Así le irá al dólar en diciembre: factores clave para los próximos días
En los últimos días, la divisa se ha mantenido en un precio promedio de $4.420. Le contamos qué marcará su rumbo en la semana que inicia.
El dólar estadounidense ha mantenido una dinámica de volatilidad en los últimos días, cerrando recientemente en un promedio de $4.420 pesos, moviéndose entre los $4.376 y los $4.420 en la semana que acaba de terminar, es decir, un incremento del 0,5 % en su precio frente a la semana anterior.
Este comportamiento ha estado influido tanto por factores internacionales como nacionales, que seguirán determinando su cotización en las primeras semanas de diciembre. Según expertos, el dólar podría moverse en un rango entre $4.400 y $4.450 en el último mes del año, con posibilidad de ajustes dependiendo de ciertos factores económicos y políticos dentro y fuera de Colombia.
¿Qué pasa fuera de Colombia?
El precio del crudo Brent, referencia para Colombia, ha ido dejando atrás la senda bajista, consolidando valores entre los US$72 y US$73 a la fecha. Esto genera un panorama favorable para la sostenibilidad del peso colombiano, dado que los ingresos petroleros representan una parte importante de las divisas en el país.
Según Michael Ortegón, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de UNINPAHU, aunque el Brent cerró la semana pasada con una leve caída del 1,6 %, se espera que el precio recupere terreno en los próximos días, lo que podría contribuir a estabilizar la tasa de cambio en torno a los $4.400.
En lo anterior coincide Sebastián Chacón, director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano, quien afirma que “el petróleo Brent ha venido subiendo, rompiendo esa tendencia a la baja, lo que podría ubicar el dólar entre los $4.300 y $4.400 para el cierre del año”. Además, destaca que “las expectativas de una nueva disminución de tasas por parte de la FED serán determinantes para definir el comportamiento del dólar”.
Así mismo, la política monetaria de la Reserva Federal (FED por sus siglas en inglés) de Estados Unidos juega un papel crucial en el comportamiento del dólar. Actualmente, existe incertidumbre sobre si la FED reducirá sus tasas de interés antes de fin de año y, de hacerlo, cuál sería la magnitud de dicho ajuste.
Henry Amorocho, profesor de Hacienda y Presupuesto Público de la Universidad del Rosario, destaca que el presidente de la FED se ha mostrado cauteloso respecto a una posible reducción. El mercado estima que, de producirse, el ajuste de la FED sería mínimo, lo que podría mantener al dólar fortalecido frente a otras monedas, incluyendo el peso colombiano.
El mercado de divisas también se alista para un cierre de año con algo de incertidumbre en el paisaje, por cuenta de la expectativa del cambio de Gobierno en Estados Unidos. El presidente electo, Donald Trump, será investido el próximo 10 de enero y, hasta entonces, la conformación de su gabinete, comentarios y anuncios resonarán en el mundo.
Por ejemplo, las recientes declaraciones de Trump sobre la imposición de aranceles adicionales del 10 % a productos chinos y del 2 5% a las importaciones de México y Canadá han incrementado la aversión al riesgo en los mercados internacionales. Esto podría ejercer presión al alza sobre el dólar en mercados emergentes como el colombiano.
En los últimos días, el feriado por el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos redujo el volumen de transacciones en los mercados, generando un respiro temporal en los flujos internacionales de dinero originados desde la primera economía global. Se espera que esta semana, con el retorno a la actividad normal, los mercados reactiven movimientos que podrían influir en la cotización de la divisa.
Y en el ámbito regional, “las noticias fiscales en Brasil y la depreciación del real brasileño impactaron a las monedas de mercados emergentes, incluyendo el peso colombiano”, afirma Jhon Torres, economista y docente de la Uniagustiniana.
Factores locales a tener en cuenta
En lo que respecta a la economía nacional, se espera que la inflación y las tasas de interés continúen en el rumbo satisfactorio que han presentado en los últimos meses.
Se prevé que la inflación anualizada, que en octubre se ubicó en 5,4 %, cierre noviembre en 5,12 %, lo que representaría una baja de 0,19 puntos porcentuales. Esta tendencia refuerza las expectativas de que Colombia termine el año con una inflación cercana al 5 %, lo cual es alentador para el poder adquisitivo de los hogares y, de paso, la atracción de inversiones extranjeras, como lo estiman los expertos consultados.
No obstante, uno de los elementos de incertidumbre en el ámbito local es la discusión de la ley de financiamiento en el Congreso. De acuerdo con Henry Amorocho, existe una alta probabilidad de que esta ley no sea aprobada antes de fin de año, lo que podría aliviar algunas presiones sobre el mercado cambiario.
Por su parte, el docente de Uniagustiana anota que las preocupaciones sobre el recorte presupuestal (para 2025) anunciado por el gobierno y su impacto fiscal han sido un factor clave que los inversionistas internacionales han considerado al valorar el peso colombiano.
Con el inicio de diciembre, una época caracterizada por las compras navideñas y el aumento en el consumo, genera un aumento en la actividad comercial. Esto podría fortalecer temporalmente el peso colombiano, dado el incremento en la demanda interna y el flujo de efectivo en la economía.
Aunque la actividad comercial es un factor positivo, Jhon Torres, economista y docente de la Uniagustiniana, advierte que “la incertidumbre sobre el recorte presupuestal anunciado por el gobierno y su impacto fiscal sigue siendo un factor clave que los inversionistas internacionales consideran al valorar el peso colombiano”.
Aunque el dólar muestra cierta estabilidad, factores como el comportamiento del petróleo, las decisiones de la FED y el panorama político y fiscal local seguirán moldeando su cotización durante el cierre del año. En los próximos días, la atención la concentrarán posibles anuncios en materia de comercio entre Estados Unidos, México y China; mientras que en Colombia, los mercados seguirán monitoreando de cerca el panorama fiscal y su influencia en la cotización de la moneda.
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El dólar estadounidense ha mantenido una dinámica de volatilidad en los últimos días, cerrando recientemente en un promedio de $4.420 pesos, moviéndose entre los $4.376 y los $4.420 en la semana que acaba de terminar, es decir, un incremento del 0,5 % en su precio frente a la semana anterior.
Este comportamiento ha estado influido tanto por factores internacionales como nacionales, que seguirán determinando su cotización en las primeras semanas de diciembre. Según expertos, el dólar podría moverse en un rango entre $4.400 y $4.450 en el último mes del año, con posibilidad de ajustes dependiendo de ciertos factores económicos y políticos dentro y fuera de Colombia.
¿Qué pasa fuera de Colombia?
El precio del crudo Brent, referencia para Colombia, ha ido dejando atrás la senda bajista, consolidando valores entre los US$72 y US$73 a la fecha. Esto genera un panorama favorable para la sostenibilidad del peso colombiano, dado que los ingresos petroleros representan una parte importante de las divisas en el país.
Según Michael Ortegón, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de UNINPAHU, aunque el Brent cerró la semana pasada con una leve caída del 1,6 %, se espera que el precio recupere terreno en los próximos días, lo que podría contribuir a estabilizar la tasa de cambio en torno a los $4.400.
En lo anterior coincide Sebastián Chacón, director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano, quien afirma que “el petróleo Brent ha venido subiendo, rompiendo esa tendencia a la baja, lo que podría ubicar el dólar entre los $4.300 y $4.400 para el cierre del año”. Además, destaca que “las expectativas de una nueva disminución de tasas por parte de la FED serán determinantes para definir el comportamiento del dólar”.
Así mismo, la política monetaria de la Reserva Federal (FED por sus siglas en inglés) de Estados Unidos juega un papel crucial en el comportamiento del dólar. Actualmente, existe incertidumbre sobre si la FED reducirá sus tasas de interés antes de fin de año y, de hacerlo, cuál sería la magnitud de dicho ajuste.
Henry Amorocho, profesor de Hacienda y Presupuesto Público de la Universidad del Rosario, destaca que el presidente de la FED se ha mostrado cauteloso respecto a una posible reducción. El mercado estima que, de producirse, el ajuste de la FED sería mínimo, lo que podría mantener al dólar fortalecido frente a otras monedas, incluyendo el peso colombiano.
El mercado de divisas también se alista para un cierre de año con algo de incertidumbre en el paisaje, por cuenta de la expectativa del cambio de Gobierno en Estados Unidos. El presidente electo, Donald Trump, será investido el próximo 10 de enero y, hasta entonces, la conformación de su gabinete, comentarios y anuncios resonarán en el mundo.
Por ejemplo, las recientes declaraciones de Trump sobre la imposición de aranceles adicionales del 10 % a productos chinos y del 2 5% a las importaciones de México y Canadá han incrementado la aversión al riesgo en los mercados internacionales. Esto podría ejercer presión al alza sobre el dólar en mercados emergentes como el colombiano.
En los últimos días, el feriado por el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos redujo el volumen de transacciones en los mercados, generando un respiro temporal en los flujos internacionales de dinero originados desde la primera economía global. Se espera que esta semana, con el retorno a la actividad normal, los mercados reactiven movimientos que podrían influir en la cotización de la divisa.
Y en el ámbito regional, “las noticias fiscales en Brasil y la depreciación del real brasileño impactaron a las monedas de mercados emergentes, incluyendo el peso colombiano”, afirma Jhon Torres, economista y docente de la Uniagustiniana.
Factores locales a tener en cuenta
En lo que respecta a la economía nacional, se espera que la inflación y las tasas de interés continúen en el rumbo satisfactorio que han presentado en los últimos meses.
Se prevé que la inflación anualizada, que en octubre se ubicó en 5,4 %, cierre noviembre en 5,12 %, lo que representaría una baja de 0,19 puntos porcentuales. Esta tendencia refuerza las expectativas de que Colombia termine el año con una inflación cercana al 5 %, lo cual es alentador para el poder adquisitivo de los hogares y, de paso, la atracción de inversiones extranjeras, como lo estiman los expertos consultados.
No obstante, uno de los elementos de incertidumbre en el ámbito local es la discusión de la ley de financiamiento en el Congreso. De acuerdo con Henry Amorocho, existe una alta probabilidad de que esta ley no sea aprobada antes de fin de año, lo que podría aliviar algunas presiones sobre el mercado cambiario.
Por su parte, el docente de Uniagustiana anota que las preocupaciones sobre el recorte presupuestal (para 2025) anunciado por el gobierno y su impacto fiscal han sido un factor clave que los inversionistas internacionales han considerado al valorar el peso colombiano.
Con el inicio de diciembre, una época caracterizada por las compras navideñas y el aumento en el consumo, genera un aumento en la actividad comercial. Esto podría fortalecer temporalmente el peso colombiano, dado el incremento en la demanda interna y el flujo de efectivo en la economía.
Aunque la actividad comercial es un factor positivo, Jhon Torres, economista y docente de la Uniagustiniana, advierte que “la incertidumbre sobre el recorte presupuestal anunciado por el gobierno y su impacto fiscal sigue siendo un factor clave que los inversionistas internacionales consideran al valorar el peso colombiano”.
Aunque el dólar muestra cierta estabilidad, factores como el comportamiento del petróleo, las decisiones de la FED y el panorama político y fiscal local seguirán moldeando su cotización durante el cierre del año. En los próximos días, la atención la concentrarán posibles anuncios en materia de comercio entre Estados Unidos, México y China; mientras que en Colombia, los mercados seguirán monitoreando de cerca el panorama fiscal y su influencia en la cotización de la moneda.
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