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Los hogares colombianos proyectan que habrá una mejora estructural en su situación económica de cara a los próximos 12 meses. Esta percepción impulsó una mejora en el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), que llegó en agosto a su mejor resultado en un año (35,9 puntos, sobre 100).
Esta cifra es mayor que la registrada hace un año (agosto de 2020, 32,5 puntos) y que la de julio de 2021 (35 puntos). Así mismo, es un incremento sensible sobre el punto más bajo del indicador hasta el momento: mayo de 2021, cuando se registraron 27,5 puntos, en el apogeo del paro nacional y en pleno tercer pico de la pandemia.
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Los datos, revelados por el DANE este martes, indican que la confianza de los hogares urbanos en Colombia se está acercando hacia un nivel de estabilidad (que se logra cuando el indicador alcanza los 50 puntos), aunque se sigue ubicando en un terreno que, técnicamente, se define entre estabilidad y empeoramiento.
“Al preguntar por la situación económica del país, en agosto de 2021, el 61,5% confirmó que era peor con respecto a la vivida en el mismo mes del año anterior; para el 15,3% era igual. De la misma forma, el 34,7% manifestó que la situación económica del país será igual dentro de doce meses y el 27,4% dijo que será mejor”, afirmó la entidad.
Los resultados del DANE hacen parte de la encuesta Pulso Social, que mensualmente está revelando información sobre varios indicadores, como el número de comidas diarias de un hogar o la disposición de las familias colombianas para comprar bienes semidurables (como un televisor o una lavadora), y que se tiene como una señal sobre la confianza de los hogares en la situación económica en general.
La encuesta revela un dato interesante: a la vez que hay una luz de optimismo en la visión de los hogares sobre su propia situación económica, también existe una visión pesimista sobre la situación actual de la economía colombiana frente a lo registrado hace un año. Y, así mismo, hay una tendencia hacia mirar con favorabilidad el futuro de la economía nacional. En otras palabras, los hogares parecen estar basando sus esperanzas en los próximos 12 meses y esta es toda una declaración cuando el país se apresta a entrar en un proceso electoral que se anticipa turbulento, por decir lo menos.
En los apartados de bienestar social, los datos del DANE muestran una mejoría alentadora en el número de hogares que afirman consumir tres comidas al día, indicador que tuvo una caída sensible para mayo de este año, cuando esta cifra llegó a ser de sólo 63 %, el punto más bajo registrado desde julio de 2020.
Así mismo, se registró una leve mejoría en el porcentaje de hogares que dijeron que sí podían ahorrar parte de sus ingresos: para el total de las 23 ciudades esta cifra había sido de 11,5 para julio de este año, mientras que para agosto se incrementó a 12,3 %. Por condición monetaria, el mayor incremento en este aspecto se registró en los hogares clasificados como pobres.
Por ciudades, el ICC registró los mejores resultados en Cúcuta y su área metropolitana (41 puntos), seguida de Neiva (39,2) y Santa Marta (39,1). Los tres lugares en los que se registraron las cifras más bajas fueron, para agosto: Popayán (31,2), Quibdó (30,9) y Bogotá (30,9).
De las ciudades que registran mejores resultados, el alza más pronunciada se da en Santa Marta, en donde la confianza de los consumidores creció 4,5 puntos con relación a julio. Esta es una cifra similar a la registrada en Quibdó que, a pesar de seguir registrando cifras bajas, mostró una mejoría de cuatro puntos entre julio y agosto de 2021.