Economía colombiana crecerá 7,2 % en 2021: Fedesarrollo
El centro de análisis económico elevó sus proyecciones para la expansión del PIB de este año, que se encontraban en 4,8 %. Sin embargo, advierte sobre la posibilidad de que mayor crecimiento no se traduzca en más empleo.
De acuerdo con las nuevas estimaciones de Fedesarrollo, la economía colombiana crecerá 7,2 % este año. Las más recientes proyecciones de este centro de análisis estimaban que el PIB nacional se incrementaría en 4,8 %.
De fondo, la revisión al alza del crecimiento del PIB está fundamentada en los buenos resultados del primer trimestre, que superaron todas las expectativas de los analistas, así como la aceleración en la vacunación.
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Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo argumento que el crecimiento en la proyección se debe a “el aumento en el pronóstico de crecimiento obedece a un mayor crecimiento en el primer trimestre del año frente a lo esperado, a la baja base de comparación debido a la contracción económica de 6,8 % el año anterior, así como a la reapertura de distintos sectores, la aceleración del proceso de vacunación y las mayores perspectivas de crecimiento global, que impactarían positivamente la demanda interna y externa”.
Vale la pena recordar que marzo marcó un camino claro en la recuperación de la economía, al registrar niveles prepandemia para algunos sectores. El mes (con un crecimiento de 11,8 %) prácticamente impulsó el registro de todo el trimestre, pues en enero y febrero los datos fueron negativos (-4,1 % y -2 % en el PIB, respectivamente).
¿Qué pasó en marzo? Varios sectores y renglones se comportaron por encima de las expectativas y hubo recuperaciones notables en puntos clave. El primero de éstos es la manufactura, que tuvo un avance de 7 % frente a marzo de 2020. Así mismo, Las actividades secundarias, entre las que se encuentran manufactura y construcción, por ejemplo, tuvieron un avance de 24,9 % en marzo, “la primera vez que hay un crecimiento en la variación anual”, según afirmó en su momento Juan Daniel Oviedo, director del DANE.
De acuerdo con Fedesarrollo, para abril la economía registraría un crecimiento de 25,8 % en su medición anual y los efectos del paro se sentirían en los números de mayo para comenzar a experimentar una mejoría a partir de julio cuando, dice el centro de análisis, habrá un crecimiento en la demanda interna como resultado de la apertura sectorial a nivel nacional y regional.
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Al margen de las buenas perspectivas, Fedesarrollo eleva una preocupación: el buen crecimiento económico podría no verse reflejado en un alza del empleo en el país. En palabras de Mejía, “existe un riesgo importante relacionado con que la economía tenga un año de crecimiento económico excepcional sin una reducción sustancial en la tasa de desempleo. Para evitar este riesgo, es fundamental ejecutar un plan de choque de generación de empleo durante la segunda mitad del año que permita tener tasas de desempleo por debajo del 12 % al final del año.”
Para abril, el dato más reciente publicado por el DANE, el desempleo se ubicó en 15,1 %, una cifra menor al 19,8 % registrado en el mismo mes de 2020, pero aún lejos del 10,3 % de abril de 2019 (antes de la pandemia).
Vale la pena aclarar que la reactivación sigue teniendo comportamientos que no benefician a hombres y mujeres por igual. De los 3,9 millones de personas que consiguieron trabajo, 2,2 millones son hombres y 1,7 millones, mujeres. “Esto implica que por cada cuatro hombres que recuperaron su trabajo, solo tres mujeres lograron ese resultado”, señaló Oviedo en su momento. Y en cuanto a desempleo, de las 456.000 personas menos en el desempleo, 410.000 son hombres y apenas 46.000, mujeres. “Por cada 10 hombres que salieron del desempleo, solo una mujer pudo hacerlo”, agregó el director del DANE durante la presentación de los datos de abril.
La preocupación por el empleo es compartida por otros analistas, como Mario Valencia, quien asegura que “es obvio que ninguna reforma de política económica se ha hecho para producir la reactivación, lo que se prueba en que el mercado laboral sigue estando muy golpeado”.
De acuerdo con las nuevas estimaciones de Fedesarrollo, la economía colombiana crecerá 7,2 % este año. Las más recientes proyecciones de este centro de análisis estimaban que el PIB nacional se incrementaría en 4,8 %.
De fondo, la revisión al alza del crecimiento del PIB está fundamentada en los buenos resultados del primer trimestre, que superaron todas las expectativas de los analistas, así como la aceleración en la vacunación.
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Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo argumento que el crecimiento en la proyección se debe a “el aumento en el pronóstico de crecimiento obedece a un mayor crecimiento en el primer trimestre del año frente a lo esperado, a la baja base de comparación debido a la contracción económica de 6,8 % el año anterior, así como a la reapertura de distintos sectores, la aceleración del proceso de vacunación y las mayores perspectivas de crecimiento global, que impactarían positivamente la demanda interna y externa”.
Vale la pena recordar que marzo marcó un camino claro en la recuperación de la economía, al registrar niveles prepandemia para algunos sectores. El mes (con un crecimiento de 11,8 %) prácticamente impulsó el registro de todo el trimestre, pues en enero y febrero los datos fueron negativos (-4,1 % y -2 % en el PIB, respectivamente).
¿Qué pasó en marzo? Varios sectores y renglones se comportaron por encima de las expectativas y hubo recuperaciones notables en puntos clave. El primero de éstos es la manufactura, que tuvo un avance de 7 % frente a marzo de 2020. Así mismo, Las actividades secundarias, entre las que se encuentran manufactura y construcción, por ejemplo, tuvieron un avance de 24,9 % en marzo, “la primera vez que hay un crecimiento en la variación anual”, según afirmó en su momento Juan Daniel Oviedo, director del DANE.
De acuerdo con Fedesarrollo, para abril la economía registraría un crecimiento de 25,8 % en su medición anual y los efectos del paro se sentirían en los números de mayo para comenzar a experimentar una mejoría a partir de julio cuando, dice el centro de análisis, habrá un crecimiento en la demanda interna como resultado de la apertura sectorial a nivel nacional y regional.
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Al margen de las buenas perspectivas, Fedesarrollo eleva una preocupación: el buen crecimiento económico podría no verse reflejado en un alza del empleo en el país. En palabras de Mejía, “existe un riesgo importante relacionado con que la economía tenga un año de crecimiento económico excepcional sin una reducción sustancial en la tasa de desempleo. Para evitar este riesgo, es fundamental ejecutar un plan de choque de generación de empleo durante la segunda mitad del año que permita tener tasas de desempleo por debajo del 12 % al final del año.”
Para abril, el dato más reciente publicado por el DANE, el desempleo se ubicó en 15,1 %, una cifra menor al 19,8 % registrado en el mismo mes de 2020, pero aún lejos del 10,3 % de abril de 2019 (antes de la pandemia).
Vale la pena aclarar que la reactivación sigue teniendo comportamientos que no benefician a hombres y mujeres por igual. De los 3,9 millones de personas que consiguieron trabajo, 2,2 millones son hombres y 1,7 millones, mujeres. “Esto implica que por cada cuatro hombres que recuperaron su trabajo, solo tres mujeres lograron ese resultado”, señaló Oviedo en su momento. Y en cuanto a desempleo, de las 456.000 personas menos en el desempleo, 410.000 son hombres y apenas 46.000, mujeres. “Por cada 10 hombres que salieron del desempleo, solo una mujer pudo hacerlo”, agregó el director del DANE durante la presentación de los datos de abril.
La preocupación por el empleo es compartida por otros analistas, como Mario Valencia, quien asegura que “es obvio que ninguna reforma de política económica se ha hecho para producir la reactivación, lo que se prueba en que el mercado laboral sigue estando muy golpeado”.