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El Grupo Sura informó este jueves que su junta directiva autorizó contratar a asesores para continuar con la búsqueda de socios estratégicos interesados en adquirir una participación no controlante en el conglomerado.
Según la información entregada a la Superintendencia Financiera, “este proceso parte de reconocer el aporte invaluable que han hecho a los negocios del Grupo Sura los socios nacionales e internacionales de talla mundial que como accionistas le han acompañado durante varias décadas en diversas compañías del portafolio”.
“El conocimiento experto, el ser referentes en sus industrias y el compartir la filosofía empresarial del Grupo SURA, que busca generar valor económico y social, son aspectos esenciales para la Compañía”, se lee en la documentación enviada a la Superfinanciera.
La decisión se conoce tras la apertura de la Oferta de Adquisición Pública (OPA) que el Grupo Gilinski lanzó por una participación controladora de Nutresa, una de las mayores empresas del sector alimentos en el país y parte fundamental del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA). Gilinski tiene negocios en sectores como el bancario (con GNB Sudameris —siglas de Gilinski National Bank—, Servibanca, entre otros), de alimentos (con Yupi) y medios de comunicación (con Semana).
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Gilinski, junto con el fondo de inversiones Aflaj, es dueño de Nugil, compañía que aspira a quedarse mínimo con el 50,1 % de las acciones ordinarias de Nutresa o, máximo, con el 62,6 %. Aflaj, a su vez, forma parte del Royal Group de Emiratos Árabes Unidos.
Gilinski explicó en entrevistas radiales que su interés en Nutresa se basa en la calidad de sus productos, innovación y equipo de manejo, a los que calificó de “excelentes”.
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Vale la pena recordar que Nutresa es propiedad en un 35 % de Sura, así como de Grupo Argos y fondos de pensiones como Porvenir, Protección, Colfondos y Skandia. Nutresa, a su vez, tiene acciones en Sura y Argos.
Este enroque de acciones es una estrategia que ha empleado el GEA para blindarse, justamente, de posibles tomas hostiles por parte de inversionistas por fuera del círculo de negocios detrás de algunas de las compañías más exitosas del país.
Desde esta óptica, la jugada anunciada por Sura quizá podría ser leída como una estrategia para intentar blindarse de la posibilidad de que, en caso de que la OPA prospere, los Gilinski puedan entrar a las estructuras de poder y toma de decisiones de otras compañías.
Tras la publicación del cuadernillo de la oferta para los inversionistas se conocieron los detalles del posible negocio. En el caso de Nutresa se trata de una OPA hostil, lo que significa que se propuso la compra de acciones Nutresa sin intervención (o cooperación) de las directivas de la empresa.
Además, en el cuadernillo aclara que se busca comprar entre el 50,1 y el 62,61% de las acciones a un precio de US$7,71 por cada título. En dinero sería entre $6,8 y $8,6 billones, dependiendo de la cantidad de acciones.
La oferta pública por Nutresa será entre el 29 de noviembre y el 17 de diciembre. Es el lapso que Grupo Nutresa tiene para presentar las aceptaciones de la oferta presentada por Nugil SAS, domiciliada en Colombia.
Tras conocerse la OPA la Superintendencia Financiera suspendió por casi dos semanas la acción de Nutresa, y este lunes cuando se reactivaron las negociaciones el título subió más de 23 % hasta los $26.890.
Vale la pena recordar que una Oferta Pública de Adquisición (OPA) es un proceso en que se ofrece abiertamente y públicamente comprar las acciones de una compañía listada en la bolsa. El proceso debe ser lo más transparente para que los inversionistas tomen a conciencia la decisión de vender o no.