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La chocolatería que se cocinó en un cultivo agroforestal y ahora es emprendimiento

Desarrollan productos pintados a mano como bombones rellenos y tabletas de chocolate con diferentes porcentajes y combinaciones con ingredientes como la cholupa, la achira y el café, entre otros.

Tatiana Gómez Fuentes
24 de julio de 2024 - 08:00 p. m.
Óscar Eduardo Mora, el emprendedor detrás de La Montaña Chocolates.
Óscar Eduardo Mora, el emprendedor detrás de La Montaña Chocolates.
Foto: La Montaña Chocolates

“Como productores de cacao y transformadores chocolateros, desarrollamos productos y servicios para consumidores de todas las edades, exaltando la calidad de este alimento, generando una cultura chocolatera en las nuevas generaciones, presentándoles productos pintados a mano con colores llamativos como bombones rellenos y tabletas de chocolate con diferentes porcentajes y combinaciones con ingredientes representativos de nuestra región como la cholupa, la achira y el café”.

Así empieza a contar cómo nació su idea de negocio, Óscar Eduardo Mora, uno de los fundadores de La Montaña Chocolates. Hablamos con él en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos y esta es su historia.

1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?

38 años, Técnico en chocolatería.

2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?

Nuestra idea comenzó a gestarse hace aproximadamente ocho años con el propósito de darle un valor agregado a nuestro cultivo, realizando la transformación del cacao a chocolate, para así poderlo llevar al consumidor final, teniendo en cuenta que los precios del cacao eran muy bajos. De esta manera creamos de manera formal un emprendimiento hace tres años, dedicado a la producción y transformación del cacao fino y de aroma.

3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?

Los primeros cuatro años del proyecto nos dedicamos a conocer a fondo nuestro cultivo y sus procesos, teniendo en cuenta que realmente no sabíamos nada sobre cacao ni chocolate. Adquirimos conocimientos investigando en internet y acudimos a Fedecacao para que nos asesoraran en todos los procesos de cosecha y postcosecha para así lograr como resultado un cacao de calidad.

Paralelo a esto, iniciamos con las pruebas en los procesos (selección de grano, tostón, descascarillado y molienda). Fue un proceso muy agradable porque arrancamos sin ningún tipo de maquinaria, tostábamos en paila, descascarillábamos y molíamos a mano, esto hizo que cada día le tomáramos más cariño al proceso. Después de años de pruebas decidimos dar el siguiente paso que fue lanzarnos al mercado.

Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.

4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?

Cuando decidimos salir al mercado, los primeros clientes fueron nuestros familiares, a ellos les gustó mucho el chocolate y comenzaron a recomendarnos con sus amigos y a generarnos publicidad. Cada unidad vendida era un ingreso que ahorrábamos con el fin de comprar las herramientas para seguir trabajando; para las máquinas más costosas, recurrimos a créditos con los bancos, que todavía estamos pagando. También hemos recibido capital semilla de Ecopetrol y de la gobernación.

5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?

Estamos logrando que cada día, más adultos, jóvenes y niños conozcan la calidad de cacao que tenemos en el departamento y la variedad de productos que se pueden desarrollar. Asimismo, buscamos transformar la alimentación de nuestros consumidores, teniendo en cuenta que al consumir chocolate con altos contenido de cacao, están adquiriendo para su organismo, todas las propiedades que nos otorga este superalimento.

6. ¿Soy feliz?

Sí, por supuesto que sí, tener una relación directa con el campo y poder generar un valor a nuestro cultivo es sumamente enriquecedor. Ver la satisfacción en el rostro de los clientes al consumir nuestro chocolate, nos hace muy felices.

7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?

No, nosotros le hemos puesto alma, vida y corazón a nuestro proyecto y por el momento es una opción que no se contempla.

8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?

Fue muy difícil, el hecho de emprender trae consigo muchos retos, por un lado, están nuestros hijos, ellos son lo más importante. Durante tres años todos los fines de semana estábamos ofertando nuestros productos, así que tuvimos que sacrificar tiempo con ellos. Por otro lado, está el factor económico que es muy significativo para iniciar y avanzar porque a medida que vamos creciendo se va necesitando más maquinaria e insumos, a veces no estamos preparados para emprender y esto hace que se cometan muchos errores.

9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?

Todavía no lo hemos cumplido, estamos en el proceso, sabemos que el camino no es tan rápido. Afortunadamente, estamos trazándonos metas que paso a paso se han desarrollado, esto nos ha ido acercando a nuestro sueño.

10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?

Ahora sigue la apertura de nuestra tienda física en la cual vamos a poder desarrollar y diseñar cada vez más productos para todos los gustos y de esa manera seguir generando esa cultura de consumo saludable de cacao y chocolate.

11. ¿Mi emprendimiento es escalable?

Claro, al ser productores de cacao contamos con la materia prima más importante, esto hace que las inversiones que se realizan con las ganancias no sean tan elevadas.

12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?

Puede ser una posibilidad, tendríamos que revisar muy bien las opciones. Si el inversionista coincide con nuestras ideas, puede ser una opción viable.

13. ¿Qué no volvería a hacer?

Lo ideal sería no cometer los errores del pasado, sin embargo, todos los aciertos y desaciertos nos trajeron a este punto y nos enseñaron valiosas lecciones.

14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?

En casa nos gustan mucho las tardes de película y en una ocasión, ya hace 10 años, escogimos la película Charlie y la fábrica de chocolates, cuando terminó, mi hijo mayor en su inocencia me hizo la pregunta “¿papi si tenemos en la finca cultivo de cacao porque no tenemos una fábrica de chocolates?”, en ese momento se sembró la idea de nuestro emprendimiento.

15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?

En el proceso de emprender hemos experimentado muchos momentos, los que no han sido tan buenos, no los consideramos como fracaso sino como aprendizajes, cada tropiezo nos deja una enseñanza y de esta manera nos vamos fortaleciendo más para afrontar los futuros inconvenientes o percances que lleguen.

En ocasiones algunas de las metas que nos trazamos, son difíciles de cumplir, y en el proceso se generan frustraciones y se contempla la idea de tirar la toalla, sin embargo, si alguno de los dos quiere rendirse el otro lo motiva a seguir adelante, de esta manera nos apoyamos y evitamos quedarnos en el camino de seguir luchando por nuestro sueño.

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16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?

Hemos recibido ayuda de entidades muy importantes como Fedecacao y la Cámara de Comercio del Huila, entre otras. Estas instituciones nos han apoyado con capacitaciones, cursos, participación en ferias departamentales, nacionales e incluso internacionales con sus programas de apoyo a los emprendedores, generándonos espacios muy relevantes para la comercialización y el posicionamiento de marca.

17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?

Sí, cada vez más jóvenes quieren iniciar en el mundo de la chocolatería al ver todas las posibilidades que hay al momento de trabajar con este hermoso producto. Además, en los últimos años se ha evidenciado un aumento del consumo saludable de chocolate, al conocer todas sus propiedades y beneficio que trae al consumirlo.

18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?

Me veo cumpliendo el sueño de lograr establecer a Bried Chocolatería como una de las mejores chocolaterías, siendo reconocida a nivel departamental y nacional por sus chocolates y por la variedad de productos, exaltando la calidad del cacao Huilense.

19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?

Muy importante, ellos nos han apoyado en todo este camino. Desde el principio la familia depositó mucha confianza en nuestra idea, y en tiempos difíciles, siempre han estado para darnos la mano. Además, nos han ayudado a promocionar nuestro producto con sus amigos y allegados, trayendo más clientes.

20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?

Sí, claro que sí, sabemos que el camino no es sencillo, y si podemos ayudar con el conocimiento que hemos adquirido en estos años a otras personas que quieren emprender en el mundo del chocolate lo haremos con mucho gusto. De esta manera logramos visibilizar la excelente calidad de cacao que tiene nuestro departamento.

21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?

Mi equipo es mi esposa, ella ha jugado un papel muy importante, es la persona que se encarga del diseño de todos nuestros productos. Además, los dos tenemos el mismo objetivo, y el mismo sueño.

22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?

Fusionar el cacao con diferentes ingredientes como productos representativos de nuestra región (achira, cholupa y café), todo esto combinado con el arte en nuestros chocolates, el amor que le ponemos a cada uno de ellos y por supuesto a la buena atención, eso genera diferentes experiencias en cada uno de nuestros clientes.

23. ¿Qué he aprendido de todo esto?

Mi emprendimiento me ha traído muchos aprendizajes en estos cuatro años que llevamos en el mercado. Como productor de cacao he mejorado mucho los procesos en el cultivo para tener una materia prima de calidad, y como emprendedor me ha ayudado a socializar y conocer a diferentes personas, a comercializar mi producto y a llevar una negociación, también me ha impulsado a ser más creativo y a enseñar el poco conocimiento que he adquirido en estos años.

Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻‍💻 🤓📚

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