Imagen de referencia.
Foto: Getty Images
La mala sorpresa de los datos del PIB para el tercer trimestre ha puesto en movimiento, como era de esperarse, una serie de intensos debates sobre macroeconomía, pero también sobre política con un barniz de economía.
No es para menos: nadie parecía esperar resultados tan malos para ese trimestre, pues las proyecciones hablaban de desaceleración de la economía, pero en una forma más ordenada y menos violenta (con un PIB entre 0,1 % y 0,5 %, según algunas proyecciones). Una contracción de 0,3 % no sólo sorprendió, sino que causó una alarma en...