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Este jueves se dieron dos anuncios claves para incrementar la confianza sobre la economía colombiana, pero aun así el dólar subió más de $40 (cerrando en $4.151) y el precio promedio estuvo a menos de dos pesos de superar el récord histórico en la TRM. Es decir, ni la designación de José Antonio Ocampo, economista de larga trayectoria, como el nuevo ministro de Hacienda, ni el alza de más de 150 puntos de la tasa del Banco de la República fueron suficientes para frenar con la devaluación el peso colombiano. ¿Qué pasó?
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Las esperadas noticias
La designación del nuevo ministro de Hacienda era de gran expectativa, pues marcará la primera visión del manejo de la economía de la entrante administración Petro, sobre todo para calmar los temores entre los inversionistas de un gobierno de izquierda, tal como pasó en otras elecciones en la región.
En Chile, tras la victoria del candidato de izquierda Gabriel Boric, el peso (chileno) se volvió a fortalecer luego de que el presidente generara confianza con la conformación del gabinete económico nombrando a Mario Marcel, un economista reconocido, como ministro de Hacienda.
Ocampo representa un caso similar al del ministro chileno. También es un economista que tiene una extensa lista de cargos de alto nivel que incluyen: codirector del Banco de la República, director del Departamento Nacional de Planeación, ministro de Agricultura y secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Y ya ejerció como ministro de Hacienda (entre 1996 y 1997).
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De hecho, los principales gremios económicos y analistas nacionales han respaldado el nombramiento de Ocampo, lo que indicaría que se cumplió con el objetivo de generar confianza.
La otra gran noticia fue sobre la junta del Banco de la República, que este jueves realizó el alza más fuerte en dos décadas al pasar la tasa de referencia del 6 al 7,5 %, completando un aumento de 5,75 puntos porcentuales por medio de los incrementos que viene realizando desde septiembre de 2021.
El alza agresiva de la tasa del Banrep estuvo en línea con lo que esperaba el mercado, y se lee como una postura decidida del Emisor para controlar la fuerte inflación que viene registrando Colombia desde hace un año. Tan solo en mayo el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación anual del 9,07 %.
El aumento de la tasa del Emisor también ayuda a ampliar la diferencia respecto a la tasa de interés de la Reserva Federal de EE.UU., Banco Central que ha venido endureciendo su política monetaria para hacerle frente a la inflación en Estados Unidos. Mantener la brecha (entre tasas) genera incentivos para que los capitales se queden en Colombia y así reducir la presión al alza sobre la tasa de cambio.
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El peso internacional
Tanto el nombramiento de Ocampo, como el alza de tasas del Banrep, eran noticias que tenían el potencial de hacer caer la tasa de cambio. Sin embargo, el dólar reaccionó a otros anuncios.
“Este jueves salió el reporte industrial de Japón, que mostró una caída de más del 7 %. El indicador aumentó los temores de que estalle una recesión global en el próximo semestre, lo que está motivando a que los inversionistas compren dólares como refugio, lo que se suma al efecto de alza de tasas de interés de la Reserva Federal, que ha venido incrementando la incertidumbre sobre la economía internacional. Y, en consecuencia, la divisa estadounidense se está fortaleciendo respecto a las demás monedas”, indicó Juan David Ballén, director de análisis y estrategia de Casa de Bolsa.
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Por su parte, Felipe Campos, gerente de inversión e investigaciones de Alianza Valores y Fiduciaria, señaló que “este jueves también se registró una caída fuerte en los precios internacionales del petróleo, por el temor a una reducción en la demanda en caso de que estalle una recesión mundial. Si bien en los últimos años la relación entre la tasa de cambio colombiana y la cotización del crudo se había reducido, en 2022 el vínculo ha sido muy fuerte. Por eso no se puede descartar que nuevas caídas en el precio del petróleo lleven a que la tasa de cambio supere los $4.200”.
Campos agrega que “si bien es claro que la incertidumbre internacional está moviendo la tasa de cambio, la política interna seguirá influyendo. La divisa seguirá reaccionando a los anuncios del nuevo gobierno, por ejemplo, sobre la exploración petrolera y la transición energética. La noticia de Ocampo y de alza de tasas del Banrep son muy importantes, pero ya estaban muy descontadas por el mercado. Por eso la coyuntura internacional fue más decisiva para la tasa de cambio en Colombia. Y seguirá influyendo”.
Con este escenario, lo que resulta claro es que el dólar será una variable que se deberá analizar día a día, pues hay un espectro profundo de factores nacionales e internacionales que están marcando su comportamiento.
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