El emprendimiento de Neiva que le apuesta a la arepa de queso con bocadillo
Se llama ‘Arepas La Misionera’ y además de las tradicionales “delgaditas”, las de ajonjolí y las parrilleras, desarrollaron una ranchera y una de frutos secos (maní, maíz tostado y arándanos).
Edwin Bohórquez Aya
“Buenas tardes Edwin, espero se encuentre muy bien el día de hoy. Mi nombre es Jhon Cleivi García Chacón, soy fundador de un hermoso emprendimiento con sentido social y sello huilense. Soy fiel lector de su columna de emprendimiento y liderazgo de El Espectador, donde me he identificado muchísimas veces y me encantaría contarle mi historia”. Ese fue el primer contacto que tuvimos con Jhon Cleivi y con su idea de negocio que ya va un catálogo amplio que va desde “las arepas delgadas que son perfectas con cualquier acompañante: ajonjolí, una propuesta sana y nutritiva; parrilla, ideal para asados y barbacoas, y la espectacular de bocadillo con queso, un manjar hecho arepa; la ranchera, una apuesta interesante de sabores; la inigualable de frutos secos, que incorpora el delicioso sabor del maní, el maíz tostado y los arándanos”. Ahora mismo ya son seis empleados y cuenta con unos “300 clientes”. Su historia está aquí en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos, no sin antes recordar esto que nos dijo:“Queremos ser parte de cada familia con un producto artesanal, hecho con amor”.
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
Mi nombre es John Cleivi García chacón, tengo 39 años y estudié Contaduría Pública.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
Mi idea era producir un producto de consumo masivo y contribuir al desarrollo de la sociedad. Decidí crear una fundación llamada semilla misionera y posterior a esto decidimos crear junto a mi esposa la fábrica de arepas La Misionera, una empresa llena de amor y de sueños que desea acompañar las mesas de los neivanos, llevándoles desde el campo productos de calidad, ingredientes tradicionales, 100% naturales y saludables para todos los paladares.
3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
Recurrí a amigos y familiares para que me ayudaran a elaborar las arepas y me dieran el feedback de mi receta. A esta iniciativa se fueron sumando personas que creyeron en el proyecto. Cabe resaltar que el equipo está integrado por mujeres guerreras llenas de pasión y amor por lo que hacen, ellas hacen que cada arepa tenga vida propia en los paladares de nuestros clientes. Empezamos en casa de mi mamá, luego en casa de una integrante del grupo de trabajo, fuimos comprando maquinaria y luego nos pasamos a una fábrica la cual estamos adecuando aún.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
Fue un poco difícil al principio, pero logré que el dinero inicial me lo prestara mi esposa, luego con las utilidades de la empresa fuimos comprando lo que iba haciendo falta, invirtiendo cada peso de manera estratégica y poder suplir con la demanda.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
Estamos generando empleos directos e indirectos, a su vez generando conciencia acerca del consumo de alimentos 100% naturales, sin conservantes artificiales que dañan la salud de las personas, compramos nuestros insumos al campesino huilense, apoyamos a jóvenes que deseen contribuir al desarrollo de la sociedad, apoyamos a mujeres cabezas de familia.
6. ¿Soy feliz?
¡¡Pero por supuesto!! Todos los días le agradezco a Dios por cada bendición. Ha sido un proceso maravilloso. Hemos tenido días difíciles, pero todo esto hace parte de la cadena de aprendizaje y crecimiento, tanto empresarial, como profesional.
7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
En el momento no estoy interesado en vender, queremos llegar a nuestro punto de equilibrio y expandirnos a tal punto de estar en todo Colombia llevando empleo, a mujeres y jóvenes que no cuentan con las mismas oportunidades.
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Yo considero que no es duro emprender. Definitivamente, lo verdaderamente difícil de emprender, es perseverar aún en los días difíciles. Pero ante eso, no hay mejor antídoto que recordar lo mucho que te has esforzado para llegar a donde estás y lo mucho que debes trabajar para llegar a donde quieres llegar.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
Definitivamente, estoy cumpliendo mi sueño y aún debo seguir trabajando para lograr más ventas, para alcanzar el punto de equilibrio y ayudar a muchas más familias.
10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Seguir perseverando y alcanzando metas. Queremos entablar relaciones con mercados dentro y fuera de nuestro departamento, llevando una propuesta 100% natural y deliciosa a los hogares de Colombia.
11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
Por supuesto que sí, nosotros contamos con una amplia variedad de productos que hace de nuestro catálogo una apuesta diferente. Queremos llevar nuestras arepas a muchos congeladores de Colombia mediante alianzas estratégicas con supermercados, hipermercados, tiendas, fruver, entre otros.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
Sí, estoy dispuesto a negociar algunas acciones de mi empresa para el crecimiento de la compañía y convertirla en el líder a nivel departamental o nacional.
13. ¿Qué no volvería a hacer?
Limitar mis sueños.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Me inspiró la doctrina social de la iglesia a la que pertenezco y el modelo del liderazgo de Jesucristo.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
No, la vida está llena de inconvenientes, pero solo fracasa quien se rinde. No he pensado en tirar la toalla.
16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
Hago parte de una comunidad religiosa que me ha apoyado comprando y recomendando mis productos mediante el voz a voz.
17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
Sin duda alguna, nosotros trasmitimos en cada arepa autenticidad, tradición, amor, un verdadero conjunto de emociones y sabores que la convierte en una verdadera experiencia. Y si, mi proyecto está planeado para que de él vivan muchas generaciones, apostamos por lo natural, por un impacto positivo para la salud y eso trasciende cualquier límite de edad.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
Me proyecto en 10 años a tener una libertad financiera que me permita, con la ayuda de Dios, crear cuatro sedes de arepas ‘La Misionera’ en diferentes ciudades del país.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
Mi familia y amigos han jugado un papel primordial para el desarrollo de este emprendimiento. Ellos hacen que todos mis esfuerzos tengan sentido.
Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.
20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
Por supuesto, es mi proyecto de vida ayudar a niños, jóvenes y otros emprendedores a desarrollarse como empresarios del mañana y puedan, como yo, cumplir sus sueños y trabajar muy duro para ayudar a otros.
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
Mi equipo de trabajo juega un papel fundamental en la empresa, son soporte de producción y logística, además de socios, está conformado por mi esposa Yamile Gallego Trujillo, Graciela García Chacón, Nina Chacón, Marta Polo Castillo, Astrid Mejía Sánchez, Elizabeth Castro y Lila Paola. Ellas hacen que ocurra la magia y que cada arepa lleve nuestro sello más preciado: “Hechas con amor”.
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
Mi sello personal es ser cristiano y me diferencia del resto el trabajo y el compromiso con las personas que trabajo y la sociedad. Cuando hablamos de arepas ‘La misionera’, hablamos de arepas hechas 100% de maíz, maíz; arepas con ingredientes naturales traídos del campo, ingredientes sembrados y cosechados por manos campesinas huilenses, a su vez hablamos de arepas hechas con amor por mujeres emprendedoras.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
He aprendido que aquellos que impactan de forma positiva a una sociedad por medio de emprendimientos, llegan a ser muy exitosos.
Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻💻 🤓📚
“Buenas tardes Edwin, espero se encuentre muy bien el día de hoy. Mi nombre es Jhon Cleivi García Chacón, soy fundador de un hermoso emprendimiento con sentido social y sello huilense. Soy fiel lector de su columna de emprendimiento y liderazgo de El Espectador, donde me he identificado muchísimas veces y me encantaría contarle mi historia”. Ese fue el primer contacto que tuvimos con Jhon Cleivi y con su idea de negocio que ya va un catálogo amplio que va desde “las arepas delgadas que son perfectas con cualquier acompañante: ajonjolí, una propuesta sana y nutritiva; parrilla, ideal para asados y barbacoas, y la espectacular de bocadillo con queso, un manjar hecho arepa; la ranchera, una apuesta interesante de sabores; la inigualable de frutos secos, que incorpora el delicioso sabor del maní, el maíz tostado y los arándanos”. Ahora mismo ya son seis empleados y cuenta con unos “300 clientes”. Su historia está aquí en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos, no sin antes recordar esto que nos dijo:“Queremos ser parte de cada familia con un producto artesanal, hecho con amor”.
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
Mi nombre es John Cleivi García chacón, tengo 39 años y estudié Contaduría Pública.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
Mi idea era producir un producto de consumo masivo y contribuir al desarrollo de la sociedad. Decidí crear una fundación llamada semilla misionera y posterior a esto decidimos crear junto a mi esposa la fábrica de arepas La Misionera, una empresa llena de amor y de sueños que desea acompañar las mesas de los neivanos, llevándoles desde el campo productos de calidad, ingredientes tradicionales, 100% naturales y saludables para todos los paladares.
3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
Recurrí a amigos y familiares para que me ayudaran a elaborar las arepas y me dieran el feedback de mi receta. A esta iniciativa se fueron sumando personas que creyeron en el proyecto. Cabe resaltar que el equipo está integrado por mujeres guerreras llenas de pasión y amor por lo que hacen, ellas hacen que cada arepa tenga vida propia en los paladares de nuestros clientes. Empezamos en casa de mi mamá, luego en casa de una integrante del grupo de trabajo, fuimos comprando maquinaria y luego nos pasamos a una fábrica la cual estamos adecuando aún.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
Fue un poco difícil al principio, pero logré que el dinero inicial me lo prestara mi esposa, luego con las utilidades de la empresa fuimos comprando lo que iba haciendo falta, invirtiendo cada peso de manera estratégica y poder suplir con la demanda.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
Estamos generando empleos directos e indirectos, a su vez generando conciencia acerca del consumo de alimentos 100% naturales, sin conservantes artificiales que dañan la salud de las personas, compramos nuestros insumos al campesino huilense, apoyamos a jóvenes que deseen contribuir al desarrollo de la sociedad, apoyamos a mujeres cabezas de familia.
6. ¿Soy feliz?
¡¡Pero por supuesto!! Todos los días le agradezco a Dios por cada bendición. Ha sido un proceso maravilloso. Hemos tenido días difíciles, pero todo esto hace parte de la cadena de aprendizaje y crecimiento, tanto empresarial, como profesional.
7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
En el momento no estoy interesado en vender, queremos llegar a nuestro punto de equilibrio y expandirnos a tal punto de estar en todo Colombia llevando empleo, a mujeres y jóvenes que no cuentan con las mismas oportunidades.
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Yo considero que no es duro emprender. Definitivamente, lo verdaderamente difícil de emprender, es perseverar aún en los días difíciles. Pero ante eso, no hay mejor antídoto que recordar lo mucho que te has esforzado para llegar a donde estás y lo mucho que debes trabajar para llegar a donde quieres llegar.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
Definitivamente, estoy cumpliendo mi sueño y aún debo seguir trabajando para lograr más ventas, para alcanzar el punto de equilibrio y ayudar a muchas más familias.
10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Seguir perseverando y alcanzando metas. Queremos entablar relaciones con mercados dentro y fuera de nuestro departamento, llevando una propuesta 100% natural y deliciosa a los hogares de Colombia.
11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
Por supuesto que sí, nosotros contamos con una amplia variedad de productos que hace de nuestro catálogo una apuesta diferente. Queremos llevar nuestras arepas a muchos congeladores de Colombia mediante alianzas estratégicas con supermercados, hipermercados, tiendas, fruver, entre otros.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
Sí, estoy dispuesto a negociar algunas acciones de mi empresa para el crecimiento de la compañía y convertirla en el líder a nivel departamental o nacional.
13. ¿Qué no volvería a hacer?
Limitar mis sueños.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Me inspiró la doctrina social de la iglesia a la que pertenezco y el modelo del liderazgo de Jesucristo.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
No, la vida está llena de inconvenientes, pero solo fracasa quien se rinde. No he pensado en tirar la toalla.
16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
Hago parte de una comunidad religiosa que me ha apoyado comprando y recomendando mis productos mediante el voz a voz.
17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
Sin duda alguna, nosotros trasmitimos en cada arepa autenticidad, tradición, amor, un verdadero conjunto de emociones y sabores que la convierte en una verdadera experiencia. Y si, mi proyecto está planeado para que de él vivan muchas generaciones, apostamos por lo natural, por un impacto positivo para la salud y eso trasciende cualquier límite de edad.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
Me proyecto en 10 años a tener una libertad financiera que me permita, con la ayuda de Dios, crear cuatro sedes de arepas ‘La Misionera’ en diferentes ciudades del país.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
Mi familia y amigos han jugado un papel primordial para el desarrollo de este emprendimiento. Ellos hacen que todos mis esfuerzos tengan sentido.
Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.
20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
Por supuesto, es mi proyecto de vida ayudar a niños, jóvenes y otros emprendedores a desarrollarse como empresarios del mañana y puedan, como yo, cumplir sus sueños y trabajar muy duro para ayudar a otros.
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
Mi equipo de trabajo juega un papel fundamental en la empresa, son soporte de producción y logística, además de socios, está conformado por mi esposa Yamile Gallego Trujillo, Graciela García Chacón, Nina Chacón, Marta Polo Castillo, Astrid Mejía Sánchez, Elizabeth Castro y Lila Paola. Ellas hacen que ocurra la magia y que cada arepa lleve nuestro sello más preciado: “Hechas con amor”.
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
Mi sello personal es ser cristiano y me diferencia del resto el trabajo y el compromiso con las personas que trabajo y la sociedad. Cuando hablamos de arepas ‘La misionera’, hablamos de arepas hechas 100% de maíz, maíz; arepas con ingredientes naturales traídos del campo, ingredientes sembrados y cosechados por manos campesinas huilenses, a su vez hablamos de arepas hechas con amor por mujeres emprendedoras.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
He aprendido que aquellos que impactan de forma positiva a una sociedad por medio de emprendimientos, llegan a ser muy exitosos.
Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻💻 🤓📚