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En el panorama económico colombiano, el sector del entretenimiento ha emergido como una de las ramas más dinámicas y con mayor capacidad de transformación en los últimos años.
Un informe del grupo de investigaciones económicas de Corficolombiana detalló que desde la pandemia, este sector ha crecido 87 % entre el cuarto trimestre de 2019 y el tercer trimestre de 2024, lo que representa un avance siete veces mayor al crecimiento acumulado del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, que fue del 12 % en el mismo periodo.
Esta expansión, que posiciona al entretenimiento como un motor clave del desarrollo económico, supera incluso a sectores tradicionales como la construcción (4,3 % del PIB), la minería (3,8 %) y los servicios públicos (3%).
Pero ¿qué factores explican este ascenso y cuáles son sus implicaciones para la economía y la sociedad?
Los analistas mencionan que, aunque la percepción general apunta a los conciertos y eventos artísticos como los principales impulsores del entretenimiento, los datos revelan que el verdadero motor del crecimiento han sido los juegos de azar. Este subsector, que incluye actividades como apuestas en línea y loterías, ha registrado un crecimiento extraordinario:
- 450 % de aumento entre 2018 y 2022: Esto equivale a un crecimiento anual promedio de 53 %.
- Mayor participación en el PIB: Actualmente, los juegos de azar representan 2 % del PIB nacional, superando actividades como las obras civiles (1,1 %) y el carbón (0,7 %).
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Regulación y avances tecnológicos
El crecimiento de los juegos de azar no ocurrió por casualidad. La implementación de regulaciones específicas, como el artículo 93 de la Ley 1753 de 2015, fue un catalizador esencial. Esta normativa permitió:
- Definir los juegos de azar novedosos: Incluyó actividades operadas en línea, como las apuestas deportivas.
- Otorgar concesiones: Facilitó la entrada de grandes empresas al mercado. En 2019, ya operaban 18 compañías bajo estas regulaciones, dinamizando la industria.
Aumentar la trazabilidad: La normativa mejoró el control sobre las transacciones y los datos, fortaleciendo la transparencia y la confianza en el sector.
El impacto de estas medidas se traduce en cifras claras: en 2023, Coljuegos transfirió $0,78 billones al sistema de salud, más del doble de lo registrado en 2018 ($0,34 billones).
Ahora bien, más allá del azar, el papel de los conciertos y espectáculos en vivo han demostrado un desempeño evidente. Por ejemplo, en el crecimiento de ingresos por boletería y la apertura de espacios icónicos.
En el primer caso, pasaron de $310.000 millones en 2018 a $1,53 billones en 2023. Mientras que en el segundo, centros como el Movistar Arena y el Coliseo Medplus han impulsado el número de eventos, que pasaron de 67 en 2019 a más de 100 en 2023.
Este dinamismo ha sido posible gracias a incentivos como la Ley 2010 de 2019, que eximió del impuesto de renta por siete años a ciertas empresas de la economía naranja.
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Los protagonistas del crecimiento económico
El sector entretenimiento ha incrementado su participación en la economía nacional, alcanzando el 4,4% del PIB en 2024. Esto lo posiciona como uno de los mayores contribuyentes al crecimiento económico reciente, con aportes que superan a otros sectores estratégicos:
| Sector | Participación del PIB (%) |
|---|---|
| Entretenimiento | 4,4 % |
| Construcción | 4,3 % |
| Minería | 3,8 % |
| Energía, gas y agua | 3 % |
¿Podrá mantenerse este ritmo?
El entretenimiento tiene un potencial altísimo en Colombia, y para lograrlo, requiere:
- Inversión en infraestructura con espacios competitivos para eventos en vivo, atrayendo audiencias internacionales.
- Ampliar la información estadística para diseñar políticas públicas efectivas.
- Fomentar la economía naranja, con beneficios fiscales a más actividades artísticas y culturales.
Sin embargo, los analistas de Corficolombiana advierten que el crecimiento acelerado del entretenimiento plantea retos importantes.
En particular, los juegos de azar, aunque son un motor económico, generan externalidades negativas como la ludopatía. Según estudios internacionales, estas actividades pueden tener impactos graves en la salud pública, la productividad laboral y los índices de criminalidad.
En términos de salud pública, la ludopatía afecta a los jugadores compulsivos, generando costos para el sistema de salud.
Por otro lado, el impacto fiscal. En Reino Unido, los trastornos del juego cuestan £$1.400 millones anuales (US$1.760 millones).
Para mitigar estos riesgos, es fundamental fortalecer la regulación y promover un tratamiento tributario más equitativo. Actualmente, las apuestas en línea están exentas del IVA, lo que podría ajustarse para aumentar la formalización y aliviar las presiones fiscales.
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