Los créditos siguen caros y la morosidad continúa creciendo
Según Transunion, el 10 % de quienes tienen un crédito de libre inversión presenta retrasos en sus pagos, mientras que continúa cayendo la originación de nuevos productos crediticios.
La economía colombiana atraviesa por un momento complejo. La elevada inflación (que aunque ha retrocedido sigue siendo alta), presiona a que se mantengan las altas tasas de interés, mismas que encarecen el crédito y, por ende, enfrían la economía, pues hay menos personas invirtiendo y comprando, lo que acentúa las caídas en las ventas de sectores como el comercio y la construcción.
Parte de toda esta sintomatología se evidencia con el comportamiento que ha tenido el crédito en Colombia pues, según el más reciente informe entregado por la central de información financiera Transunion, la morosidad continúa creciendo entre los colombianos, mientras que se ha perdido el interés por abrir nuevos productos crediticios.
Parte de esto lo revela su Indicador de la Industria de Crédito que, durante el primer trimestre del año, registró una disminución de 10 puntos frente al mismo periodo del año pasado.
Lea también: ¿Endeudarse más para pagar otras deudas es una fórmula exitosa?
“Esta disminución fue impulsada principalmente por el continuo deterioro del desempeño crediticio de los consumidores, así como por una disminución en la demanda y la oferta de crédito. La caída en el IIC ocurrió en un contexto de desaceleración de la actividad económica y deterioro en el mercado laboral, con presiones inflacionarias disminuyendo, pero en el que la incertidumbre y las tasas de interés se mantienen elevadas”, precisa.
En el primer trimestre de 2024, el desempeño de los consumidores continuó deteriorándose, como se observa en las tasas de morosidad, las tasas de rodamiento (el porcentaje de consumidores que pasa de una categoría de mora a la siguiente) y el desempeño de las cosechas (que miden el comportamiento de un crédito en diferentes períodos de tiempo después de haber sido otorgado).
Durante el primer trimestre del año la morosidad aumentó en todos los productos crediticios, especialmente en el de libre de inversión, donde la tasa alcanzó un 10 %, con un repunte de 357 puntos básicos. Lo siguió el microcrédito (8,7 %, 283pbs), la tarjeta de crédito (8,7, 198 pbs), el crédito de vehículo (7,1 %, 262 pbs), el crédito de vivienda (4,4 %, 39 pbs) y el crédito de libranza (1,9 %, 21 pbs).
“Si bien las tasas de rodamiento (el porcentaje de consumidores que pasa de una categoría de mora a la siguiente) en el primer trimestre de 2024 se mantuvieron relativamente estables en relación con el primer trimestre de 2023, siguieron mostrando deterioro en comparación con el primer trimestre de 2022, en particular para los segmentos de consumidores al día y en moras tempranas. Por ejemplo, en el total del sector financiero, el porcentaje de cuentas que pasó de la franja de mora de 30-59 días a la de 60-89 días entre enero y febrero de 2024 fue 63,9%, frente a 55,1% registrado entre enero de 2022 y febrero de 2022. En el caso de las tarjetas de crédito, la tasa de rodamiento a una categoría de mora mayor para la categoría de mora de 30-59 días fue del 65,8% entre enero de 2024 y febrero de 2024, frente al 56,0% entre enero y febrero de 2022. Se observaron aumentos similares en los créditos de libre inversión y los microcréditos”, detalla en su reporte.
Le puede interesar: ¿Cuál es el tipo de crédito más barato de Colombia?
Según lo explicado por la directora senior de investigación y consultoría de Transunion, Virginia Olivella, el deterioro considerable de la morosidad se explica por el aumento de deuda de los consumidores y el mayor costo de vida.
Todo esto ha derivado a repuntes en los castigos aplicados en el mercado crediticio, alcanzando al 9,3 % de la cartera total al final de 2023. En 2022 esta fue del 7,5 % y en 2021 fue del 7,3 %.
El impacto en los nuevos productos crediticios
Los coletazos de las altas tasas de interés, así como el elevado costo de vida, ha llevado a que cada vez más menos personas adquieran un nuevo producto crediticio.
Las tarjetas de crédito cayeron, durante el primer trimestre del año, un 44,4 %, lo que implicó una variación del -1,3 % frente al mismo periodo del año pasado. Los créditos de vehículos se contrajeron en un -22,7 % (-4,3 %), el crédito de libranza un -12,8 % (creció 1,8 %), crédito de libre inversión en un -19,4 % (-3,8 %), y el microcrédito en un -17,2 % (-1,9 %). Solo aumentó el crédito de vivienda, que creció 5,6 %.
“El número de colombianos con al menos un producto de crédito también disminuyó año contra año en el primer trimestre de 2024 para la mayoría de los productos de crédito, siendo los créditos de vehículo y los créditos de libre inversión los que mostraron las mayores disminuciones del 4,3% y el 3,8%, año contra año, respectivamente”, señala el reporte.
Los análisis de Transunion también mostraron que un 49 % de los consumidores encuestados habían planeado solicitar un crédito nuevo durante el próximo trimestre, pero decidieron no hacerlo porque el costo era demasiado alto. Un 23 % decidió buscar financiamientos en vías alternas, mientras que un 20 % cree que su solicitud sería rechazada.
“El panorama económico actual sigue siendo incierto, con el mercado laboral mostrando deterioro, la inflación disminuyendo gradualmente y el banco central continuando lentamente su ciclo de normalización de las tasas de interés. El consumo privado y la inversión continúan desacelerándose debido a las condiciones monetarias aún restrictivas, lo que impacta la actividad económica. En este contexto, seguimos observando cautela en cuanto a la oferta de nuevos créditos, así como cautela por parte de los consumidores hacia la deuda, lo que plantea un desafío de crecimiento para las entidades de crédito”, concluyó Olivella.
💰📈💱 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias económicas? Te invitamos a verlas en El Espectador.
La economía colombiana atraviesa por un momento complejo. La elevada inflación (que aunque ha retrocedido sigue siendo alta), presiona a que se mantengan las altas tasas de interés, mismas que encarecen el crédito y, por ende, enfrían la economía, pues hay menos personas invirtiendo y comprando, lo que acentúa las caídas en las ventas de sectores como el comercio y la construcción.
Parte de toda esta sintomatología se evidencia con el comportamiento que ha tenido el crédito en Colombia pues, según el más reciente informe entregado por la central de información financiera Transunion, la morosidad continúa creciendo entre los colombianos, mientras que se ha perdido el interés por abrir nuevos productos crediticios.
Parte de esto lo revela su Indicador de la Industria de Crédito que, durante el primer trimestre del año, registró una disminución de 10 puntos frente al mismo periodo del año pasado.
Lea también: ¿Endeudarse más para pagar otras deudas es una fórmula exitosa?
“Esta disminución fue impulsada principalmente por el continuo deterioro del desempeño crediticio de los consumidores, así como por una disminución en la demanda y la oferta de crédito. La caída en el IIC ocurrió en un contexto de desaceleración de la actividad económica y deterioro en el mercado laboral, con presiones inflacionarias disminuyendo, pero en el que la incertidumbre y las tasas de interés se mantienen elevadas”, precisa.
En el primer trimestre de 2024, el desempeño de los consumidores continuó deteriorándose, como se observa en las tasas de morosidad, las tasas de rodamiento (el porcentaje de consumidores que pasa de una categoría de mora a la siguiente) y el desempeño de las cosechas (que miden el comportamiento de un crédito en diferentes períodos de tiempo después de haber sido otorgado).
Durante el primer trimestre del año la morosidad aumentó en todos los productos crediticios, especialmente en el de libre de inversión, donde la tasa alcanzó un 10 %, con un repunte de 357 puntos básicos. Lo siguió el microcrédito (8,7 %, 283pbs), la tarjeta de crédito (8,7, 198 pbs), el crédito de vehículo (7,1 %, 262 pbs), el crédito de vivienda (4,4 %, 39 pbs) y el crédito de libranza (1,9 %, 21 pbs).
“Si bien las tasas de rodamiento (el porcentaje de consumidores que pasa de una categoría de mora a la siguiente) en el primer trimestre de 2024 se mantuvieron relativamente estables en relación con el primer trimestre de 2023, siguieron mostrando deterioro en comparación con el primer trimestre de 2022, en particular para los segmentos de consumidores al día y en moras tempranas. Por ejemplo, en el total del sector financiero, el porcentaje de cuentas que pasó de la franja de mora de 30-59 días a la de 60-89 días entre enero y febrero de 2024 fue 63,9%, frente a 55,1% registrado entre enero de 2022 y febrero de 2022. En el caso de las tarjetas de crédito, la tasa de rodamiento a una categoría de mora mayor para la categoría de mora de 30-59 días fue del 65,8% entre enero de 2024 y febrero de 2024, frente al 56,0% entre enero y febrero de 2022. Se observaron aumentos similares en los créditos de libre inversión y los microcréditos”, detalla en su reporte.
Le puede interesar: ¿Cuál es el tipo de crédito más barato de Colombia?
Según lo explicado por la directora senior de investigación y consultoría de Transunion, Virginia Olivella, el deterioro considerable de la morosidad se explica por el aumento de deuda de los consumidores y el mayor costo de vida.
Todo esto ha derivado a repuntes en los castigos aplicados en el mercado crediticio, alcanzando al 9,3 % de la cartera total al final de 2023. En 2022 esta fue del 7,5 % y en 2021 fue del 7,3 %.
El impacto en los nuevos productos crediticios
Los coletazos de las altas tasas de interés, así como el elevado costo de vida, ha llevado a que cada vez más menos personas adquieran un nuevo producto crediticio.
Las tarjetas de crédito cayeron, durante el primer trimestre del año, un 44,4 %, lo que implicó una variación del -1,3 % frente al mismo periodo del año pasado. Los créditos de vehículos se contrajeron en un -22,7 % (-4,3 %), el crédito de libranza un -12,8 % (creció 1,8 %), crédito de libre inversión en un -19,4 % (-3,8 %), y el microcrédito en un -17,2 % (-1,9 %). Solo aumentó el crédito de vivienda, que creció 5,6 %.
“El número de colombianos con al menos un producto de crédito también disminuyó año contra año en el primer trimestre de 2024 para la mayoría de los productos de crédito, siendo los créditos de vehículo y los créditos de libre inversión los que mostraron las mayores disminuciones del 4,3% y el 3,8%, año contra año, respectivamente”, señala el reporte.
Los análisis de Transunion también mostraron que un 49 % de los consumidores encuestados habían planeado solicitar un crédito nuevo durante el próximo trimestre, pero decidieron no hacerlo porque el costo era demasiado alto. Un 23 % decidió buscar financiamientos en vías alternas, mientras que un 20 % cree que su solicitud sería rechazada.
“El panorama económico actual sigue siendo incierto, con el mercado laboral mostrando deterioro, la inflación disminuyendo gradualmente y el banco central continuando lentamente su ciclo de normalización de las tasas de interés. El consumo privado y la inversión continúan desacelerándose debido a las condiciones monetarias aún restrictivas, lo que impacta la actividad económica. En este contexto, seguimos observando cautela en cuanto a la oferta de nuevos créditos, así como cautela por parte de los consumidores hacia la deuda, lo que plantea un desafío de crecimiento para las entidades de crédito”, concluyó Olivella.
💰📈💱 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias económicas? Te invitamos a verlas en El Espectador.