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Este miércoles será decisivo para el futuro de las criptomonedas pues termina la primera reunión de la Reserva Federal del año. Hay gran expectativa de que el banco central estadounidense de información sobre el alza de sus tasas de interés, evento que parece cada vez más cercano debido a las presiones inflacionarias que hay en la economía estadounidense. Lo que marcará un cambio para la economía mundial y las preferencias de inversión.
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Según Bloomberg el criptouniverso ha perdido más de US$1 billón en valor de mercado debido a la creciente convicción de que la Reserva Federal está lista para comenzar a reducir la configuración de políticas expansivas que impulsaron el apetito por los activos de riesgo.
Tan solo el bitcóin ha perdido más de la mitad de su valor en los últimos tres meses, que en gran parte se debe por la expectativa del cambio de la política monetaria de Estados Unidos. Pero también han incidido fenómenos geopolíticos como la tensión entre Rusia y Ucrania. Y a pesar del avance logrado en los últimos años, continúan las fuertes tensiones regulatorias para estos activos.
De hecho, el lunes pasado el bitcóin marcó su mínimo de seis meses al caer por debajo de los US$34.000. Un fuerte contraste frente a los US$68.000 que marcaba en noviembre de 2021.
Criptoinvierno
Uno de los principales temores es que los anuncios en la Reserva Federal puedan llevar a un nuevo criptoinvierno. El término apareció en 2018, año en el que se vieron desplomes de más del 80% en los criptoactivos. Además, marcó el inicio de un largo periodo de mediocre desempeño para el mercado.
“Parece probable que sea un período bastante difícil y potencialmente prolongado y, por lo tanto, la analogía del criptoinvierno es bastante buena. Recuerde que el invierno criptográfico de 2018 no se extendió solo durante los meses de invierno del hemisferio norte. Básicamente se extendió durante todo un año, por lo que fue un criptoinvierno que duró efectivamente un año”, dijo James Malcolm, jefe de investigación de divisas en UBS.
A diferencia del criptoinvierno de hace tres años, la inversión en la criptoesfera sigue siendo sólida, al menos por ahora. Solo en enero, FTX anunció el lanzamiento de un fondo de riesgo de US$2.000 millones para apuntar a las oportunidades de Web3, mientras que Financial Times informó que Andreessen Horowitz está buscando recaudar US$4.500 millones para fondos criptográficos. Por supuesto, una caída prolongada podría apagar el entusiasmo por el sector.
Fuera del capital de riesgo, las empresas también buscan expandirse a los rincones del ecosistema criptográfico. Las presentaciones ante la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de Estados Unidos muestran que Walmart Inc. se está preparando para crear su propia criptomoneda y tokens no fungibles. Mientras tanto, GameStop Corp. supuestamente también está planeando lanzar un mercado de TNF para los jugadores a finales de año.
Además de los cambios monetarios, las criptomonedas también enfrentan otros retos en Estados Unidos que podrían ser también decisivos para este mercado.
“La Casa Blanca podría revelar pronto algunos desafíos de seguridad nacional planteados por las criptomonedas y el documento de la Fed sobre las monedas digitales del banco central no respondió ninguna pregunta sobre si veremos un dólar digital o cómo podrían funcionar con las monedas estables. El entorno regulatorio se volvió mucho más confuso ahora”, dijo Edward Moya, analista sénior de mercado de Oanda Corp.