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Después de más de tres años de la contingencia que provocó la evacuación de 25.000 personas y llegó a reducir en 80 % el caudal del Río Cauca, EPM celebra los avances en la obra. Empresas Públicas de Medellín (EPM) dio a conocer que Hidroituango cumplió un nuevo hito técnico: la instalación de una cámara espiral y un anillo estacionario que cuentan con la capacidad de conducir un caudal de 169 metros cúbicos por segundo.
Estos elementos ya se ubicaron en su sitio definitivo en la casa de máquinas, la misma que tuvo que ser inundada en 2018 para evitar una emergencia mayor, generando la perdida de todos los equipos que allí se encontraban. De hecho, fue necesario reparar todas las cavernas y estructuras.
Los equipos que se trasladaron este viernes permitirán el funcionamiento de la segunda unidad de generación de energía y tienen un peso total de 250 toneladas y un diámetro externo de 15 metros.
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Ahora seguirá un proceso de nivelación. Según la información entregada por la empresa, “se le instalará un tapón y se realizará una prueba hidrostática o presión de agua para poder liberarlo y continuar con las labores de obra civil (vaciados en concretos y aceros de refuerzo)”, para finalmente proceder con las tareas de montajes de los componentes de la turbina.
Hoy cumplimos un nuevo hito técnico en el #ProyectoItuango, en la meta de entrar a operar en el segundo semestre de 2022. Se trata del traslado de una nueva cámara espiral y anillo estacionario al sitio definitivo en la casa de máquinas. pic.twitter.com/H93WVljPDf
— EPM estamos ahí (@EPMestamosahi) September 4, 2021
Estos equipos, que tienen una función hidráulica, sirven para la conducción del agua y son importantes en el soporte estructural de la unidad completa de generación.
Para ensamblarlos, 350 colaboradores de EPM y de diferentes empresas contratistas trabajaron dos meses y medio en la planeación, montaje y ejecución. Es válido recordar que la primera cámara espiral y anillo estacionario se instalaron el pasado 24 de julio, mes en el que el proyecto ya tenía un avance del 84,3 %.
Aunque la historia reciente del proyecto ha estado marcada por la crisis y los problemas legales; la presa más grande del país mantiene la meta de generar energía desde 2022 y de que las seis unidades restantes entren en funcionamiento entre 2023 y 2025.
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