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Tras seis meses de haber iniciado el proceso de solicitud para que Avianca y Viva sean parte de un mismo grupo empresarial, la Aeronáutica Civil solicitó ajustes en las condicionamientos propuestos inicialmente.
Frente a esto, Avianca detalló sus cinco propuestas que demuestran el interés de mantener el equilibrio en el mercado, la marca Viva, sus empleos formales, la conectividad de las regiones y la protección a miles de pasajeros que vuelan por esa aerolínea.
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Los condicionamientos presentados a la autoridad para lograr la integración son:
- Disminución de participación en El Dorado: si Avianca y Viva son parte de un mismo grupo empresarial, entregarían hasta 105 slots (permisos de despegue y aterrizaje). Con estos espacios disponibles en distintas franjas horarias, que incluyen las de mayor tráfico de pasajeros, cualquier otra aerolínea podría entrar a operar hasta 15 aviones adicionales en El Dorado. Este es el único aeropuerto en Colombia que cuenta con restricciones que limitan la entrada libre a líneas aéreas que quieran competir.
- Supervivencia de Viva: se mantendría la marca y su modelo de negocio low-cost, puestos de trabajo, aviones y rutas que opera de manera exclusiva.
- Protección de tarifas y/o frecuencias: en las rutas en las que Avianca y Viva en conjunto tengan alta participación como resultado de la transacción se protegerían las tarifas y/o frecuencias, según sea el caso.
- Impulso al rol social de Satena en la conectividad regional: le ofrecerá a Satena los códigos compartidos o acuerdos interlínea en las rutas donde este sea el único operador. El objetivo es permitirle a los pasajeros de los territorios más aislados conectar con todos los destinos de la red de Avianca.
- Mantenimiento de acuerdos interlínea de Viva: se garantizará que las aerolíneas extranjeras que distribuyen sus pasajeros a través de Viva lo puedan seguir haciendo y con ello su acceso garantizado al mercado colombiano.
Al respecto, Adrian Neuhauser, Presidente y CEO de Avianca, dijo que las “propuestas abordan las inquietudes de la autoridad relacionadas con proteger el servicio de transporte aéreo, el equilibro del mercado y su genuino propósito de cuidar a los usuarios y a los trabajadores de Viva. Confiamos en que la autoridad aprobará la integración con condicionamientos, permitiendo que Colombia fortalezca el turismo como motor de desarrollo”.
Y es que no solo es la Aerocivil la que tiene dudas frente a la integración, otras aerolíneas también han expresado su inconformidad con esta situación debido a que consideran que los pondría en desventaja en el mercado.
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Además, hay dos compañías más que han mostrado su interés en llegar a un acuerdo comercial con Viva. Se trata de JetSMART (aerolínea de bajo costo de Chile y uno de los pesos pesados de su sector a nivel latinoamericano) y Latam, la principal competencia de Avianca en el mercado local.
La posición de Avianca sobre dichas ofertas es que “son técnicamente inviables, toda vez que cualquier toma de control de Viva requeriría, una vez acordada la compra, procesos de aprobación en diversos países que tomarían tiempo que la low-cost claramente no tiene”.
Esa es la razón por la que la aerolínea del cóndor pone en duda “la intención real de estas ‘ofertas’ de actores que luego de oponerse a la integración por meses y negar la existencia de una crisis, hoy quieren aparecer como salvadores con ‘soluciones’ que carecen de credibilidad”.
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