Las multas y demás obligaciones que fueron desindexadas del salario mínimo
Con el ánimo de cuidar el poder adquisitivo de los trabajadores en 2023, el Ministerio de Hacienda publicó el listado de obligaciones económicas que serán desindexadas del salario mínimo desde el 1 de enero. ¿Qué significa esto y cómo ayuda para que el dinero alcance para más cosas?
Las negociaciones del salario mínimo de este año han estado cargadas por el fantasma de la inflación. La disparada de los precios de los principales productos y servicios que consumen los hogares colombianos han planteado la idea de que se necesitan acciones extra para impedir que la carestía borre el aumento salarial que se le dé a los trabajadores en 2023.
Son muchas las propuestas que giran alrededor de esta materia, pero una de las más ambiciosas es la desindexación de ciertos productos y servicios del salario mínimo. En otras palabras, se busca que el incremento de estos ítems en 2023 se desaten del salario mínimo, con el ánimo de que crezcan en una menor medida y así los ingresos de los hogares alcancen para más cosas.
Lea también: ¿Qué actividades están ligadas al salario mínimo legal?
Este martes se dio a conocer el primero de los pasos que se esperan, y fue el que dio el Ministerio de Hacienda. La cartera expidió una circular decmediante el cual se especifica que a partir del primero de enero de 2023 dejarán de estar atados al salario mínimo el incremento que tengan “todos los cobros, sanciones, multas, tasas, tarifas y estampillas”.
En su lugar estos estarán atados a las Unidades de Valor Tributario (UVT) que año tras año crecen con base en el IPC (el dato que se usa en Colombia para medir la inflación).
Es decir, las multas de tránsito, por ejemplo, dejarán de expresarse en salarios mínimos y pasarán a hacerlo en UVT. El cambio es cuanto menos provechoso para quienes dependen del mínimo, pues se espera que este año el incremento salarial sea superior al 14 % (teniendo en cuenta la fórmula que emplean, qué es inflación más productividad total de los factores), mientras que la variación anual del IPC en noviembre fue del 12,53 %.
Le puede interesar: La creciente inflación pone en peligro al aumento del salario mínimo
Sin embargo, si se compara el crecimiento de la UVT para 2023 (11,49 %) con el alza que tendría el salario mínimo, la diferencia sería de unos cuantos puntos porcentuales. Alivio, sí, pero no tan drástico. Y más si se tiene en cuenta que estas responsabilidades no hacen parte de la canasta básica familiar de los hogares colombianos.
No obstante, se espera que en los próximos días se anuncien nuevas desindexaciones de productos y servicios que sí hacen parte de la canasta, pues hay que recordar que al mínimo se encuentran atadas 204 actividades económicas.
“Hoy nos han hecho llegar una lista de los productos y actividades que serán desindexadas del salario mínimo, podemos decirles que estamos desatando no solamente los 84 productos anunciados sino que vamos por 200 actividades que son las que se trabajarán con mayor profundidad y al detalle. Nuestro objetivo es reducir el impacto inflacionario producto del incremento del salario mínimo”, dijo la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
El mantener el poder adquisitivo de los trabajadores continúa siendo un gran reto, en donde frenar el crecimiento de la inflación es la gran meta por alcanzar, incluso por encima del aumento que se concertará para 2023.
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Las negociaciones del salario mínimo de este año han estado cargadas por el fantasma de la inflación. La disparada de los precios de los principales productos y servicios que consumen los hogares colombianos han planteado la idea de que se necesitan acciones extra para impedir que la carestía borre el aumento salarial que se le dé a los trabajadores en 2023.
Son muchas las propuestas que giran alrededor de esta materia, pero una de las más ambiciosas es la desindexación de ciertos productos y servicios del salario mínimo. En otras palabras, se busca que el incremento de estos ítems en 2023 se desaten del salario mínimo, con el ánimo de que crezcan en una menor medida y así los ingresos de los hogares alcancen para más cosas.
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Este martes se dio a conocer el primero de los pasos que se esperan, y fue el que dio el Ministerio de Hacienda. La cartera expidió una circular decmediante el cual se especifica que a partir del primero de enero de 2023 dejarán de estar atados al salario mínimo el incremento que tengan “todos los cobros, sanciones, multas, tasas, tarifas y estampillas”.
En su lugar estos estarán atados a las Unidades de Valor Tributario (UVT) que año tras año crecen con base en el IPC (el dato que se usa en Colombia para medir la inflación).
Es decir, las multas de tránsito, por ejemplo, dejarán de expresarse en salarios mínimos y pasarán a hacerlo en UVT. El cambio es cuanto menos provechoso para quienes dependen del mínimo, pues se espera que este año el incremento salarial sea superior al 14 % (teniendo en cuenta la fórmula que emplean, qué es inflación más productividad total de los factores), mientras que la variación anual del IPC en noviembre fue del 12,53 %.
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Sin embargo, si se compara el crecimiento de la UVT para 2023 (11,49 %) con el alza que tendría el salario mínimo, la diferencia sería de unos cuantos puntos porcentuales. Alivio, sí, pero no tan drástico. Y más si se tiene en cuenta que estas responsabilidades no hacen parte de la canasta básica familiar de los hogares colombianos.
No obstante, se espera que en los próximos días se anuncien nuevas desindexaciones de productos y servicios que sí hacen parte de la canasta, pues hay que recordar que al mínimo se encuentran atadas 204 actividades económicas.
“Hoy nos han hecho llegar una lista de los productos y actividades que serán desindexadas del salario mínimo, podemos decirles que estamos desatando no solamente los 84 productos anunciados sino que vamos por 200 actividades que son las que se trabajarán con mayor profundidad y al detalle. Nuestro objetivo es reducir el impacto inflacionario producto del incremento del salario mínimo”, dijo la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
El mantener el poder adquisitivo de los trabajadores continúa siendo un gran reto, en donde frenar el crecimiento de la inflación es la gran meta por alcanzar, incluso por encima del aumento que se concertará para 2023.
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