Publicidad

El sector minero-energético: el ojo del huracán en la reforma tributaria

La no deducibilidad de las regalías del impuesto de renta continúa siendo un punto de tensión entre empresas y Gobierno. La ponencia de la iniciativa debería ser radicada esta semana, con posible debate en las plenarias del Congreso la próxima.

26 de octubre de 2022 - 11:00 a. m.
En Nueva York, el barril del crudo "light sweet" (WTI) para el mes de julio cayó 5 centavos, 0,1%, para terminar en 35,44 dólares. / Bloomberg
En Nueva York, el barril del crudo "light sweet" (WTI) para el mes de julio cayó 5 centavos, 0,1%, para terminar en 35,44 dólares. / Bloomberg
Foto: Agencia Bloomberg
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

La suerte del sector minero-energético sigue siendo uno de los puntos de más tensión en la reforma tributaria, que se acerca a su punto final con la presentación de la ponencia mayoritaria de cara al debate de las plenarias, documento que se espera quede radicado esta semana en el Congreso. Las discusiones en Senado y Cámara, que deben ser en simultánea por el mensaje de urgencia que tiene la iniciativa,

Uno de los cambios que propuso el gobierno de Gustavo Petro este martes fue una modificación de la sobretasa pensada para las empresas del sector: la idea sería es atarla a los precios internacionales del petróleo y el carbón: si están altos, entra en efecto un porcentaje de la sobretasa que, hasta el momento, era fija. En otras palabras, entre más suban esos productos, así mismo se incrementará la sobretasa (en un rango que va entre el 5 % y el 15 %, para el caso de los hidrocarburos, por ejemplo).

Lea también: La reforma tributaria se transforma, ¿pero convence?

La sobretasa nació en la discusión del proyecto en las comisiones económicas, como reemplazo al impuesto a las exportaciones de oro, carbón y petróleo. Esta propuesta murió camino a las comisiones, pero venía incluida en el proyecto original del Gobierno.

El impuesto dividía profundamente a la opinión. Por un lado, algunos analistas veían este tributo con buenos ojos al ser contracíclico (en época de vacas gordas funcionaba y podía ayudar a proveer recursos para tiempos malos), pero otros lo veían como una carga muy pesada sobre un sector clave, que hala inversión extranjera y pesa enormemente en las exportaciones colombianas.

Al final, este tributo desapareció, primero en el caso del oro y, al final, del todo: no quedó instituido ni para el oro ni el carbón en la versión actual de la reforma.

La idea de la sobretasa es, según el Gobierno, “seguir incorporando instrumentos que permitan crear un sistema tributario más equitativo y progresivo”, a la ves de seguir impulsando la llamada transición energética”, a la vez de continuar impulsando la transición energética.

Según el Ministerio de Hacienda, “las tasas efectivas de tributación (TET) del sector minero- energético reportan niveles inferiores a la tarifa nominal y con una perspectiva histórica que evidencia una tasa efectiva proyectada para 2022 inferior a la registrada en periodos anteriores”.

Así mismo, la ponencia que se presentará a las plenarias del Congreso mantiene la prohibición de deducir las regalías en el impuesto de renta.

Al respecto, Petro dijo este martes durante su declaración lo siguiente: “Se mantiene el que las regalías, en todo el sector minero que paga regalías, no sean deducibles del impuesto de renta por un criterio básico y fundamental, los bienes del subsuelo de la nación, desde la Constitución de 1886, son propiedad de la nación, son propiedad pública, son propiedad del pueblo colombiano”.

Y agregó: “Y en esa medida, la nación, cuando concede su explotación económica por un particular, tiene el derecho a unas regalías y, por tanto, estas no son parte de la contabilidad de las empresas privadas que tienen esa concesión y no son, entonces, deducibles de su impuesto de renta”.

¿Qué dice la industria petrolera?

La imposibilidad de deducir las regalías es, quizá, la propuesta que más preocupa a la industria minero-emergética.

Por ejemplo, Carlos Andrés Cante, presidente de Fenalcarbón y exviceministro de Minas, aseguró: “que sumar la no deducibilidad de las regalías más la sobretasa de renta, que oscilará para el caso del carbón entre 5 y 10 puntos adicionales, es una tributación excesiva que amenaza la sostenibilidad del sector, limita las posibilidades de reinversión y de ampliación y en algunos casos de continuidad del los proyectos”.

A Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación Colombiana de Minería, le parece preocupante “la insistencia sobre la no deducibilidad de las regalías. Esto va en contra de lo establecido por el Consejo de Estado y en contra de la dinámica mundial alrededor de la industria minera. La prohibición de deducir las regalías genera una renta ficticia que puede ahogar al sector minero en circunstancias de precios normales que, combinado con una sobretasa en renta, le resta competitividad y por ende viabilidad en el largo plazo. Esto sin contar que Colombia sería el único país en el mundo donde las regalías no se pueden deducir”.

Lea también: ¿Qué viene para la exploración de petróleo en Colombia? Responde Minminas

A esto el dirigente gremial añadió que “para la transición energética es una mala señal. La rentabilidad de explorar minerales estratégicos en el país o de ampliar operaciones se reduce considerablemente cuando no se pueden incluir todos los costos asociados a la producción en la contabilidad. Atraer las inversiones que se requieren para desarrollar el cobre, el níquel y otros minerales estratégicos, demandará mucho más esfuerzo. Es una mala señal para los inversionistas”.

Acerca de la sobretasa, Nariño indicó que “es necesario revisar la magnitud de la sobretasa: 10 puntos es desproporcionado e inequitativo en relación con otros sectores, razón por la cual el sector minero ha propuesto una sobretasa de 5 puntos”.

De otro lado, Nelson Castañeda, presidente de Campetrol, aseguró que “siempre hemos estado convencidos de que el diálogo es la mejor forma de entendernos en este país. Queremos compartir nuestra preocupación por el impacto que tendrá el texto actual de la reforma tributaria en 100.000 empleos directos y 550.000 indirectos al contraer el flujo de caja y de capitales de las empresas operadoras en el país, 144 empresas colombianas que son nuestras afiliadas y sus encadenamientos productivos en el territorio. Nuestro país perderá competitividad en la atracción de capitales y se aumentará el costo de la canasta familiar”.

A diferencia de las comisiones económicas, en donde el proyecto pasó sin prácticamente ninguna oposición, la discusión en plenarias puede ser más retadora para la iniciativa del Gobierno.

💰📈💱 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias económicas? Te invitamos a verlas en El Espectador.

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar