Hocol buscará petróleo en la serranía de La Macarena
La ausencia de información que las empresas petroleras utilizaron por años como estrategia, ahora le pasa factura a la industria, en momentos de dificultad del sector por los precios bajos del crudo.
Jorge Sáenz V. jsaenz@elespectador.com
Hocol, petrolera del Grupo Ecopetrol, que busca hidrocarburos en el subsuelo de la serranía de La Macarena, explora primero la aceptación de la comunidad antes de sacar la primera gota de aceite.
Las protestas sociales de las comunidades y grupos étnicos en las zonas de potencial hidrocarburífico han puesto a pensar en nuevas estrategias de comunicación a las empresas petroleras. Antes de anunciar las inversiones y los trabajos exploratorios, Hocol quiere sentarse con los habitantes de la zona donde se ubican los campos de potencial petrolero.
El presidente de Hocol, Guillermo Fonseca, anunció que se va a perforar un pozo exploratorio en el bloque CPO 16, que aparece en los registros como Pegaso, ubicado en la serranía de La Macarena, con un potencial de 1.250 millones de barriles de crudo. “Nos vamos a acoger a las restricciones y lineamientos de las licencias y permisos que ya tenemos”, dijo al explicar que con este accionar se garantiza la ausencia de problemas ambientales.
La empresa cuenta con los permisos ambientales de la ANLA (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales) y los de Cormacarena, que le dan a Hocol “claras guías de las limitaciones y las pautas que tenemos que seguir para iniciar la actividad”. Fonseca dijo que ya se inició un acercamiento desde hace meses con las comunidades. Las obras civiles deben estar comenzado en el siguiente mes de septiembre.
La información revelada por Hocol indica que el potencial del pozo Pegaso es de entre 100 y 120 millones de barriles. El valor es del orden de US$6 a US$7 millones y “si fuera exitoso hay que perforar muchos más pozos y construir todas las facilidades de producción”. Para ello se requieren inversiones de US$700 millones.
Para el presidente de Hocol es claro que la diferencia entre la zona de exploración de Hupecol y la que van a explorar “es que nosotros estamos localizados en la parte norte de lo que se conoce como el AMEM (Área de Manejo Especial de La Macarena), precisamente en el corredor que se llama Distrito de Manejo Integral Ariari Guayabero, y en esta parte norte de ese distrito la actividad de exploración es permitida”.
El pozo Pegaso se encuentra en los municipios de San Juan de Arama y Vistahermosa, en el departamento del Meta. Hocol tiene en la actualidad 38 bloques asignados por la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y produce entre 20.000 y 25.000 barriles de crudo por día. La empresa venía registrando inversiones anuales de por lo menos US$200 millones. El año pasado invirtió US$120 millones, convirtiéndose en una de las pocas empresas que estaban haciendo actividad exploratoria y perforando pozos. Casi el 60 % de esa inversión en 2016 se dedicó a la exploración.
Hocol, petrolera del Grupo Ecopetrol, que busca hidrocarburos en el subsuelo de la serranía de La Macarena, explora primero la aceptación de la comunidad antes de sacar la primera gota de aceite.
Las protestas sociales de las comunidades y grupos étnicos en las zonas de potencial hidrocarburífico han puesto a pensar en nuevas estrategias de comunicación a las empresas petroleras. Antes de anunciar las inversiones y los trabajos exploratorios, Hocol quiere sentarse con los habitantes de la zona donde se ubican los campos de potencial petrolero.
El presidente de Hocol, Guillermo Fonseca, anunció que se va a perforar un pozo exploratorio en el bloque CPO 16, que aparece en los registros como Pegaso, ubicado en la serranía de La Macarena, con un potencial de 1.250 millones de barriles de crudo. “Nos vamos a acoger a las restricciones y lineamientos de las licencias y permisos que ya tenemos”, dijo al explicar que con este accionar se garantiza la ausencia de problemas ambientales.
La empresa cuenta con los permisos ambientales de la ANLA (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales) y los de Cormacarena, que le dan a Hocol “claras guías de las limitaciones y las pautas que tenemos que seguir para iniciar la actividad”. Fonseca dijo que ya se inició un acercamiento desde hace meses con las comunidades. Las obras civiles deben estar comenzado en el siguiente mes de septiembre.
La información revelada por Hocol indica que el potencial del pozo Pegaso es de entre 100 y 120 millones de barriles. El valor es del orden de US$6 a US$7 millones y “si fuera exitoso hay que perforar muchos más pozos y construir todas las facilidades de producción”. Para ello se requieren inversiones de US$700 millones.
Para el presidente de Hocol es claro que la diferencia entre la zona de exploración de Hupecol y la que van a explorar “es que nosotros estamos localizados en la parte norte de lo que se conoce como el AMEM (Área de Manejo Especial de La Macarena), precisamente en el corredor que se llama Distrito de Manejo Integral Ariari Guayabero, y en esta parte norte de ese distrito la actividad de exploración es permitida”.
El pozo Pegaso se encuentra en los municipios de San Juan de Arama y Vistahermosa, en el departamento del Meta. Hocol tiene en la actualidad 38 bloques asignados por la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y produce entre 20.000 y 25.000 barriles de crudo por día. La empresa venía registrando inversiones anuales de por lo menos US$200 millones. El año pasado invirtió US$120 millones, convirtiéndose en una de las pocas empresas que estaban haciendo actividad exploratoria y perforando pozos. Casi el 60 % de esa inversión en 2016 se dedicó a la exploración.