Dentro de la seguidilla de datos de la economía estadounidense publicados por la Reserva Federal (Fed) en la mañana de este viernes, hay uno que resalta especialmente: la producción de las fábricas de ese país (sin incluir minería ni servicios públicos) cayó por primera vez en lo que va del año.
La caída del 0,5 % en la producción industrial de EE.UU. en marzo tiene su causa en los planes de inversión menos ambiciosos de las empresas, los cuales contemplan una menor demanda de equipos y tecnología. Cabe destacar que en febrero se presentó un alza del 0,6 %, según datos de la Reserva Federal.
Incluyendo la minería y los servicios públicos, la producción industrial total subió un 0,4% en marzo.
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La caída, en detalle
Más precisamente, la caída en la producción manufacturera se debió al retroceso en la producción de bienes duraderos, como los productos de madera y los minerales no metálicos. La producción de bienes de consumo duraderos, incluidos automóviles y electrodomésticos, disminuyó un 0,9 %.
Al comparar el desempeño de marzo 2023 y el de marzo 2022, la producción de las fábricas estadounidenses bajó un 1,1 %.
Como lo señaló Bloomberg, las perspectivas de la industria manufacturera en Estados Unidos son pesimistas, teniendo en cuenta que el constante aumento en los costes de los préstamos (en un contexto de altas tasas de interés impulsadas por la Fed) podría afectar el gasto de los consumidores en bienes de gran valor.
Por grupos de mercado, la producción de equipos empresariales cayó un 1 %, la mayor del año, mientras que la de bienes de consumo aumentó en ropa y energía.
En tres de los cuatro meses transcurridos hasta febrero, las reservas de bienes de capital básicos han disminuido, según datos separados del Gobierno americano.
A principios de este mes, una encuesta del Institute for Supply Management entre los fabricantes mostró que la actividad se contrajo al máximo desde mayo de 2020, reflejando en parte el descenso de los pedidos.
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Otras cifras de la industria
De cara al futuro, el entorno inflacionista que ha afectado al sector manufacturero parece estar remitiendo. Los precios de producción estadounidenses registraron en marzo la mayor caída desde el inicio de la pandemia, impulsados por un descenso de los costes de la gasolina.
El informe de la Reserva Federal mostró que la utilización de la capacidad en las fábricas, una medida de la producción potencial utilizada que puede correlacionarse con las presiones inflacionistas, descendió al 78,1 %.
La producción de los servicios públicos aumentó un 8,4 %, ya que la vuelta a un clima más estacional impulsó la demanda de calefacción, mientras que la minería descendió un 0,5 %.
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