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Con la llegada de 2024 son muchos los bienes, servicios y prestaciones cuyo precio aumenta. Algunos se ajustan a la inflación (a través del Índice de Precios al Consumidor -IPC-), otros de acuerdo al incremento del salario mínimo para el próximo año y algunos son definidos por entidades públicas.
Dentro de la larga lista de rubros que tienen una subida generalizada de precios con el cambio de año se encuentran: el SOAT, los arriendos, seguros médicos, servicios públicos, peajes, tarifas de buses intermunicipales, los alimentos, entre otros.
Hay que precisar que, dentro de las negociaciones del salario mínimo, el Gobierno debe definir los productos o servicios que se vinculan (indexan) al salario mínimo, así como aquellos cuyo aumento no dependerá el salario mínimo de 2024 (como ciertos alimentos o matrículas universitarias).
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➕¿Cómo calcular el aumento en el arriendo?
Uno de los incrementos que más resiente el bolsillo de los colombianos es el de los cánones de arriendo. De hecho, el DANE reveló que en 2022 más de 7 millones de hogares vivían en arriendo, es decir, el 40,2 % del total.
La normativa vigente establece que el arrendador (o el dueño de una vivienda) puede incrementar el precio del arriendo con base en el Índice de Precios al Consumidor causado el año anterior, una cifra que el DANE da a conocerlos primeros días de enero.
Ahora, hay que entender que esto es lo máximo que puede incrementar un arrendatario con el cambio de año, por lo que también es posible que se acuerden aumentos inferiores a los que determine el IPC.
Se espera que el aumento en los cánones de 2024 sea considerable, pero menor al de este año. Cabe resaltar que, según las proyecciones del Banco de la República, centros de pensamiento, entidades financieras y otros analistas, el IPC terminará el año en niveles cercanos al 10 %.
Para calcular el arriendo que tendrá que pagar en 2024 use la siguiente fórmula: valor del arriendo en 2023 X 0,… (valor del IPC causado que determine el DANE). Puede tomar un valor de 0,10 solo como referencia.
Otro aspecto que se debe tener en cuenta es que el incremento del arriendo no necesariamente acompaña el cambio del año. Es decir, si usted firmó el contrato de arrendamiento en agosto, en enero del siguiente año no tiene por qué experimentar el alza. El incremento se da cuando el contrato cumple un año de vigencia.
🛵 El precio del SOAT
La tarifa del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT), póliza que deben adquirir todos los vehículos que circulen en Colombia, también incrementa con el cambio de año, pero aquí el alza lo define la Superintendencia Financiera.
Históricamente, el aumento del SOAT se ha definido según el aumento del salario mínimo, que se conocerá a más tardar el próximo 30 de diciembre. Sin embargo, en 2023 la Superintendencia basó sus cálculos en los Salarios Mínimos Diarios Legales Vigentes. Así las cosas, el pasado 1 de enero de 2023 el precio del SOAT aumentó un 11,7 %, una cifra inferior a la inflación de noviembre de 2022, que fue del 12,53 %.
Lea también: Las respuestas de los gremios a la propuesta del Gobierno de eliminar el SOAT
En esa época, la Superfinanciera explicó que el valor final a pagar por esta póliza es el resultado de sumar el valor de la prima del SOAT más un 52 % de este valor (la contribución que realizan los vehículos al Sistema General de Seguridad Social en Salud -ADRES-) y más la tasa del RUNT. A la fecha, no se conoce el mecanismo que usará la Superintendencia Financiera para definir el incremento del SOAT en 2024. En cualquier caso, las proyecciones del Gobierno indican que el aumento del salario mínimo en 2024 sería de doble dígito (del 10 % en adelante).
🏥 Aportes a pensión y salud
En Colombia, los trabajadores formales del país deben estar afiliados a pensión, salud, administradora de riesgos laborales y cajas de compensación familiar. De estos conceptos, una parte lo paga la empresa y otra parte lo debe pagar el empleado y se resta de su salario básico.
Para calcular estos montos, se toma el salario básico del trabajador: en 2023, un 12,5 % correspondió a la cotización en salud y un 16 % a pensión. Sin embargo, esto no quiere decir que se descuente todo. Este año, el empleado solo terminó pagando un 4 % de su salario por cada concepto (8 % en total).
En los primeros días de enero, el Gobierno Nacional define los porcentajes de aportes a salud y pensión. En 2023, estos montos no fueron modificados.
🚧 Peajes en carretera
Esta semana se conoció que el Ministerio de Transporte prepara un decreto con el que pondrá fin al congelamiento en las tarifas de los peajes en Colombia. Tras casi un año, el Gobierno dará reversa a una medida que fue vendida al público como un alivio para el bolsillo de los viajeros y el transporte de carga.
El decreto del Ministerio de Transporte todavía es un borrador, por lo que no se sabe cuándo ni cuánto se incrementarán los peajes. Lo cierto es que el Gobierno deberá tomar una decisión antes del 31 de diciembre de este año y que para el 1 de julio de 2024 ya estará “normalizado” el esquema tarifario.
Lea también: Los peajes volverán a subir en Colombia: ¿sirvió para algo congelarlos en 2023?
Cabe resaltar que, en condiciones normales, el ajuste en los peajes se realiza a comienzos de año con base en la inflación (la cifra del IPC del DANE), como ocurre con todos los bienes y servicios de la economía.
El proyecto de decreto también plantea incrementos graduales mes a mes, que se aplicarían a los vehículos que crucen los peajes operados por el Invías y por los concesionarios (a cargo de la Agencia Nacional de Infraestructura).
⛽ ¿Alzas en el diésel?
Desde septiembre de 2022, los precios de los combustibles vienen siendo un tema álgido en Colombia. La gasolina ha tenido 12 alzas (hasta la pausa de octubre), sin embargo, el diésel permanece congelado.
Y es que, si bien el Gobierno ha reiterado que será necesario ajustar los precios del diésel, la pregunta siempre ha sido cuándo. Un reciente anuncio del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dio a entender que los aumentos en el diésel podrían empezar en febrero de 2024.
Teniendo en cuenta que la brecha entre el precio nacional e internacional de este combustible es de unos $8.000, el galón de diésel pasaría de los $9.000, precio actual, hasta los $17.000 o $18.000.
Durante el último congreso de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar), la presidenta ejecutiva del gremio, Nydia Hernández Jiménez, cuestionó si era justo el alza en el precio del diésel.
Hernández mencionó que los combustibles pesan el 40,2 % del total de los costos operativos del sector y enfatizó en que el impacto de una subida en el precio no solo sería para los transportadores, sino también para el costo de las mercancías.
Según estimaciones del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF), cada aumento del 1 % en el precio de este combustible equivale a $90 sobre el precio de venta al público del diésel, aproximadamente, por lo que puede causar un efecto en la inflación a largo plazo del 0,02 %.
La finalidad de eliminar el subsidio a los combustibles es acabar con el déficit que ha venido registrando el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC). En este año, el 77% del déficit del Fondo va a estar generado por el diésel, como consecuencia de no haber elevado su precio.
El Gobierno, a través del Ministerio de Hacienda, ha reiterado que los aumentos en el precio de los combustibles son impopulares, pero necesarios.
“Es una decisión dolorosa, impopular, pero fiscalmente responsable. El déficit generado por el FEPC cerrará en 2025 en $100 billones. Son cinco reformas tributarias”, dijo Ricardo Bonilla a inicios de octubre durante el congreso de Colfecar.
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