La actividad industrial en China se contrajo en junio por segundo mes consecutivo, evidenciando la endeble recuperación de la segunda mayor economía del mundo, revelaron datos divulgados el domingo.
El índice de gestores de compras (PMI) manufacturero -indicador clave de producción fabril- registró 49,5 en junio, idéntico a la cifra de mayo, según la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
Un PMI inferior a 50 indica un declive en la actividad y por encima de esa cifra implica una expansión.
El índice más reciente está en línea con la proyección de Bloomberg basada en una consulta a economistas.
A mediados de julio se celebrará en Pekín un encuentro de autoridades para discutir la recuperación económica del país.
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La contracción del sector manufacturero es preocupante para China, que ha luchado por recuperar el momento desde finales de 2022, cuando levantó las duras restricciones pandémicas que lastraron a la economía.
El PMI no manufacturero, que incluye la actividad del sector de servicios, alcanzó 50,5 en junio, señaló la ONE.
Pero a pesar del crecimiento, la cifra refleja una caída desde el mes anterior, de 51,1.
El estadístico Zhao Qinghe, de la ONE, advirtió en un comunicado que, si bien el país “mantuvo una expansión general” en junio, “la base para una recuperación y mejora continuas aún deben ser consolidadas”.
Entre los obstáculos que enfrenta la economía están la deuda de su sector inmobiliario, el débil consumo y el elevado desempleo, en especial entre los jóvenes.
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