Carlos Calleja Hakker, el hombre detrás de la transformación del Grupo Éxito

Una Oferta Pública de Adquisición (OPA), realizada el año pasado en Colombia y Estados Unidos, dejó al Grupo Calleja con el 86,84 % de las acciones de Grupo Éxito.

Una Oferta Pública de Adquisición (OPA), realizada el año pasado en Colombia y Estados Unidos, dejó al Grupo Calleja con el 86,84 % de las acciones de Grupo Éxito.

Vale la pena mencionar que el Grupo Calleja es dueño de Súper Selectos, cadena líder de supermercados de El Salvador. Fue fundada por el migrante español Daniel Calleja, tiene más de 70 años de trayectoria en el mercado y tiene 110 puntos de venta en dicho país.

Tras la consolidación de la compra, este año la junta directiva aprobó una nueva estructura para el liderazgo de los negocios en Colombia, Uruguay y Argentina, que operarán junto a los de El Salvador.

Carlos Calleja Hakker, nieto del fundador del Grupo Calleja, fue elegido presidente ejecutivo del Grupo Éxito, que incluye a Grupo Disco en Uruguay, Libertad en Argentina, y de Súper Selectos en El Salvador, mientras que Carlos Mario Giraldo fue designado gerente general para Colombia.

La compra ha generado importantes cambios para el Grupo Éxito, entre los que se encuentran posicionar a Carulla como el “supermercado de Colombia”, así como unificar sus cinco marcas de retail que tienen en el país bajo las marcas Éxito y Carulla. Ya se han reconvertido 27 tiendas de las 30 proyectadas para 2024 y se espera que en un plazo de cuatro años se alcance la unificación total de todos los puntos.

De acuerdo con Giraldo, las diferencias que tendrán los Carulla y los Éxito son “que Carulla son áreas más pequeñas y estarán dedicados completamente al supermercado de Colombia, con productos de alimentos procesados y frescos, con la carne, la panadería, etcétera. El Éxito tiene áreas más grandes y el 40 % de sus ventas son de productos que no son alimenticios. Son muy buenos con la electrónica, productos de hogar y la ropa: el Éxito es un gran vendedor de ropa, uno de los más grandes del país, con 44.000.000 de prendas vendidas, Literalmente, vestimos al país. Ese será su fuerte”.

Hablamos con Carlos Calleja Hakker sobre los cambios que ha realizado durante estos meses al frente del Grupo Éxito, la inversión que ejecutarán en 2025 y los planes que tiene para los dos países.

¿Cuál es la historia del Grupo Calleja?

El Grupo Calleja es una familia que lleva tres generaciones en el negocio del retail. Mi abuelo Daniel Calleja era un carnicero que llegó desde España a El Salvador buscando oportunidades. Murió un año antes de que yo naciera, pero me cuentan que era una persona apasionada por lo que hacía, vivió toda su vida atendiendo a sus clientes y trabajando con sus compañeros. Vivió feliz.

Mi padre, Francisco Calleja, tuvo una visión empresarial y convenció a mi abuelo de que invirtieran y pusieran la primera tienda. Con la firma de un amigo, sacaron un préstamo y la compraron. Comenzaron 11 trabajadores y hoy somos cerca de 60.000 personas en el grupo. Es una historia de mucho trabajo y sacrificio.

¿Cómo se dio la compra de más del 80 % de las acciones del Grupo Éxito?

Hace más de 10 años el Éxito nos visitó en El Salvador porque querían ver cómo hacíamos las cosas nosotros. Ahí comenzó una bella relación entre las dos empresas y equipos, que se mantuvo. Hubo viajes y visitas entre los dos países para compartir buenas prácticas en total apertura, algo que no es normal, porque a veces uno no abre las puertas por cuidar la empresa y los secretos, pero entre las dos organizaciones había una confianza real y también se compartía una visión social.

Cuando supimos que estaba a la venta, buscamos al equipo del Éxito, al mismo Carlos Mario Giraldo y comenzamos una plática muy amistosa con el Grupo Casino (empresa que tenía más del 50 % de las acciones del Éxito). Eso fue hace más de dos años.

El proceso no fue lineal, ni sencillo, pasamos por diferentes etapas en las que el negocio se mantuvo, se cayó, se remontó, etcétera, pero, al fin y al cabo, logramos un feliz acuerdo con el Grupo Casino. Después de la OPA, nos sentimos bien por tener una participación de ese nivel, el Éxito se volvió parte de nuestra gran familia.

El Éxito nos encantó porque conocíamos el equipo y la calidad de gente que tenía, eso fue un pro en el análisis que hicimos. Decidimos creer en el país a pesar de temas económicos, como la inflación y las tasas de interés. Nosotros venimos de El Salvador; es decir, no somos ajenos a lo que es trabajar en Latinoamérica, con todo lo que eso conlleva. Eso no nos frenó. Nuestra visión es que tanto Grupo Éxito como Grupo Calleja sigan bien parados en 50 y 100 años.

¿Por qué decidieron reconvertir los Surtimax, Super Inter y Surtimayorista en Éxito y Carulla?

Porque hicimos un estudio de cuáles eran las marcas que más podían conectar con todas las familias de este país. Él Éxito es una marca emblemática e icónica, pero Carulla también y con 120 años; con ese historial, tenía todo el sentido del mundo. Estuve visitando las tiendas del sur de Bogotá y la gente no me decía: “Oye, danos un Surtimax”, nos dicen: “¿Cuándo nos vas a dar un Carulla, pero con buenos precios y que nos traten de manera especial?”. Es un lindo reto llevar a más colombianos una marca que, quizá, se elevó en términos de sus mercados. Eso conlleva estrategias de ahorro, que hay que meter en el ADN de la tienda, pero no la estamos reinventando. Si revisas la historia, Carulla era el supermercado del barrio, el de todos. Lo que estamos haciendo es honrar el pasado y tratar de llevar la marca de vuelta a sus raíces.

Además de la unificación de sus marcas de “retail” en Colombia bajo Éxito y Carulla, ¿qué cambios están implementando?

Un cambio cultural del que venimos hablando es pasar de una corporación hacia una empresa ágil, más liviana, con mística familiar, pero muy profesional y con un equipo de primera. Son cosas que se están trabajando.

¿Cómo ha sido el trabajo que ha realizado en Colombia durante estos meses?

Comenzamos a partir de febrero y han sido meses de muchísimo trabajo y viajes. Ha sido un sueño hecho realidad conocer Colombia, Uruguay y Argentina. Colombia tiene magia, cada parte es casi un país en sí, con su cultura, con la forma que atienden a la gente, con la comida, hasta en cómo hablan. Eso ha sido una belleza, sinceramente.

De la experiencia que tiene con el Grupo Calleja, ¿qué está implementando en Colombia?

La mística de cuidarnos como una familia y la mentalidad de dueño. Todos los líderes de cada tienda deberían tener una mentalidad de dueño para cuidar los centavos. Hay un dicho que dice que: “hay que cuidar cada centavo y, si uno hace eso bien, los pesos se van cuidando solos”.

Eso lo estamos aplicando con el equipo local para poder movernos con mayor agilidad, ser más productivos, más eficientes y navegar mejor. Nosotros somos de enrollarnos las mangas, de territorio, no de escritorio. Nos define esa mística, esa cultura de estar en las tiendas, en el piso de venta, como dicen aquí en Colombia: “De meternos en el barro”, de trabajar de la mano de los compañeros.

¿Qué balance hace del grupo este año?

La evolución de la propuesta de valor está siendo bien recibida por los clientes y por los colombianos. En un año retador de consumo y crecimiento económico, la empresa está creciendo y lo está haciendo en los mismos metros, sin estar abriendo muchas tiendas. Está incrementando su participación de mercado, lo que nos dice que estamos ganando la preferencia y la lealtad de los clientes.

¿Qué planes tienen con la millonaria inversión que anunciaron para el 2025?

Tenemos muchas expectativas y planes. Lejos de ponerle pausa, seguimos acelerando en nuestro trabajo. Tenemos un presupuesto grande de proyectos, estamos hablando de más de 50 tiendas que queremos tocar y mejorar. Invertiremos en nuevos equipos, eficiencia energética, tecnología, muebles, pisos, techos, en levantar esa propuesta de valor y dignificar a nuestros clientes. Le estamos apostando al país.

También somos de la filosofía de que, aún en los tiempos más retadores, siempre hay oportunidades y hay que aprovecharlas.

¿Qué es lo que más le ha gustado de Colombia?

Lo que más me ha gustado de Colombia es su gente y su diversidad. Cada lugar es como un lindo arcoíris y la gente es muy bondadosa, me han hecho sentir muy bien. La comida también me ha encantado, soy loco por el café. Incluso, estamos viendo cómo empezamos a exportar café para El Salvador, ya estamos exportando carne colombiana y ha sido un “hitazo”. Estamos buscando acercar esas dos economías.

¿Qué importaría de El Salvador?

He estado hablando con el embajador de Colombia en El Salvador y con el embajador de El Salvador en Colombia para ver cómo fortalecemos ese puente. Quizá podemos traer las pupusas, son como nuestras arepas.

Para finalizar, ¿quién es Carlos Calleja, el hombre detrás de una de las empresas que más generan empleo en el país?

Me considero joven, a pesar de que tengo 48 años. Soy apasionado de lo que hago, me gusta viajar. Soy el padre de Santiago y Miranda y el esposo de Andrea Lima Guirola de Calleja; mi familia es mi centro. Manejo el estrés con ejercicio. Estoy agradecido con Dios y con la vida, disfrutando muchísimo esta experiencia. Soy una persona que cree que la vida tiene que ser un libro de enseñanzas, si me acuesto un día y me pregunto: “¿qué aprendí?” Y la respuesta es “nada”, fue un día perdido.

También estoy aprendiendo que en Latinoamérica compartimos los mismos sueños y las mismas frustraciones y qué lindo poder trabajar desde una empresa en la que hacemos una diferencia mediante la generación de empleos y oportunidades, como las que da el Grupo Éxito a productores para sustituir cultivos ilícitos y después venderlos en nuestras tiendas.

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