Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El país esperaba que en agosto la inflación en Colombia por fin empezara a ceder, pero no fue el caso. Sigue subiendo, y con fuerza: el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) reveló este lunes que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación mensual de 1,02 % en el octavo mes del año, lo que implica un incremento de 10,84 % anual, el dato más alto desde abril de 1999. Le explicamos qué está pasando.
También te puede interesar: Estas son las ciudades y alimentos más golpeados por la inflación
Según el DANE, agosto es un mes en donde históricamente suele bajar la inflación, destacando que hace una año la variación mensual del IPC pasó de 0,15 a 0,08 % (entre julio y agosto de 2021). Y el precio de los alimentos, uno de los principales golpes al bolsillo de los hogares, fue una de las categorías que más cayeron en este reporte de 2021 (pasando de 0,12 a -0,33 %).
Pero agosto de 2022 contó una historia muy diferente. La variación mensual del IPC en el octavo mes del año (1,02 %) fue casi el doble que la expectativa promedio de los analistas en la encuesta del Banco de la República (0,50 %). Es decir, el mercado esperaba una contracción de al menos 30 puntos básicos en los precios de la economía. Pero al final la inflación (mensual) se situó en 20 puntos básicos arriba del 0,81 % registrado en julio pasado.
Una vez más los alimentos y las bebidas no alcohólicas fueron la categoría que más se encareció, con un alza de 1,85 % mensual y 25,57 % anual para agosto de 2022. Y los alimentos procesados fueron uno de los rubros que más subieron de precio: 154 puntos básicos frente a julio.
Es también preocupante que se rompiera la tendencia bajista que venían presentando los precios de los alimentos, pues en julio este rubro solo subió 1,17 % (mensual), entonces, el precio de la comida volvió a acelerarse.
Por eso es prácticamente un hecho que Colombia cerrará el año con una inflación de doble dígito, es decir, más del 10 %, lo cual no será difícil, pues la inflación año corrido está en 9 % a corte de agosto de 2022. Y seguirá subiendo, según los analistas.
BBVA Research espera “que la inflación se mantenga presionada al alza en lo que resta del año ante una extensión en las presiones de alimentos y una inflación básica que continuará acelerándose, lo que llevará a una revisión al alza en las estimaciones de inflación de cierre de año de los analistas”.
Sin embargo, hay quienes creen que el alza de precios podría ser más prolongado: “Es posible que la inflación se mantenga elevada hasta el primer trimestre de 2023 por una serie de factores, como el alza de los precios de los fertilizantes a escala mundial, lo cual seguirá encareciendo el precio de los alimentos dentro del país. También la economía europea sigue debilitándose por el alza del precio del gas y otros combustibles, lo que terminará debilitando el euro y, por ende, podría fortalecer el precio del dólar en todo el mundo, encareciendo las importaciones colombianas. Y a nivel local hay una serie de factores que igual presionan los precios, como el freno al subsidio de la gasolina y la acpm, y las negociaciones del salario mínimo de 2023, que se esperan sean especialmente tensas”, explicó Juan David Ballén, director de análisis y estrategia de Casa de Bolsa.
En efecto, las negociaciones del salario mínimo serán un foco de incertidumbre, porque la inflación que registra Colombia podría motivar a propuestas nunca vistas: “Hasta un 20 % de incremento salarial podría surgir en las propuestas de este año. Todavía estamos revisando, pero es algo razonable teniendo en cuenta que el alza del 10 % del salario mínimo 2022 ya se quedó corto. Y porque las mismas cifras del DANE revelan que los pobres registran inflaciones superiores al promedio, de más del 12 %. Incluso entidades como Fedesarrollo ya se han referido a alzas del 20 % para el nuevo salario mínimo”, explicó Fabio Arias, fiscal de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
¿Y el Banco de la República?
La inflación en Colombia viene subiendo con fuerza desde hace más de un año, por eso, desde septiembre de 2021, el Banco de la República ha venido realizando alzas en su tasa de interés, pasándola desde el 1,75 % hasta el 9 % en menos de un año. Pero los analistas ya están cuestionando la efectividad de esta política monetaria.
“Colombia no vive una inflación por demanda, sino por oferta. El problema es que los productores enfrentan muchos más costos y obstáculos por el encarecimiento de los insumos, como los fertilizantes por ejemplo, e incluso por las mayores tasas de interés que sufren cuando buscan financiamiento. También los salarios de las empresas en Colombia subieron mucho este año, por lo que es más costoso contratar servicios. Creo que la política del Bando de la República no está sirviendo”, explicó Orlando Villabona, profesor de economía de la Universidad Nacional.
No obstante, seguiría la política contraccionista: “Creemos que el Banco de la República subirá su tasa de interés hasta el 10 % este año. Y mantendría la tasa elevada hasta que la inflación ceda”, agregó Ballén.
De esta manera, en agosto no se cumplió con la expectativa de que la inflación cediera en Colombia. Y de hecho, todo indica que vendrían varios meses más, que se extenderían incluso hasta 2023, en donde los precios de la economía seguirían subiendo.
