Infraestructura con alianzas público-públicas: ¿cuánto invertirá el Gobierno?
El modelo, liderado por el Ministerio de Transporte, el Invías y Findeter, contará con la utilización de recursos de peajes, las vigencias futuras y los patrimonios autónomos.
El Gobierno presentó un nuevo esquema de financiación destinado a fortalecer la infraestructura vial del país. Bajo el liderazgo de la ministra de Transporte, María Constanza García, junto con el apoyo del Instituto Nacional de Vías y Findeter, este modelo promete transformar la conectividad regional con una inversión inicial cercana al billón de pesos.
El modelo de financiación de alianzas público-públicas trae recursos de los peajes y vigencias futuras al presente, permitiendo la ejecución inmediata de proyectos estratégicos. Este esquema, concertado con los gobiernos locales y financiado por el Invías con asistencia técnica de Findeter, busca maximizar la eficiencia en la asignación de recursos públicos.
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¿Qué es lo importante en este modelo?
Juan Carlos Muñiz, presidente de Findeter, dijo que el modelo se puede replicar en sectores que cuenten con fuentes reales de financiación “y que pueda servir de garantía en los créditos que se reciben a través del patrimonio autónomo”.
- Utilización de recursos de peajes: Garantiza financiación a largo plazo con ingresos sostenibles.
- Vigencias futuras: Permiten planificar inversiones de forma escalonada y cumplir con compromisos financieros en el tiempo.
- Patrimonios autónomos: Instrumentos que respaldan créditos necesarios para iniciar las obras.
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Los proyectos priorizados
La ministra García subrayó que este esquema no solo impulsa la infraestructura vial, sino que también fomenta la competitividad y el desarrollo regional. Agregó que se gestionarán proyectos por $2,6 billones, cubriendo más de 1.000 kilómetros de vías.
Estos serían los departamentos priorizados:
Región Caribe
- Segunda calzada Valledupar – La Paz (Cesar), 7 kilómetros.
- Mejoramiento de la vía El Piñón - Salamina - Guáimaro, corredor Plato – Palermo (Magdalena).
- Conectividad entre Sucre y El Cauchal (Sucre).
Eje cafetero y Valle del Cauca
- Segunda calzada entre Montenegro y Quimbaya, y mantenimiento de la vía Cartago – Montenegro (Quindío y Valle del Cauca).
- Variante Suroccidental de Cartago: construcción de 13 kilómetros de la primera calzada.
- Corredor La Romelia – El Pollo: Primera etapa de la segunda calzada.
Santander
- Construcción de un par vial entre Puente Tierra y El Cero.
El éxito del modelo depende de la capacidad de coordinación entre las entidades involucradas, el cumplimiento de las vigencias futuras y el mantenimiento de un flujo constante de ingresos.
A largo plazo, este esquema podría replicarse para financiar proyectos de educación, salud o energías renovables, abriendo nuevas oportunidades para el desarrollo sostenible del país.
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¿Qué es lo importante en este modelo?
Juan Carlos Muñiz, presidente de Findeter, dijo que el modelo se puede replicar en sectores que cuenten con fuentes reales de financiación “y que pueda servir de garantía en los créditos que se reciben a través del patrimonio autónomo”.
- Utilización de recursos de peajes: Garantiza financiación a largo plazo con ingresos sostenibles.
- Vigencias futuras: Permiten planificar inversiones de forma escalonada y cumplir con compromisos financieros en el tiempo.
- Patrimonios autónomos: Instrumentos que respaldan créditos necesarios para iniciar las obras.
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Los proyectos priorizados
La ministra García subrayó que este esquema no solo impulsa la infraestructura vial, sino que también fomenta la competitividad y el desarrollo regional. Agregó que se gestionarán proyectos por $2,6 billones, cubriendo más de 1.000 kilómetros de vías.
Estos serían los departamentos priorizados:
Región Caribe
- Segunda calzada Valledupar – La Paz (Cesar), 7 kilómetros.
- Mejoramiento de la vía El Piñón - Salamina - Guáimaro, corredor Plato – Palermo (Magdalena).
- Conectividad entre Sucre y El Cauchal (Sucre).
Eje cafetero y Valle del Cauca
- Segunda calzada entre Montenegro y Quimbaya, y mantenimiento de la vía Cartago – Montenegro (Quindío y Valle del Cauca).
- Variante Suroccidental de Cartago: construcción de 13 kilómetros de la primera calzada.
- Corredor La Romelia – El Pollo: Primera etapa de la segunda calzada.
Santander
- Construcción de un par vial entre Puente Tierra y El Cero.
El éxito del modelo depende de la capacidad de coordinación entre las entidades involucradas, el cumplimiento de las vigencias futuras y el mantenimiento de un flujo constante de ingresos.
A largo plazo, este esquema podría replicarse para financiar proyectos de educación, salud o energías renovables, abriendo nuevas oportunidades para el desarrollo sostenible del país.
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