adquieren nuestros productos.
La forma de empacarlas y de presentarlas ha ido mejorando con un toque de elegancia y exclusividad.
Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
Una parte salió de mis ahorros y la otra un préstamo que me hizo mi papá para la primera producción. Afortunadamente la primera colección de bolsas tuvo una gran acogida y se vendió al 100% con lo que no solo pude pagar la inversión inicial sino también continuar con la producción e ir ampliando nuestra gama de diseños.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
He logrado retarme y adquirir mayor confianza en mis capacidades y creatividad, la única empleada de Gitana soy yo. Empaco, manejo las redes, manejo el inventario y despacho.
6. ¿Soy feliz?
Muy feliz. No solo por la acogida que ha tenido mi emprendimiento, sino también por lo que este ha significado para los que han adquirido las bolsitas, por su diseño y presentación se han vuelto un regalo muy especial para mamás, hijas, amigas, novias, novios y abuelas, es un producto que no tiene edad ni género.
7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
No, aún tiene mucho para dar, muchas cosas que quiero hacer y construir, todo está por venir.
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Siempre es retador, soy bastante perfeccionista y la duda de si va a funcionar o no siempre estuvo presente, pero, aunque no es fácil y requiere tiempo y dedicación, desde muy pequeña me ha gustado emprender.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
Claro que lo cumplí, es muy satisfactorio ver que una idea se vuelve una realidad que es muy acogida y apreciada por el mercado
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10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Gitana es un emprendimiento que nació hace muy poco y tiene muchísimo más para dar, vienen nuevos productos, nuevos diseños y mucho aprendizaje.
11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
Claro que sí, todavía hay mucho camino y mercado por recorrer.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
Todavía no es necesario, el crecimiento lo he ido financiando con los buenos resultados logrados.
13. ¿Qué no volvería a hacer?
Quizás, no ser tan desconfiada y creer más en mi mismo. En la primera producción fui muy modesta y muchos de los diseños se agotaron muy rápido.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Mi familia, siempre han apoyado cualquier idea de emprendimiento que he tenido por más pequeña que sea, mi papá tiene su propia editorial (Cuéllar Editores) mi mamá una inmobiliaria (Casa Brokers) y mi hermano Alejandro Cuéllar, chef y emprendedor nato que tristemente falleció hace tres años, pero que aún ahora sigue siendo una gran inspiración y acompañando gran parte de mis creaciones y de lo que me propongo.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
Sí, iniciando tenía muchas dudas y miedo por las ventas y por lo que pensaran del producto, de sus diseños y de si iba o no a gustar.
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16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
No.
17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
Seguramente sí, pues es una muestra de que los proyectos hechos con amor, buena inspiración y dedicación, funcionan.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
Es difícil proyectarse en un periodo tan largo de tiempo, la vida me ha enseñado a vivir el día a día con su afán para ir construyendo de a poco una empresa sólida que a futuro pueda unirse con mi carrera, lograr que de alguna forma pudiese empezar a financiar algún tipo de proyecto social que tenga algún impacto en jóvenes de territorios con bajos recursos o pocas oportunidades de estudio, y poder motivar a emprender teniendo en cuenta sus capacidades y cualidades.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
Un papel supremamente importante, son uno de los grandes pilares de este proyecto, son mi mayor apoyo, el primer filtro de los diseños y accesorios que planeo incluir en el catálogo de la marca, los modelos, camarógrafos, etc.
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20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
Claro que sí, incluso antes de emprender, apoyaba mucho a emprendedores colombianos, me parece un ejercicio muy retador por muy grande o pequeño que sea y sin duda entre emprendedores debe haber apoyo y colaboración
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
Pues el equipo de Gitana es muy pequeño, mi perro, mi gata y yo somos los únicos empleados, mi casa es la oficina, bodega, zona de empaque y de despacho. Pero el apoyo de mi familia me ha ayudado a mantener el ánimo y la confianza en lo que estoy construyendo.
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
No buscar pretender más allá de lo que es, un emprendimiento que hasta ahora está empezando y que poco a poca y gracias a quienes han apoyado la idea desde su inicio, va a ir construyendo grandes cosas. Gitana es una marca de productos útiles que puedan ser usados por mujeres, hombres, niños jóvenes y adultos.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
Que no basta con tener una buena idea o una base económica para iniciar, mucho depende de empezar verdaderamente y tener constancia en lo que se haga. Hay muchas y muy buenas ideas, pero materializarlas requiere mucha dedicación, tiempo y cariño. La primera persona en que debes confiar para el desarrollo de una idea debe ser en uno mismo.
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