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“El precio de compra es de aproximadamente US$2.100 millones, de los cuales US$1.800 millones se abonarán en efectivo y el resto en acciones de Lenovo”, detalló el comunicado oficial de la organización.
La transacción, que ya pasó por la vigilancia de los órganos reguladores, advirtió Lenovo, lo convertirá en uno de los actores más importantes en el mercado global de servidores x86, valorado en US$42.100 millones, de acuerdo con la consultora IDC.
Yang Yuanqing, presidente y CEO de Lenovo, recalcó que “al concretar la adquisición de x86, la compañía agregará un negocio de nivel mundial que extiende nuestra capacidad en hardware y dispositivos, convirtiéndonos inmediatamente en un sólido número tres dentro del mercado global de servidores”.
Las marcas se conservarán y en lo que se va a trabajar es en una estrategia complementaria de servicios, explicó Juan Carlos Uribe, presidente de Lenovo Colombia. “Viene a completar nuestro portafolio, con el cual queremos liderar el mercado global. Queremos replicar nuestra historia con las fusiones que hemos hecho antes”. Para el mercado local “se ampliará la oferta y el cliente final sentirá la integración de manera positiva”.
El comunicado oficial, dado a conocer ayer en Estados Unidos, explica que “el acuerdo se genera sobre una sólida historia de colaboración que comenzó en 2005, cuando Lenovo adquirió la unidad de negocios de computación personal de IBM, que incluía la línea de computadoras ThinkPad. La pendiente adquisición de Motorola Mobility de Google por parte de Lenovo convertirá a este último en el tercer fabricante más importante de smartphones, mientras fortalece aún más su posición como tercer productor de dispositivos conectados inteligentes: PC, tablets y smartphones”.
De acuerdo con las cifras más recientes, Lenovo es una empresa con un capital de US$39.000 millones y operaciones en 160 países, aparece entre la lista de Fortune 500 y basa su desarrollo en los centros de investigación en Yamato, Japón; Beijing, Shanghái y Shenzhen, China; São Paulo, Brasil, y en Raleigh, Carolina del Norte.