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El gas natural en Europa disminuyó después de que los líderes se unieran para respaldar medidas urgentes, incluido un tope de precios, para contener la crisis energética que ha sumido a la economía.
Los futuros de referencia cayeron un 11% el viernes, registrando una tercera pérdida semanal consecutiva. Los políticos pidieron a la Comisión Europea que proponga un “corredor de precios dinámico temporal” y dijeron que buscarían un marco para limitar el precio del gas en la generación de electricidad. También quieren tomar medidas para evitar picos de precios extremos y utilizar el poder adquisitivo conjunto de la UE en las negociaciones con los vendedores.
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“También enviamos una señal clara al mercado”, dijo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. “Estoy seguro de que habrá un efecto muy pronto”.
La Unión Europea presentó el frente unido después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, cediera a la presión de otros estados miembros por un tope en el precio del gas. Anteriormente había advertido que ese límite podría poner en peligro el suministro en un momento en que la región necesita todo lo que puede obtener. Pero países como Francia, Italia y Polonia han estado presionando mucho para lograr un tope, ya que la disminución de los suministros rusos trae consigo la amenaza de escasez y apagones.
Los ministros de energía del bloque se reunirán la próxima semana para seguir tratando de concretar los detalles de los distintos planes. El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que el objetivo es tener mecanismos explícitos establecidos en las próximas dos o tres semanas.
El gas del mes anterior holandés, el punto de referencia europeo, cerró en 113,58 euros por megavatio-hora, cayendo un 20% en la semana. El contrato equivalente del Reino Unido cayó un 8,9 % el viernes, mientras que la energía alemana en el año que viene cayó un 2,9%.
Alivio del mercado
El resultado de la cumbre traerá algo de alivio a los mercados, con precios de la gasolina tres veces más altos que el promedio de cinco años para esta época del año. Han disminuido más del 60% desde su pico de agosto, ya que Europa comenzó la temporada de calefacción de invierno con depósitos casi llenos y fuertes flujos de gas natural licuado.
Pero los comerciantes esperarán más detalles sobre el diseño del plan de la UE, especialmente porque un límite de precio ha sido difícil de alcanzar anteriormente debido a la preocupación de que alentará a los vendedores de gas a buscar en otra parte.
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Hay otros riesgos. Las olas de frío y cualquier interrupción del suministro existente de EE. UU. o Noruega podrían hacer que los precios suban mucho, dijo Nikoline Bromander, analista de Rystad Energy. Los compradores en Asia se están preparando para el invierno aumentando las compras de GNL, del que Europa ha dependido en gran medida para reemplazar el combustible ruso.
Por ahora, el clima sigue siendo templado y los pronósticos apuntan a temperaturas muy por encima de lo normal en toda Europa continental la próxima semana.