Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
“Somos una marca de moda lenta, que se dedica a crear prendas atemporales y duraderas a partir de fibras naturales y procesos más sostenibles que abarcan desde el diseño hasta la prenda terminada. Todas nuestras piezas son elaboradas una a una bajo pedido por artesanos locales, en nuestro taller ubicado en el Oriente antioqueño. Solamente producimos a baja escala para garantizar el cuidado en los detalles y la disminución de los desperdicios de producción. Nos inspiramos en las siluetas simples y naturales para lograr un closet cápsula a partir de prendas versátiles, que puedan combinarse fácilmente entre ellas, porque estamos convencidos de que podemos consumir menos pero mejor”.
Así empieza a contar cómo nació su idea de negocio Verónica Pérez Carmona, la fundadora de Nahual. Hablamos con ella en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos y esta es su historia.
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
29 años, Diseño de Modas.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
Nahual nació hace tres años a raíz de que en mi entorno cercano no encontraba una marca con la que me sintiera identificada en cuanto a valores y que tuviera un propósito más allá de simplemente vestirme. Sentía la necesidad de libertad y expresión de mi personalidad, pero no encontraba la forma de proyectarlo. Quería que mis prendas tuvieran un porqué y un para qué que aportara positivamente a este planeta, no solo crear sin sentido. Por eso, nuestras prendas se elaboran una a una, para conservar esa parte humana y artesanal que les da el alma a esos pequeños detalles.
He inventado una marca que reconecta a las personas con sus orígenes y la historia detrás de las cosas, demostrando que podemos hacer lo mismo pero mejor. Con Nahual, comunico una filosofía de vida más consciente y equilibrada con nuestro entorno a través de la moda.
3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
Con voluntad y constancia. Tener la disposición para aprender lo necesario en el proceso, me ha permitido contar con el apoyo de personas increíbles que han creído en este sueño y me han impulsado a crecer.
Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
Nahual empezó con muy pocos recursos. Fue gracias al apoyo de mi mamá, quien compartió un pequeño ahorro conmigo, que pude comenzar este sueño con una máquina de coser de segunda, en el comedor de mi casa.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
Estoy creando conciencia en las personas para mejorar sus hábitos de consumo con soluciones prácticas y sostenibles. Están comprendiendo cómo sus decisiones impactan no solo al medio ambiente, sino también a la calidad de vida de quienes participan en la creación de nuestros productos. Además, mi emprendimiento reivindica el valor del trabajo artesanal.
6. ¿Soy feliz?
¡Sí, soy muy feliz por estar manifestando todos mis sueños! Estoy en un momento en el que la vida me sorprende con oportunidades y personas maravillosas que me ayudan a conectar los puntos, dándome claridad y enfoque para lograr todo lo que quiero para mi futuro. No hay nada más satisfactorio que cuando me dicen que no pueden dejar de usar mis prendas porque les encantan. Es la mejor sensación del mundo y siento que estoy cumpliendo mi propósito.
7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
No, no lo vendería. Este proyecto se ha convertido en el proyecto de mi vida y está completamente ligado a mis valores y mi forma de vivir en conexión con la naturaleza. Eso no tiene precio.
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Emprender ha sido todo un reto, ya que requiere salir de nuestra zona de confort, arriesgarnos y aprender constantemente. Este proceso pone a prueba nuestra paciencia y resistencia, especialmente porque apostamos por una forma de consumo que va en contra de la acelerada industria textil.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
Sí, estoy cumpliendo mi sueño y me siento muy satisfecha de estar materializando todo lo que siempre quise para mi marca. Aún me falta ampliar mucho más mi mercado y posicionar a Nahual en mercados internacionales. Me encantaría que nuestra filosofía de moda consciente llegue a más personas alrededor del mundo.
10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Vamos a continuar investigando sobre materiales y prácticas sostenibles para aplicarlas en nuestras colecciones. Trabajaremos en construir un equipo que comparta nuestros valores, con el fin de crecer en producción y participar en ferias empresariales del país. Esto nos permitirá ampliar la visibilidad de la marca y seguir promoviendo nuestra visión de moda consciente y sostenible.
11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
Completamente, es escalable. Sin embargo, queremos planearlo y desarrollarlo de manera responsable y estratégica para encontrar un balance adecuado entre la producción, la atención personalizada y la sostenibilidad.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
No recibiría inversión de un desconocido y menos la cedería, ya que pueden existir muchos factores que podrían poner en riesgo el trabajo de años con la marca, no me cierro a una inversión por parte de terceros, pero de manera estratégica y viendo resultados concretos.
13. ¿Qué no volvería a hacer?
No volvería a entregar mi trabajo a personas que no lo valoran o no comprenden el esfuerzo que implica crear un producto hecho a mano. Además, sería más paciente en cuanto a los tiempos de crecimiento de mi emprendimiento.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Mi mayor inspiración siempre ha sido mi mamá, su fuerza y resiliencia me han demostrado que todo lo que me proponga puedo hacerlo posible, bajo la premisa de “sin hacer daño a nadie, haz lo que quieras desde que te haga feliz”.
Admiro mucho a Andrés Pajón y a Renata Lozano, su trabajo es impecable e inspirador y además los ha posicionado como grandes referentes de la moda colombiana.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
No lo llamaría fracasos; han sido grandes aprendizajes dentro del proceso. En cuanto a tirar la toalla, claro, muchas veces lo he considerado. Emprender trae grandes alegrías, pero también momentos difíciles y retadores. Hay que lidiar con muchas emociones a la vez. Sin embargo, cuando se tiene pasión y fe en el propósito, estos momentos difíciles se superan, fortaleciéndonos y renovando las ganas de seguir adelante.
Visite la sección de Emprendimiento y liderazgo de El Espectador
16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
Sí, formo parte de un grupo increíble de emprendedores llamado Sinergia Consciente, liderado por Karina García. A través de sus mentorías y acompañamientos, aprendemos sobre mentalidad, planificación, estrategia y crecimiento empresarial.
17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
Totalmente. El impacto de este trabajo se reflejará a lo largo de los años en la conciencia de las personas. Es un proceso de transformación de mentalidad que, estoy segura, es el futuro no solo de la moda, sino del planeta. A través de nuestra forma de vestirnos y del cuidado ambiental, podremos asegurar la vida de futuras generaciones al conservar los recursos que aún tenemos.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
Me veo feliz y satisfecha con una empresa sólida, reconocida por la creatividad y sostenibilidad de sus prendas. Visualizo un movimiento ecológico fuerte que se posiciona a nivel mundial e inspira a otros emprendedores a contribuir desde su labor a la vida de las personas y a la conservación de nuestro planeta.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
Gracias a ellos, Nahual, es posible. Sin el apoyo de mi familia y de las personas que me han impulsado, no habría logrado lo que este emprendimiento es hoy. Su acompañamiento, creer en mí incluso en los momentos más difíciles y guiarme para avanzar, me ha ayudado a mantenerme fuerte y motivada para seguir creciendo.
20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
Claro que sí, me encantaría compartir mi experiencia con otras personas que estén en este camino. Valoro mucho cuando otros emprendedores comparten abiertamente su conocimiento conmigo, así que haría lo mismo por los demás. Estaría feliz de colaborar con ellos y ayudarlos a alcanzar sus objetivos.
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
Mi equipo lo es todo. Me han enseñado e impulsado desinteresadamente, ayudándome a crecer tanto personal como profesionalmente. Me han demostrado que no podemos llegar lejos solos y que necesitamos la experiencia y la guía de otros. Además, me han mostrado que es posible ayudar a otros y aportar al mundo a través de nuestra labor.
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
Mi sello es mi creatividad consciente. Materializo mis ideas en prendas que permiten a las mujeres expresarse libremente, conectándolas con su esencia y con la naturaleza. Me diferencia mi disciplina, constancia y la forma en que me conecto con mi trabajo, sorprendiendo a los demás con lo que hago. Cada prenda que elaboro es un regalo especial, por lo que me esmero en los detalles y las experiencias sensoriales que hacen sentir únicas a mis clientas.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
He aprendido a creer más en mi talento. Este proceso ha sido una terapia de crecimiento y sanación personal, demostrándome que con pasión y amor por lo que hago, puedo lograr mis metas. He soltado muchos temores para experimentar y aprender a fluir, disfrutando de esta experiencia a mi propio ritmo. Agradezco infinitamente haber creado Nahual.
Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻💻 🤓📚