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Esta es una de esas historias de emprendimiento que tiene la huella de la marca Rappi en su interior. Sus tres protagonistas, todos exempleados de esa compañía tecnológica, se lanzaron al agua y montaron Sumer, un emprendimiento que busca hacérsela fácil a los negocios que no tienen tienda digital para que entren, de una vez por todas, a la llamada cuarta revolución industrial. “Sumer, que ya superó el histórico de las 1,5 millones de descargas y cuenta con usuarios en 24 países, ha recaudado US$10 millones en capital inversionista. Durante el 2023, la plataforma fue el medio por el cual se realizaron ventas por más de US$18,2 millones. Actualmente, cuenta con un equipo de 52 personas vinculadas de manera directa”, nos contaron cuando indagamos un poco por sus números.
Joaquín Serrano, CEO y cofundador de Sumer, la presenta como “una plataforma colombiana que le permite a los emprendimientos, mipymes y comercios tradicionales crear su propia tienda digital en cuestión de segundos con la ayuda de inteligencia artificial (AI)”. Y dice que “se originó en plena pandemia como una solución para impulsar las ventas de aquellos negocios que solo operaban presencialmente y que, en consecuencia, no estaban alcanzando todo su potencial de mercado”.
Serrano, a quien le enviamos nuestras 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos, cuenta la historia del negocio que elimina “la necesidad de agencias de marketing o de costos asociados a terceros”, que permite “acceder a reportes sobre el desempeño comercial, gestionar promociones en tiempo real, generar cupones, contar con una pasarela de pagos y realizar integraciones con las principales redes sociales para exhibir los productos”, a continuación:
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
Tengo 32 años y soy egresado de Economía de la Universidad de los Andes.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
Esta es una idea de tres personas: mis dos socios y yo. Los 3 somos hijos de emprendedores, por lo que sabemos de primera mano las dificultades para fundar y consolidar una mipyme. Por esta razón, desde un comienzo sabíamos que queríamos construir una propuesta de valor para este segmento, tecnología que acelerara la curva de crecimiento. En ese sentido, creamos una solución que le permitiera a cualquier persona crear una tienda digital en cuestión de segundos, desde la conveniencia del celular, y con la ayuda de innovaciones como la inteligencia artifical (AI). Somos conscientes de que no hay nada más incremental que las ventas digitales.
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3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
Un primer factor que ayudó en este camino fue la experiencia de nosotros tres, pues todos venimos de Rappi y estamos familiarizados con la innovación y la tecnología. Así empezamos: sacamos un landing y un producto viable mínimo (MVP, por sus siglas en inglés) de la aplicación, lo que nos ayudó a hacer las primeras pruebas y validaciones sobre el producto, y a definir mejor la dolencia de nuestro público objetivo. Posteriormente, logramos levantar capital de riesgo, con el que conformamos un equipo altamente capaz para masificarlo.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
El capital inicial provino de ángeles inversionistas, principalmente del equipo fundador de Rappi. Luego, logramos ejecutar una ronda Pre-seed y otra Seed, que nos dieron los recursos para seguir escalando el proyecto. Aquí es importante mencionar que ambas rondas fueron de equity, no de deuda, lo que quiere decir que cedimos un porcentaje de nuestras acciones y que no debemos hacer un pago directo de la inversión recibida.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
Estamos cambiando vidas. Estamos logrando construir tecnología que, genuinamente, está al alcance de los emprendedores; más que por el precio en sí, que es muy competitivo, lo es por su facilidad y claridad para usarse. En otras palabras, estamos eliminando las barreras de entrada para los pequeños negocios a la economía digital.
6. ¿Soy feliz?
Sí. Para mí no hay nada que me haga sentir más completo en la vida que ver desde cero un proyecto, que empezó como un pensamiento solamente, que hoy me involucra de tiempo completo, y que además ha logrado comprometer a un equipo de más de 50 personas muy talentosas en el crear el mejor producto para las pymes. Ese es nuestro principal objetivo.
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7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
Sí. De presentarse un aliado correcto, que esté en capacidad de apalancar a fondo lo que hemos venido construyendo, y con quien se pueda establecer una buena sinergia, creo que lo haríamos.
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Lo que, generalmente, es lo más difícil en el ecosistema: atreverse, encontrar los socios adecuados y conseguir el financiamiento. Para el caso de Sumer, fue lo “más fácil”. Los socios trabajamos juntos en Rappi durante 6 años, nos conocíamos y sabíamos nuestras formas de trabajar, construimos relaciones que nos ayudaron a conectarnos con el mundo de capital de riesgo, y teníamos claro que queríamos construir algo propio. Definitivamente, la relación entre fundadores ha sido y es lo más importante. En ese sentido, lo más difícil para nosotros ha sido el viaje, el proceso. Cometer error tras error y no frustrarse.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
Sumer, en relación al mercado y al potencial del público objetivo, aún tiene mucho por crecer y madurar. Aún no podemos decir que es un sueño cumplido, pues nos falta mercado por conquistar y producto por desarrollar.
10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Apenas estamos comenzando. Llevamos 6,000 usuarios consolidados en un mercado regional que puede comprender más de 5 millones de negocios. Tenemos que seguir fortaleciendo lo que tenemos, sacar cosas nuevas para impulsar nuestra expansión. Hoy, con un producto disponible en inglés y portugués, además del español, esperamos llegar a regiones más allá de Hispanoamérica.
11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
¡Infinitamente! Somos una empresa de software, y esa particularidad nos permite tener presencia en, prácticamente, cualquier geografía internacional desde nuestras oficinas en Bogotá. Llegar a un nuevo país, en términos pintorescos, es “prender un botón”. Labores como las de mercadeo, CRM e, incluso, conseguir nuevos aliados se pueden hacer de manera digital. Así que, en términos potenciales, el mercado de Sumer no son solamente las mipymes de Latinoamérica, es el mundo entero.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
Levantar capital, al haberlo hecho en la modalidad en que nosotros lo hicimos, equity, supone ceder parte de la empresa. Con respecto a lo de implicar a desconocidos, realmente se involucran es a instituciones, con las cuales se surte un riguroso proceso de revisoría. De todas formas, lo más esencial del proceso pasa por la química y el feeling que pueda existir con la otra parte, esa sintonía es fundamental.
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13. ¿Qué no volvería a hacer?
Sin duda no volvería a ejecutar sin tener clara una medición de Retorno Sobre la Inversión (ROI, por sus siglas en inglés). En nuestros inicios, perseguimos métricas que no tenían una relación directa con la generación de ingresos; hoy, en cambio, hemos corregido ese enfoque, y eso ha contribuido al crecimiento de nuestros ingresos per se; lo que, a la larga, nos ha favorecido en la definición de nuestro usuario objetivo y a entregarle una solución más a su medida.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Nosotros tres solemos hablar de nuestros papás, por sus experiencias e impacto. Ahora, sin duda, el ejemplo de Simón Borrero, el fundador de Rappi, ha sido fundamental. Él le demostró a un continente entero que se puede hacer tecnología de talla mundial en Latinoamérica. Es un gran referente para nosotros.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
Muchas cosas han salido mal, por supuesto. Pero tirar la toalla, nunca.
16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
Sí. Mis socios y yo integramos la comunidad más fuerte de startups, y de la cual han surgido otras grandes empresas de personas que trabajaron en los inicios de Rappi, es lo que se conoce informalmente como la ‘RappiMafia’. No es una comunidad constituida en sí, pero estamos en constante comunicación entre nosotros para ayudarnos y apoyarnos.
17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
¡Absolutamente! Más allá del producto Sumer, estamos haciendo algo mucho más grande, que trasciende: construir una comunidad de tecnología en Colombia y la región. Pienso que no hay nada que genere más movilidad social que los empleos en tecnología, así como, actualmente, no hay empresas que crezcan más rápido y se valoricen como las de tecnología.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
En 10 años Sumer va a ser un jugador referente a nivel mundial en el mundo del comercio electrónico, no solo suministrando las mejores herramientas para vender en línea, sino facilitando pagos y financiamiento. Así mismo, estará embebido en otro tipo de soluciones, como sistemas POS; siendo así una parte integral de lo que necesita cualquier comercio para operar virtualmente. Con esto dicho, yo me veo liderando un equipo cada vez más grande, integral y competitivo; cumpliendo el sueño de emprendedores y mipymes de llevar sus portafolios a otro nivel.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
El círculo cercano es clave, en el sentido que generan un entorno seguro y cómodo para operar. Apostar a construir algo desde ceros y asumir riesgos sin tener que lidiar con señalamientos de la gente que más aprecio es primordial; si se tiene eso, como en mi caso, uno va 1,000 pasos por delante.
20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
No lo hemos logrado todavía, hemos alcanzado grandes hitos, pero falta mucho por probar. Sin embargo, pese al camino que tenemos por delante, creo y creemos que ayudar a otros emprendedores es clave. Al fin y al cabo, más que construir una compañía, estamos construyendo un ecosistema. Somos muy conscientes de eso y así es como operamos.
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
El equipo lo es todo. En primer lugar mis socios: Óscar Arellano, CIO; y Yerson Cacua, CTO, que saben trabajar juntos y se complementan muy bien. Después, el compromiso de las personas que hemos venido incorporando, que han sabido compenetrarse con nuestra misión desde el día cero, y a quienes les ha gustado implicarse en todas las áreas. Hemos traído talentos de Rappi -la única empresa de tecnología de alto crecimiento en el país- y también han llegado personas de empresas tradicionales. Juntar estos dos tipos de ADN ha sido un pilar fundamental para ejecutar mejor y más rápido nuestros planes.
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
Dejar hacer. Creo que quien haya trabajado en Sumer puede decir que hay mucha libertad de perseguir el “cómo” y de trabajar sin miedo a cometer errores.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
He aprendido que, si bien hay circunstancias en las que es necesario ejecutar con velocidad, es importante planear y construir un criterio racional fuerte detrás de cualquier decisión que se tome. Otro aspecto clave, que más que un aprendizaje es una validación, es la relevancia de elegir bien con quién se decide emprender; de esa dinámica, de esa combinación de habilidades y estilos, depende todo.
Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻💻 🤓📚