Una mujer camina frente a una sede del banco digital Nubank en Sao Paulo (Brasil). Imagen de referencia.
Foto: EFE - Isaac Fontana
Ha sido un ascenso vertiginoso, impulsado por un modelo de negocio en el que los gigantes bancarios superconservadores de Brasil nunca tuvieron el coraje de incursionar: los préstamos a familias de bajos ingresos.
El crecimiento sigue a un ritmo vertiginoso —alrededor de 60 % de todos los adultos brasileños ahora tienen la aplicación de Nubank en su teléfono— y el interés de los inversionistas sigue haciendo subir las acciones, las que han repuntado 36 % en el último mes, un 109 % en el último año y 214 % en los últimos dos años.