Los precios internacionales del petróleo se acercan a un final de semana con pérdidas, después de alcanzar el cierre más bajo desde enero. Un enfriamiento de la demanda global, acompañada de los ecos de la guerra en Oriente Medio, han presionado a la baja los precios de este producto.
Al cierre de este jueves 22 de agosto, el crudo Brent rondaba los US$77 por barril, con caídas de alrededor de un 3 % durante esta semana. Por su parte, el West Texas Intermediate (WTI) se acercaba a los US$73 por barril.
Los datos de esta semana mostraron que el sector manufacturero de Estados Unidos se contrajo al ritmo más rápido este año, así como señales de debilidad del mercado laboral. Mientras tanto, en Europa, los futuros del diésel -un combustible usado por las industrias y la carga pesada- han retrocedido al nivel más bajo en 14 meses.
El petróleo ha perdido todas sus ganancias en lo que va de año, ya que el impacto de los recortes de la oferta de la OPEP+ (la Organización de Productores de Petróleo) se ha visto eclipsado por unas malas perspectivas económicas en las principales economías, con China mostrando signos de debilidad junto con Estados Unidos. Si bien este bloque de productores, liderado por Arabia Saudita y Rusia, ha dicho que busca aliviar algunos recortes de producción en el cuarto trimestre, la caída del crudo hace que ese plan sea más desafiante.
“A corto plazo, los precios del Brent han caído antes de los fundamentos”, dijeron analistas de Morgan Stanley, mientras recortaban las previsiones de precios para los próximos trimestres. “Sin embargo, dado que la demanda se desacelerará después del verano, y que tanto la oferta de la OPEP como la de los no OPEP aumentarán a partir del cuarto trimestre, prevemos un equilibrio que se suavizará, convirtiéndose en un superávit en 2025″.
Mientras tanto, en Medio Oriente, los negociadores israelíes llegaron a El Cairo para mantener conversaciones destinadas a consolidar un acuerdo para detener la guerra en Gaza entre Israel y Hamas, un paso que podría reducir las tensiones en la región productora de crudo.
Los diferenciales temporales del mercado del petróleo apuntan a condiciones menos restrictivas, con la brecha entre los dos contratos más cercanos del Brent reduciéndose. El diferencial fue de US$65 centavos por barril, en comparación con un máximo de 92 centavos la semana pasada.
El mercado estará atento al simposio de banqueros centrales en Jackson Hole, Wyoming, donde el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, pronunciará un discurso que podría ofrecer pistas sobre el camino a seguir para la política monetaria de Estados Unidos. Sus comentarios podrían afectar al dólar, así como a la demanda de energía en general.
China enfría la demanda global
En julio de 2024, las importaciones de petróleo por parte de China cayeron a niveles de hace dos años. Según datos de la Administración General de Aduanas de China, ese país importó 42,34 millones de toneladas de crudo en el séptimo mes del año.
Cálculos realizados por Bloomberg señalan que, a la fecha, la demanda de China está en el orden de los 10 millones de barriles por día, el ritmo más débil desde septiembre de 2022. En términos mensuales, las compras fueron casi un 9 % inferiores a las de junio pasado y menores que las de febrero de 2023.
desaceleración, con problemas inmobiliarios y una fuerte inversión hacia la movilidad eléctrica que restringen y desplazan los combustibles fósiles, pero también resaltan los márgenes más estrechos para las refinerías.
China, precisamente, registró durante el segundo trimestre de 2024 el crecimiento económico más débil en cinco trimestres: según datos del Buró de Estadísticas chino, el Producto Interno Bruto (PIB) de ese país se expandió un 0,7 % en el segundo trimestre frente al 1,5 % del primer trimestre de 2024. La cifra también es menor al crecimiento del cuarto trimestre de 2023 (1,2 %), así como del tercer trimestre (1,5 %), del segundo (0,8 %) y del primero (1,8 %).
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