Invías abrió proceso de contratación en megaproyecto vial de la Cordillera Central

Cruce de la Cordillera Central.

Foto: Invías

El corredor vial Cruce de la Cordillera Central, ubicado en medio de la cordillera Central, entre los municipios de Cajamarca (Tolima) y Calarcá (Quindío), tendrá un nuevo encargado con la función de gestionar la operación y el mantenimiento durante los próximos dos años. El Instituto Nacional de Vías (Invías) abrió la convocatoria pública para garantizar la operación y el mantenimiento del complejo vial integrado por 60 obras, incluyendo el túnel de la Línea, con una longitud de 43 kilómetros.

“Con esta nueva licitación pública estamos garantizando la integridad y seguridad de la movilidad de los colombianos que transitan entre el centro del país y el suroccidente, principalmente quienes viajan hacia los departamentos del Tolima, Quindío y Valle del Cauca”, dijo Mauricio Céspedes Solano, director Técnico y de Estructuración. Y agregó que en el primer semestre de 2024 se movilizaron más de 665.900 vehículos en el corredor.

Ahora bien, ¿cuáles serían las funciones del contratista? De manera general, el nuevo operador tendrá la función de realizar el mantenimiento de los equipos electromecánicos, atender las emergencias y gestionar la señalización vial y la operación del corredor. Además, también deberá:

1. Fortalecer la seguridad vial de los usuarios con la operación de ambulancias medicalizadas.
2. Brindar apoyo de grúas, carrotaller y la línea gratuita telefónica #456.
3. Cumplir la Política de Sostenibilidad para la infraestructura del transporte del Invías.

Además, colaborar con el programa de seguridad en carreteras nacionales y gestionar la información relevante relacionada con la operación del corredor.

¿Por qué es importante el Cruce de la Cordillera Central?

Este complejo vial se inauguró en 2021, durante la presidencia de Iván Duque, con el objetivo de ahorrar entre 30 y 50 minutos de viaje para conectar Bogotá con Buenaventura y articular la conexión con la doble calzada Ibagué-Cajamarca, las Autopistas del Café en la vía Armenia, y la calzada Calarcá-La Paila.

La inversión fue de $2,9 billones para la construcción de 25 túneles, entre los cuales el más importante es el túnel de La Línea (de 8.65 km de longitud), 31 puentes, 3 intercambiadores viales y 18 kilómetros de segunda calzada, que en conjunto conforman 30 kilómetros de doble calzada.

La obra, que conecta a Bogotá con Buenaventura, permite la reactivación del comercio del Eje Cafetero y potenciar el turismo disminuyendo el tiempo para llegar al suroccidente o centro del país.

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