¿Por qué en Colombia casi todo se paga en efectivo? Las razones, según el Banrep
Cada día, los colombianos gastan un promedio de $40.000 en efectivo. ¿Cómo evolucionan los medios de pago en el país? Encuesta del Banco de la República analizó las preferencias de los usuarios.
Pese a los avances en banca digital, el efectivo sigue ganando por goleada en el uso de medios de pago en Colombia. Y es que, del total de pagos mensuales que se hacen en el país, en ocho de cada 10 se utiliza efectivo.
Una encuesta del Banco de la República, cuyos resultados se publicaron este martes 10 de septiembre, analizó cómo ha cambiado el uso de instrumentos de pago (efectivo, transferencias, tarjetas y cheques) al momento de gastar en alimentos, bebidas, vestuario, servicios públicos, transporte y vivienda.
El sondeo confirmó que el efectivo es el instrumento preferido en los pagos habituales que hacen los colombianos cada mes. Según el Banrep, del total de pagos mensuales en el total nacional, la mayoría se realiza con efectivo (78,6 %), seguido de transferencia electrónica en fondos (14,4 %), tarjeta débito (5,9 %) y tarjeta de crédito (1,1 %).
En general, todas las ciudades del país registran un alto uso de efectivo, con especial relevancia en Barranquilla (79,8 %), Cali (78,9 %), Bogotá (73 %) y Medellín (71,5 %).
Según el Banrep, los colombianos gastan en promedio unos $40.000 en efectivo diariamente.
¿Por qué se usa tanto efectivo?
La encuesta del Banco de la República arrojó que la facilidad y rapidez (17,4 %) para pagar es la principal razón por la cual se usa tanto el efectivo en Colombia, seguido de la costumbre de usarlo (15,5 %), para realizar compras de bajo monto (11,3 %), reutilizarlo de manera inmediata (10,7 %), porque son más baratas las compras en efectivo (8,1 %) y porque resulta menos riesgoso manejar efectivo (7,6 %).
El banco central halló diferencias considerables en el uso de uno u otro instrumento de pago según niveles de ingreso. En detalle, a medida que el nivel de ingresos de una persona aumenta, el uso de efectivo va disminuyendo y, al mismo tiempo, se incrementa el uso de instrumentos de pago como la transferencia electrónica, seguido de tarjetas débito o crédito.
Desde el punto de vista de los comercios, estos establecimientos afirman que la facilidad y la rapidez es la principal razón de uso del efectivo.
El estudio resalta también que el efectivo es el instrumento preferido en canales como buses, minimercados y supermercados de barrio, estaciones de servicio, ferreterías, peluquerías, administradoras de peajes e hipermercados.
“La razón sobre el uso del efectivo por ausencia de datáfonos la manifestaron especialmente las cafeterías y las tiendas de barrio”, indicó el Banrep.
El uso del pago electrónico
Por su parte, la transferencia electrónica aparece como la segunda opción más preferida en ciudades como Bogotá (20,2 %), Medellín (17,2 %), Barranquilla (12,7 %) y Cali (12 %).
La transferencia electrónica presenta su mayor participación en tiendas de mascotas (23,6 %), ferreterías (16,7 %), hipermercados (16,1 %), panaderías (13,2 %), cafeterías (12,9 %), peluquerías (11,7 %), y restaurantes, papelerías y misceláneas (alrededor del 10 %). Por debajo del 10 % están los supermercados de barrio, tiendas de barrio, droguerías, taxis, heladerías, famas y lácteos, estaciones de servicio y buses.
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Pese a los avances en banca digital, el efectivo sigue ganando por goleada en el uso de medios de pago en Colombia. Y es que, del total de pagos mensuales que se hacen en el país, en ocho de cada 10 se utiliza efectivo.
Una encuesta del Banco de la República, cuyos resultados se publicaron este martes 10 de septiembre, analizó cómo ha cambiado el uso de instrumentos de pago (efectivo, transferencias, tarjetas y cheques) al momento de gastar en alimentos, bebidas, vestuario, servicios públicos, transporte y vivienda.
El sondeo confirmó que el efectivo es el instrumento preferido en los pagos habituales que hacen los colombianos cada mes. Según el Banrep, del total de pagos mensuales en el total nacional, la mayoría se realiza con efectivo (78,6 %), seguido de transferencia electrónica en fondos (14,4 %), tarjeta débito (5,9 %) y tarjeta de crédito (1,1 %).
En general, todas las ciudades del país registran un alto uso de efectivo, con especial relevancia en Barranquilla (79,8 %), Cali (78,9 %), Bogotá (73 %) y Medellín (71,5 %).
Según el Banrep, los colombianos gastan en promedio unos $40.000 en efectivo diariamente.
¿Por qué se usa tanto efectivo?
La encuesta del Banco de la República arrojó que la facilidad y rapidez (17,4 %) para pagar es la principal razón por la cual se usa tanto el efectivo en Colombia, seguido de la costumbre de usarlo (15,5 %), para realizar compras de bajo monto (11,3 %), reutilizarlo de manera inmediata (10,7 %), porque son más baratas las compras en efectivo (8,1 %) y porque resulta menos riesgoso manejar efectivo (7,6 %).
El banco central halló diferencias considerables en el uso de uno u otro instrumento de pago según niveles de ingreso. En detalle, a medida que el nivel de ingresos de una persona aumenta, el uso de efectivo va disminuyendo y, al mismo tiempo, se incrementa el uso de instrumentos de pago como la transferencia electrónica, seguido de tarjetas débito o crédito.
Desde el punto de vista de los comercios, estos establecimientos afirman que la facilidad y la rapidez es la principal razón de uso del efectivo.
El estudio resalta también que el efectivo es el instrumento preferido en canales como buses, minimercados y supermercados de barrio, estaciones de servicio, ferreterías, peluquerías, administradoras de peajes e hipermercados.
“La razón sobre el uso del efectivo por ausencia de datáfonos la manifestaron especialmente las cafeterías y las tiendas de barrio”, indicó el Banrep.
El uso del pago electrónico
Por su parte, la transferencia electrónica aparece como la segunda opción más preferida en ciudades como Bogotá (20,2 %), Medellín (17,2 %), Barranquilla (12,7 %) y Cali (12 %).
La transferencia electrónica presenta su mayor participación en tiendas de mascotas (23,6 %), ferreterías (16,7 %), hipermercados (16,1 %), panaderías (13,2 %), cafeterías (12,9 %), peluquerías (11,7 %), y restaurantes, papelerías y misceláneas (alrededor del 10 %). Por debajo del 10 % están los supermercados de barrio, tiendas de barrio, droguerías, taxis, heladerías, famas y lácteos, estaciones de servicio y buses.
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