Reforma tributaria pasa al tablero en el Congreso

Una que otra “bolita de Navidad” se ha colado en el arbolito de la ponencia del proyecto de reforma tributaria (o inversión social), que será discutido y votado a partir de este miércoles en las comisiones económicas del Congreso.

El ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, había advertido que no iba a permitir que la iniciativa de reforma tributaria se convirtiera en “arbolito de Navidad”. Sin embargo, tuvo que aceptar que a la ponencia se le agregaran 21 artículos a los 35 que inicialmente tenía la iniciativa cuando fue radicada por la administración de Iván Duque en el Congreso.

Una de las propuestas que sorprendió fue la de buscar apoyo para las empresas afectadas por el paro nacional y los bloqueos. Muchas pequeñas empresas tuvieron que entrar en liquidación o entraron en un período de lenta recuperación. Durante las reuniones entre el Gobierno y los coordinadores ponentes de la reforma tributaria, el ministro Restrepo explicó que este artículo es producto de las solicitudes realizadas por diversos congresistas, quienes de manera reiterada manifestaron la necesidad de acompañar a las empresas que resultaron afectadas por el paro nacional.

Se propone que a estas sociedades “se les brindará un apoyo del orden del 20 % de un SMLMV (Salario Mínimo Legal Vigente) siempre y cuando demuestre que sus ingresos se vieron afectados”, precisa la iniciativa. El incentivo incorporado tiene la potencialidad de beneficiar a más de un millón de empleados, según las cuentas oficiales.

En la misma dirección de apoyo al sector empresarial se incluyen dos artículos para ampliar la cobertura del régimen simple de tributación, para que este pueda beneficiar un mayor número de micro y pequeñas empresas. Se contempla aumentar el nivel máximo de ingresos que puede tener una empresa para ingresar a este régimen pasando de 80.000 a 100.000 mil UVT (cerca de $3.600 millones).

Las tarifas de este régimen varían de acuerdo con la actividad económica y el nivel de ingresos de las empresas, que se encuentra entre el 1,8 y 14,5 % de los ingresos brutos.

El régimen simple permite que con una sola declaración se puedan pagar hasta 6 impuestos: el impuesto nacional correspondiente al SIMPLE, que grava los ingresos brutos y sustituye el impuesto de renta; el tributo nacional al consumo, ganancia ocasional y el impuesto municipal de industria y comercio (ICA). Igualmente, completa este paquete el impuesto complementario de avisos y tableros y la sobretasa bomberil.

Para ayudar a las regiones, se autoriza a la Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter) para otorgar créditos directos a las entidades territoriales y financiar proyectos de inversión en sectores sociales.

Igualmente, se establece que el Gobierno Nacional diseñará líneas de redescuento a través de Findeter y el Banco de Comercio Exterior de Colombia (Bancóldex), dirigidas a empresas y entidades territoriales que busquen invertir en proyectos productivos.

También las contribuciones del empleador al Sistema General de Seguridad Social en Pensiones se pueden descontar del impuesto Simple, sin afectar los ingresos de los municipios. La única excepción a lo anterior son las retenciones que se deben realizar sobre los pagos laborales que reciben los empleados y las retenciones a título de IVA.

Para continuar con la protección del empleo formal, la ponencia propone la extensión del PAEF (Programa de Apoyo al Empleo Formal) hasta diciembre de 2021y que las Cooperativas de Trabajo Asociado sean beneficiarias del programa.

Asimismo, para incentivar el consumo, se propone que el beneficio de día sin IVA pueda ser utilizado por un número mayor de población para que utilice dinero efectivo. Esto podría impactar positivamente el consumo de los hogares, reduciendo los valores que pagan en sus compras de electrodomésticos, útiles escolares, vestuario, juguetes o elementos deportivos. Se propone ajustar las condiciones de aplicación de este beneficio para que en las ventas sea necesario emplear la factura electrónica.

Desde este miércoles la ponencia de reforma tributaria comienza a ser examinada por los legisladores, en primera instancia por los integrantes de las comisiones económicas del Congreso de la República. La semana próxima el turno será para las plenarias de Senado y Cámara, que le darán el aval al proyecto con el cual el Gobierno espera tener unos ingresos de $15,2 billones que le sirven para tapar unos huecos y mandar un mensaje de seriedad a los inversionistas institucionales. Colombia es uno de los pocos países que se encuentra discutiendo un tema tributario en tiempos de pandemia.

Una que otra “bolita de Navidad” se ha colado en el arbolito de la ponencia del proyecto de reforma tributaria (o inversión social), que será discutido y votado a partir de este miércoles en las comisiones económicas del Congreso.

El ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, había advertido que no iba a permitir que la iniciativa de reforma tributaria se convirtiera en “arbolito de Navidad”. Sin embargo, tuvo que aceptar que a la ponencia se le agregaran 21 artículos a los 35 que inicialmente tenía la iniciativa cuando fue radicada por la administración de Iván Duque en el Congreso.

Una de las propuestas que sorprendió fue la de buscar apoyo para las empresas afectadas por el paro nacional y los bloqueos. Muchas pequeñas empresas tuvieron que entrar en liquidación o entraron en un período de lenta recuperación. Durante las reuniones entre el Gobierno y los coordinadores ponentes de la reforma tributaria, el ministro Restrepo explicó que este artículo es producto de las solicitudes realizadas por diversos congresistas, quienes de manera reiterada manifestaron la necesidad de acompañar a las empresas que resultaron afectadas por el paro nacional.

Se propone que a estas sociedades “se les brindará un apoyo del orden del 20 % de un SMLMV (Salario Mínimo Legal Vigente) siempre y cuando demuestre que sus ingresos se vieron afectados”, precisa la iniciativa. El incentivo incorporado tiene la potencialidad de beneficiar a más de un millón de empleados, según las cuentas oficiales.

En la misma dirección de apoyo al sector empresarial se incluyen dos artículos para ampliar la cobertura del régimen simple de tributación, para que este pueda beneficiar un mayor número de micro y pequeñas empresas. Se contempla aumentar el nivel máximo de ingresos que puede tener una empresa para ingresar a este régimen pasando de 80.000 a 100.000 mil UVT (cerca de $3.600 millones).

Las tarifas de este régimen varían de acuerdo con la actividad económica y el nivel de ingresos de las empresas, que se encuentra entre el 1,8 y 14,5 % de los ingresos brutos.

El régimen simple permite que con una sola declaración se puedan pagar hasta 6 impuestos: el impuesto nacional correspondiente al SIMPLE, que grava los ingresos brutos y sustituye el impuesto de renta; el tributo nacional al consumo, ganancia ocasional y el impuesto municipal de industria y comercio (ICA). Igualmente, completa este paquete el impuesto complementario de avisos y tableros y la sobretasa bomberil.

Para ayudar a las regiones, se autoriza a la Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter) para otorgar créditos directos a las entidades territoriales y financiar proyectos de inversión en sectores sociales.

Igualmente, se establece que el Gobierno Nacional diseñará líneas de redescuento a través de Findeter y el Banco de Comercio Exterior de Colombia (Bancóldex), dirigidas a empresas y entidades territoriales que busquen invertir en proyectos productivos.

También las contribuciones del empleador al Sistema General de Seguridad Social en Pensiones se pueden descontar del impuesto Simple, sin afectar los ingresos de los municipios. La única excepción a lo anterior son las retenciones que se deben realizar sobre los pagos laborales que reciben los empleados y las retenciones a título de IVA.

Para continuar con la protección del empleo formal, la ponencia propone la extensión del PAEF (Programa de Apoyo al Empleo Formal) hasta diciembre de 2021y que las Cooperativas de Trabajo Asociado sean beneficiarias del programa.

Asimismo, para incentivar el consumo, se propone que el beneficio de día sin IVA pueda ser utilizado por un número mayor de población para que utilice dinero efectivo. Esto podría impactar positivamente el consumo de los hogares, reduciendo los valores que pagan en sus compras de electrodomésticos, útiles escolares, vestuario, juguetes o elementos deportivos. Se propone ajustar las condiciones de aplicación de este beneficio para que en las ventas sea necesario emplear la factura electrónica.

Desde este miércoles la ponencia de reforma tributaria comienza a ser examinada por los legisladores, en primera instancia por los integrantes de las comisiones económicas del Congreso de la República. La semana próxima el turno será para las plenarias de Senado y Cámara, que le darán el aval al proyecto con el cual el Gobierno espera tener unos ingresos de $15,2 billones que le sirven para tapar unos huecos y mandar un mensaje de seriedad a los inversionistas institucionales. Colombia es uno de los pocos países que se encuentra discutiendo un tema tributario en tiempos de pandemia.