Nueva reforma tributaria cumple lo prometido, pero podría ser mejor: observatorio
Según el Observatorio Fiscal de la Javeriana efectivamente no se tocan el IVA ni los salarios. Sin embargo, sugiere que se elimine la normalización y que la carga tributaria para las pymes sea menor.
La nueva propuesta de reforma tributaria del Gobierno “cumple con lo prometido después del retiro del anterior proyecto”. Así lo resume el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana en su análisis “¿Qué tan progresiva es la nueva reforma tributaria?”, publicado este jueves.
Esto, explica el documento, se debe a que el texto radicado no modifica los impuestos al consumo (en especial el IVA) ni aumenta la carga tributaria de las personas naturales. “El proyecto de ley radicado el pasado 20 de julio tampoco aumentará los impuestos de ningún asalariado, independientemente de su nivel de ingresos”; es decir, no toca ni siquiera los salarios altos.
El informe observa que el recaudo provendría principalmente de aumentos de impuestos a las empresas, “que se habían beneficiado de los recortes de impuestos impulsados por las reformas tributarias de 2018 y 2019″. Asimismo, se obtendrían recursos por medio de la austeridad del Estados y una nueva normalización tributaria para que “los evasores de impuestos que habían ocultado activos legalizarlos pagando menos impuestos que los que habrían pagado de haberse mantenido en la legalidad”.
Renta empresas
El observatorio resalta que la tarifa del impuesto sobre la renta de las empresas aumentaría del 31 % actual al 35 %. “Además, se mantiene el descuento del 50 % del ICA, creado por la reforma tributaria de 2019, pero se anula el descuento del 100 % actualmente programado para 2022″.
Asimismo, destaca que los cambios al impuesto de renta de las empresas no son los mismos de la propuesta anterior del Gobierno. “Esta habría reducido al 27 % la tarifa del impuesto de renta pagada por las empresas con menos de 500 millones de pesos de utilidades, al tiempo que eliminaba beneficios tributarios como las rentas exentas. Esto no sucede en el proyecto actual”.
Para evitar que la carga tributaria a las pequeñas y medianas empresas sea excesiva, el observatorio hace un llamado a considerar alternativas durante el debate legislativo como la de adoptar tarifas diferenciadas según el tamaño de la empresa.
Pese a esto, el documento señala que la propuesta en materia de empresas es progresiva. “En la medida en la cual ponerles mayores impuestos a las empresas reduce el dinero que estas tienen disponible para repartir en utilidades a sus accionistas, las medidas propuestas por el Gobierno reducen el ingreso de los colombianos de más altos ingresos para financiar el gasto social que beneficiará a la población de menores ingresos”.
Austeridad
Sobre las medidas de austeridad, el documento del observatorio fiscal señala las facultades extraordinarias que tendría el presidente de la República para suprimir, fusionar, reestructurar, modificar y disponer la escisión o disolución y consiguiente liquidación de entidades.
“Si bien este tipo de medidas resulta conveniente, es importante no perder de vista que el Estado colombiano es ineficiente, pero no está sobredimensionado si se le compara en tamaño con otros países de la OCDE. Recortar el gasto es una fuente limitada de recursos para la financiación de la inversión social, y en el mediano y largo plazo será necesario aumentar el recaudo tributario”, indica el documento.
Normalización
Se trata de una medida que les “permite a quienes hayan ocultado activos legalizar su posesión pagando un impuesto de normalización del 17 %”. El documento explica que, dado que la base gravable del impuesto sería del 50 % cuando los activos se devuelven al país con vocación de permanencia, la tarifa efectiva podría bajar al 8,5 % sobre el valor real de los activos.
“Este es un tratamiento más favorable que el obtenido por quienes no han ocultado capitales”, recalca el texto del observatorio. Se trata, además, de una normalización por sexto año consecutivo. “No me cabe duda de que hay empresarios y personas que vienen apostando a ilegalidad, pensando que va a venir la norma para pagar menos impuestos”, advirtió Luis Carlos Reyes, director del Observatorio Fiscal de la Javeriana.
Gasto social
Sobre las estrategias en las que se invertirán los recursos recaudados, el documento observa que se podrían financiar “los programas sociales que también buscaba financiar el proyecto retirado en mayo”.
Entre estos están la continuación del programa Ingreso Solidario hasta diciembre de 2022; del Programa de Apoyo al Empleo Formal (PAEF) hasta diciembre de 2021; la llamada “matrícula cero” para estudiantes de universidades públicas y un incentivo a la creación de nuevos empleos, el cual estará vigente hasta agosto de 2023. “Este programa entregará a los empleadores el 25 % de un salario mínimo por la contratación de jóvenes de 18 a 28 años y del 10 % para otros empleados (...) Reducir los costos de contratación en Colombia ha llevado a un aumento en el empleo, en la formalidad y en el ingreso de los trabajadores, por lo cual este último programa puede hacer un aporte importante a la recuperación del empleo conforme el país sale de la crisis de la pandemia”, analiza el observatorio.
Sobre el hecho de que, por ejemplo, Ingreso Solidario haya pasado de ser un programa permanente en la propuesta de reforma que se cayó a un programa con un término definido en la propuesta actual, Reyes apuntó que es “razonable” que así sea dadas las condiciones económicas actuales. Sin embargo, agregó, podría esperarse una continuidad una vez el entorno, superada la crisis, permita un mayor recaudo que financie ese tipo de programas.
Asimismo, podría contemplarse la posibilidad de retomar la idea de crear nuevos impuestos, como los llamados impuestos verdes (al plástico, por ejemplo). “Los impuestos a los insumos para producir bienes tienen un componente que afecta al consumidor y afectarían las finanzas de las personas a quien el presidente prometió no tocarles el bolsillo”, explicó Reyes. “No quiere decir que no sean convenientes una vez la economía se haya recuperado”.
Le puede interesar: Lo que se quedó por fuera de la reforma tributaria
Día sin IVA
Al igual que sucede con la normalización, el observatorio considera que la reforma tributaria sería mejor sin la propuesta del Día sin IVA. “Como lo hemos sostenido desde que se propuso, esta es una iniciativa que complica de forma innecesaria el sistema tributario, no provee un alivio sustancial a las finanzas familiares de los consumidores y es presa fácil del clientelismo político. Por estas razones sería idóneo prescindir de esta medida”, señala el documento publicado.
Regla fiscal
Acerca de la regla fiscal, los expertos del observatorio explican que actualmente la regla fiscal limita los cambios en la deuda, “mientras que la regla fiscal propuesta crea un techo de deuda del 70 % del PIB”.
Esto sería positivo en la medida que “el mecanismo del techo de deuda es uno con el cual los inversionistas extranjeros están familiarizados, por asemejarse –sin ser idéntico– al existente en los Estados Unidos. Es de esperar que este compromiso con la sostenibilidad de las finanzas públicas colombianas renueve la confianza perdida con la caída de la propuesta de reforma tributaria anterior, lo cual se reflejó en la pérdida del grado de inversión registrado por las calificadoras de riesgo”.
En conclusión, para el observatorio, salvo lo propuesto en normalización, la propuesta de reforma tributaria es progresiva, pero podría ser mejor, por ejemplo, reduciendo “la carga tributaria de las pequeñas y medianas empresas, recaudando los fondos necesarios para financiar al Estado a través de la eliminación de rentas exentas y otros beneficios tributarios, además de incorporar mecanismos adicionales en contra de la evasión y la elusión tributaria”. Estas son ideas que la Red de Trabajo Fiscal, de la que forma parte el observatorio de la Javeriana han puesto ya sobre la mesa. Lea más sobre esto en: Esta es la propuesta de reforma tributaria que busca que los más ricos paguen más
La nueva propuesta de reforma tributaria del Gobierno “cumple con lo prometido después del retiro del anterior proyecto”. Así lo resume el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana en su análisis “¿Qué tan progresiva es la nueva reforma tributaria?”, publicado este jueves.
Esto, explica el documento, se debe a que el texto radicado no modifica los impuestos al consumo (en especial el IVA) ni aumenta la carga tributaria de las personas naturales. “El proyecto de ley radicado el pasado 20 de julio tampoco aumentará los impuestos de ningún asalariado, independientemente de su nivel de ingresos”; es decir, no toca ni siquiera los salarios altos.
El informe observa que el recaudo provendría principalmente de aumentos de impuestos a las empresas, “que se habían beneficiado de los recortes de impuestos impulsados por las reformas tributarias de 2018 y 2019″. Asimismo, se obtendrían recursos por medio de la austeridad del Estados y una nueva normalización tributaria para que “los evasores de impuestos que habían ocultado activos legalizarlos pagando menos impuestos que los que habrían pagado de haberse mantenido en la legalidad”.
Renta empresas
El observatorio resalta que la tarifa del impuesto sobre la renta de las empresas aumentaría del 31 % actual al 35 %. “Además, se mantiene el descuento del 50 % del ICA, creado por la reforma tributaria de 2019, pero se anula el descuento del 100 % actualmente programado para 2022″.
Asimismo, destaca que los cambios al impuesto de renta de las empresas no son los mismos de la propuesta anterior del Gobierno. “Esta habría reducido al 27 % la tarifa del impuesto de renta pagada por las empresas con menos de 500 millones de pesos de utilidades, al tiempo que eliminaba beneficios tributarios como las rentas exentas. Esto no sucede en el proyecto actual”.
Para evitar que la carga tributaria a las pequeñas y medianas empresas sea excesiva, el observatorio hace un llamado a considerar alternativas durante el debate legislativo como la de adoptar tarifas diferenciadas según el tamaño de la empresa.
Pese a esto, el documento señala que la propuesta en materia de empresas es progresiva. “En la medida en la cual ponerles mayores impuestos a las empresas reduce el dinero que estas tienen disponible para repartir en utilidades a sus accionistas, las medidas propuestas por el Gobierno reducen el ingreso de los colombianos de más altos ingresos para financiar el gasto social que beneficiará a la población de menores ingresos”.
Austeridad
Sobre las medidas de austeridad, el documento del observatorio fiscal señala las facultades extraordinarias que tendría el presidente de la República para suprimir, fusionar, reestructurar, modificar y disponer la escisión o disolución y consiguiente liquidación de entidades.
“Si bien este tipo de medidas resulta conveniente, es importante no perder de vista que el Estado colombiano es ineficiente, pero no está sobredimensionado si se le compara en tamaño con otros países de la OCDE. Recortar el gasto es una fuente limitada de recursos para la financiación de la inversión social, y en el mediano y largo plazo será necesario aumentar el recaudo tributario”, indica el documento.
Normalización
Se trata de una medida que les “permite a quienes hayan ocultado activos legalizar su posesión pagando un impuesto de normalización del 17 %”. El documento explica que, dado que la base gravable del impuesto sería del 50 % cuando los activos se devuelven al país con vocación de permanencia, la tarifa efectiva podría bajar al 8,5 % sobre el valor real de los activos.
“Este es un tratamiento más favorable que el obtenido por quienes no han ocultado capitales”, recalca el texto del observatorio. Se trata, además, de una normalización por sexto año consecutivo. “No me cabe duda de que hay empresarios y personas que vienen apostando a ilegalidad, pensando que va a venir la norma para pagar menos impuestos”, advirtió Luis Carlos Reyes, director del Observatorio Fiscal de la Javeriana.
Gasto social
Sobre las estrategias en las que se invertirán los recursos recaudados, el documento observa que se podrían financiar “los programas sociales que también buscaba financiar el proyecto retirado en mayo”.
Entre estos están la continuación del programa Ingreso Solidario hasta diciembre de 2022; del Programa de Apoyo al Empleo Formal (PAEF) hasta diciembre de 2021; la llamada “matrícula cero” para estudiantes de universidades públicas y un incentivo a la creación de nuevos empleos, el cual estará vigente hasta agosto de 2023. “Este programa entregará a los empleadores el 25 % de un salario mínimo por la contratación de jóvenes de 18 a 28 años y del 10 % para otros empleados (...) Reducir los costos de contratación en Colombia ha llevado a un aumento en el empleo, en la formalidad y en el ingreso de los trabajadores, por lo cual este último programa puede hacer un aporte importante a la recuperación del empleo conforme el país sale de la crisis de la pandemia”, analiza el observatorio.
Sobre el hecho de que, por ejemplo, Ingreso Solidario haya pasado de ser un programa permanente en la propuesta de reforma que se cayó a un programa con un término definido en la propuesta actual, Reyes apuntó que es “razonable” que así sea dadas las condiciones económicas actuales. Sin embargo, agregó, podría esperarse una continuidad una vez el entorno, superada la crisis, permita un mayor recaudo que financie ese tipo de programas.
Asimismo, podría contemplarse la posibilidad de retomar la idea de crear nuevos impuestos, como los llamados impuestos verdes (al plástico, por ejemplo). “Los impuestos a los insumos para producir bienes tienen un componente que afecta al consumidor y afectarían las finanzas de las personas a quien el presidente prometió no tocarles el bolsillo”, explicó Reyes. “No quiere decir que no sean convenientes una vez la economía se haya recuperado”.
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Día sin IVA
Al igual que sucede con la normalización, el observatorio considera que la reforma tributaria sería mejor sin la propuesta del Día sin IVA. “Como lo hemos sostenido desde que se propuso, esta es una iniciativa que complica de forma innecesaria el sistema tributario, no provee un alivio sustancial a las finanzas familiares de los consumidores y es presa fácil del clientelismo político. Por estas razones sería idóneo prescindir de esta medida”, señala el documento publicado.
Regla fiscal
Acerca de la regla fiscal, los expertos del observatorio explican que actualmente la regla fiscal limita los cambios en la deuda, “mientras que la regla fiscal propuesta crea un techo de deuda del 70 % del PIB”.
Esto sería positivo en la medida que “el mecanismo del techo de deuda es uno con el cual los inversionistas extranjeros están familiarizados, por asemejarse –sin ser idéntico– al existente en los Estados Unidos. Es de esperar que este compromiso con la sostenibilidad de las finanzas públicas colombianas renueve la confianza perdida con la caída de la propuesta de reforma tributaria anterior, lo cual se reflejó en la pérdida del grado de inversión registrado por las calificadoras de riesgo”.
En conclusión, para el observatorio, salvo lo propuesto en normalización, la propuesta de reforma tributaria es progresiva, pero podría ser mejor, por ejemplo, reduciendo “la carga tributaria de las pequeñas y medianas empresas, recaudando los fondos necesarios para financiar al Estado a través de la eliminación de rentas exentas y otros beneficios tributarios, además de incorporar mecanismos adicionales en contra de la evasión y la elusión tributaria”. Estas son ideas que la Red de Trabajo Fiscal, de la que forma parte el observatorio de la Javeriana han puesto ya sobre la mesa. Lea más sobre esto en: Esta es la propuesta de reforma tributaria que busca que los más ricos paguen más