JetBlue dejará de operar rutas no rentables, incluyendo la de Bogotá
A mitad de año, la aerolínea eliminará rutas en Estados Unidos y abandonará el servicio en tres ciudades de América Latina. Su objetivo es reducir costos después de que el gobierno de Estados Unidos bloqueó dos veces sus intentos de crecimiento.
JetBlue planea recortar casi un tercio de sus vuelos desde el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles en junio, incluidas las rutas a Las Vegas, Miami y San Francisco, según informó la aerolínea en un memorando a sus empleados. También se eliminarán los vuelos entre Fort Lauderdale, Florida, y ciudades como Atlanta, Nueva Orleans y Salt Lake City.
“Con menos tiempo de vuelo disponible y la necesidad de mejorar nuestro desempeño financiero, más que nunca, cada ruta tiene que ganarse su derecho a permanecer en la red”, dijo en la carta Dave Jehn, vicepresidente de planificación de redes y asociaciones con aerolíneas. “Es más importante que nunca que seamos quirúrgicos en todas las rutas de nuestra red”.
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JetBlue está volviendo su atención hacia adentro después de tres años de batallas legales fallidas para salvar una sociedad operativa con American Airlines Group y luego preservar una adquisición de Spirit Airlines. La directora ejecutiva de JetBlue, Joanna Geraghty, dijo que su máxima prioridad es un retorno a ganancias consistentes, que la aerolínea no ha tenido desde 2019.
Estos son los cambios más significativos hasta ahora para JetBlue desde que el inversionista activista Carl Icahn reveló en febrero una participación de aproximadamente el 10 % y comenzó a presionar para aumentar el valor para los accionistas. Desde entonces, la empresa ha concedido a su empresa de inversión dos puestos en el consejo de administración.
Además de las rutas nacionales, JetBlue finalizará su servicio en Bogotá, Lima y Quito el 13 de junio. “Estos mercados no son rentables y nuestro tiempo de vuelo se puede aprovechar mejor en otros lugares”, afirmó Jehn. También se retirará de Kansas City, Missouri, y cortará rutas en junio entre Nueva York y Detroit.
Algunas de las reducciones de Florida se trasladarán a los mercados de “mejor rendimiento” en el noreste de Estados Unidos y a ciudades como Cancún, Bahía Montego y Punta Cana. El número total de salidas desde Fort Lauderdale se mantendrá estable, dijo la aerolínea. El crecimiento en los aeropuertos internacionales LaGuardia y John F. Kennedy de Nueva York estará vinculado a la disponibilidad de franjas horarias.
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JetBlue planea mantener “rutas básicas” a lo largo de la costa este de Estados Unidos y hacia destinos vacacionales en el Caribe y aquellos populares para visitar a amigos y familiares. Los cambios revelados el martes no afectarán la guía de capacidad de vuelos de JetBlue para todo el año.
Reveses legales
Los tribunales federales bloquearon tanto la iniciativa de Northeast Alliance con American como la compra de Spirit por valor de US$3.800 millones, alegando que perjudicaban a los consumidores y violaban las leyes antimonopolio. Las derrotas, que reflejan la oposición de la administración Biden a la consolidación de dominio en algunas industrias, relegaron efectivamente a JetBlue a un estatus de segundo nivel entre las aerolíneas estadounidenses con pocas opciones para competir ampliamente con empresas como Delta Air Lines y United Airlines Holdings.
En contexto: JetBlue ya no comprará a Spirit Airlines: ¿cuáles fueron las razones?
La inmovilización forzosa de algunos de sus aviones también está limitando el crecimiento. JetBlue ha dicho que espera que un promedio de 11 aviones estén fuera de servicio durante todo el año debido a un defecto de fabricación en los motores fabricados por la unidad Pratt & Whitney de RTX Corp., alcanzando un máximo de 13 a 15 aviones estacionados a finales de 2024.
A finales de enero, Geraghty describió las “medidas agresivas” que la aerolínea ya tenía en marcha para volver a obtener ganancias, incluido el retraso de US$2.500 millones en el gasto previsto en aviones hasta 2028 y, posteriormente, el aplazamiento de las entregas de aviones.
Se están evaluando recortes más profundos más allá de su actual plan de reducción de gastos que, según afirma, proporcionará ahorros de hasta US$200 millones para finales de este año.
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JetBlue planea recortar casi un tercio de sus vuelos desde el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles en junio, incluidas las rutas a Las Vegas, Miami y San Francisco, según informó la aerolínea en un memorando a sus empleados. También se eliminarán los vuelos entre Fort Lauderdale, Florida, y ciudades como Atlanta, Nueva Orleans y Salt Lake City.
“Con menos tiempo de vuelo disponible y la necesidad de mejorar nuestro desempeño financiero, más que nunca, cada ruta tiene que ganarse su derecho a permanecer en la red”, dijo en la carta Dave Jehn, vicepresidente de planificación de redes y asociaciones con aerolíneas. “Es más importante que nunca que seamos quirúrgicos en todas las rutas de nuestra red”.
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JetBlue está volviendo su atención hacia adentro después de tres años de batallas legales fallidas para salvar una sociedad operativa con American Airlines Group y luego preservar una adquisición de Spirit Airlines. La directora ejecutiva de JetBlue, Joanna Geraghty, dijo que su máxima prioridad es un retorno a ganancias consistentes, que la aerolínea no ha tenido desde 2019.
Estos son los cambios más significativos hasta ahora para JetBlue desde que el inversionista activista Carl Icahn reveló en febrero una participación de aproximadamente el 10 % y comenzó a presionar para aumentar el valor para los accionistas. Desde entonces, la empresa ha concedido a su empresa de inversión dos puestos en el consejo de administración.
Además de las rutas nacionales, JetBlue finalizará su servicio en Bogotá, Lima y Quito el 13 de junio. “Estos mercados no son rentables y nuestro tiempo de vuelo se puede aprovechar mejor en otros lugares”, afirmó Jehn. También se retirará de Kansas City, Missouri, y cortará rutas en junio entre Nueva York y Detroit.
Algunas de las reducciones de Florida se trasladarán a los mercados de “mejor rendimiento” en el noreste de Estados Unidos y a ciudades como Cancún, Bahía Montego y Punta Cana. El número total de salidas desde Fort Lauderdale se mantendrá estable, dijo la aerolínea. El crecimiento en los aeropuertos internacionales LaGuardia y John F. Kennedy de Nueva York estará vinculado a la disponibilidad de franjas horarias.
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Reveses legales
Los tribunales federales bloquearon tanto la iniciativa de Northeast Alliance con American como la compra de Spirit por valor de US$3.800 millones, alegando que perjudicaban a los consumidores y violaban las leyes antimonopolio. Las derrotas, que reflejan la oposición de la administración Biden a la consolidación de dominio en algunas industrias, relegaron efectivamente a JetBlue a un estatus de segundo nivel entre las aerolíneas estadounidenses con pocas opciones para competir ampliamente con empresas como Delta Air Lines y United Airlines Holdings.
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La inmovilización forzosa de algunos de sus aviones también está limitando el crecimiento. JetBlue ha dicho que espera que un promedio de 11 aviones estén fuera de servicio durante todo el año debido a un defecto de fabricación en los motores fabricados por la unidad Pratt & Whitney de RTX Corp., alcanzando un máximo de 13 a 15 aviones estacionados a finales de 2024.
A finales de enero, Geraghty describió las “medidas agresivas” que la aerolínea ya tenía en marcha para volver a obtener ganancias, incluido el retraso de US$2.500 millones en el gasto previsto en aviones hasta 2028 y, posteriormente, el aplazamiento de las entregas de aviones.
Se están evaluando recortes más profundos más allá de su actual plan de reducción de gastos que, según afirma, proporcionará ahorros de hasta US$200 millones para finales de este año.
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