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El Grupo Gilinski le realizó un nuevo ataque al Grupo Empresarial Antioqueño (GEA): esta semana se conoció que presentó una Oferta Pública de Adquisición (OPA) para comprar entre el 25,34 y 31,68 % de las acciones del Grupo Sura a un precio de US$8,01 por título. Un negocio que oscila entre los $4,7 y $5,9 billones. El anuncio se dio tres semanas después de que presentara una OPA hostil para adquirir entre el 50,1 y 62,62 % de las acciones del Grupo Nutresa. Se abrió un segundo frente en la batalla por uno de los principales conglomerados económicos del país.
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Pleito viejo
No es la primera vez que estos dos grupos empresariales se enfrentan. De hecho, se podría decir que es un nuevo capítulo en una disputa que comenzó en 1997, cuando se dio la fusión entre el Banco de Colombia y el Banco Industrial Colombiano que dio vida a Bancolombia. Para los Gilinski esta operación desvalorizó fuertemente sus acciones y pidieron una compensación de US$100 millones. Tan solo hasta 2010 las partes (el GEA y los Gilinski) llegaron a un acuerdo. Pero las dos OPA de estas tres últimas semanas demostrarían que la rivalidad nunca terminó.
Es un ataque complejo, pues el GEA es complicado de entender. El Grupo Empresarial Antioqueño son principalmente tres conglomerados: El Grupo Argos, El Grupo Sura y el Grupo Nutresa (y también está el fondo de pensiones Protección). Además, se destacan por hacer enroques accionarios entre sí, pues cada una tiene acciones de la otra.
Por ejemplo, en el Grupo Nutresa el 35,25 % de las acciones las tiene el Grupo Sura y el 9,8 % el Grupo Argos. En el caso del Grupo Sura, el 27,6 % de las acciones las tiene el Grupo Argos y el 13 % lo tiene el Grupo Nutresa. Y el Grupo Argos el 36 % de las acciones las tiene el Grupo Sura y el 13 % lo tiene el Grupo Nutresa.
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Este tipo de enroques accionarios están diseñados para precisamente protegerse de las OPA, sobre todo las hostiles (cuando un particular hace una OPA sin coordinación o cooperación de las directivas de la empresa). Pero también tiene sus desventajas.
Esta estructura implica que cualquiera que adquiera una posición accionaria importante en uno de los conglomerados, también entrará al GEA y tendrá participación en las empresas filiales. Y hay una muy importante en esta historia: Bancolombia, en donde el Grupo Sura es el principal accionista, con el 46 % de los títulos.
La OPA del Grupo Sura
La oferta que hicieron los Gilinski representa que los inversionistas de Sura puedan vender sus acciones (ordinarias) a un precio de $32.000 (bajo la TRM de este miércoles). La oferta representa una ganancia del 50 % frente al precio que registraba el título antes de la OPA de Nutresa y del 27 % antes de revelarse la OPA de Sura.
Desde esta perspectiva, parece una oferta atractiva. Sin embargo, para los expertos se debe tener cuidado al analizar las acciones de la bolsa colombiana.
“Hace meses venimos advirtiendo que las acciones de la Bolsa de Valores de Colombia están muy baratas. Es decir, que su precio de mercado está muy por debajo del potencial, del valor al que deberían estar de acuerdo sus indicadores. Por eso no sorprende que los Gilinski vieran una oportunidad para realizar dos OPA seguidas, pues claramente ven un gran potencial en estas acciones. Para mí el precio justo de Sura está cercano a los $45.000”, indicó Diego Franco, presidente de Franco Group.
De hecho, según sondeos de Bloomberg, en promedio el mercado tiene un precio objetivo (el precio al que debería estar la acción según los analistas) de la acción del Grupo Sura de $27.420. Desde esta perspectiva, la ganancia frente a la oferta de los Gilinski sería del 16 %. Una prima interesante, pero no es claro si es suficiente para renunciar a una empresa que registró una utilidad operativa de $1,2 billones en el primer semestre de 2021.
Lo que viene
La semana pasada el Grupo Sura anunció que emprendió una campaña para buscar nuevos socios estratégicos, lo que se entendió como una reacción a la OPA de Nutresa. La pregunta es qué pasará con ese proceso ahora con la OPA de Sura.
“La OPA no tiene por qué cancelar o impedir la búsqueda de socios estratégicos. Una cosa no va con la otra. Es posible que ese socio sea precisamente los Gilinski, o que encuentre un socio para realizar una OPA competitiva”, indicó Franco.
En efecto, la regulación le permite al GEA realizar OPA por un precio mayor al de las de Gilinski, y de esta manera presentarles mejores términos a los accionistas de las empresas.
Sin embargo, serían operaciones que requieren un fondeo billonario. La OPA de Nutresa y la de Sura suman al menos $12 billones. Y se han encarecido por la fuerte alza del dólar en las últimas semanas. Por el momento es incierto si habrá una OPA competitiva.
De lo que no hay duda es que las OPA de Nutresa y Sura son el movimiento bursátil más agresivo y directo de la historia reciente, y podría implicar la transformación de uno de los conglomerados empresariales más importantes y tradicionales de Colombia. Solo queda esperar cuál será el siguiente episodio del enfrentamiento entre los Gilinski y el Grupo Empresarial Antioqueño.