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A los economistas Santiago Levy y Darío Maldonado, jefes de la Misión de Empleo, se les delegó hace más de un año la tarea de mirar con lupa el mercado laboral colombiano, además de identificar sus deficiencias y explorar posibles soluciones. El miércoles presentaron su reporte, el cual contó con la participación de expertos y organizaciones afines, además de una larga lista de pendientes para lograr una mejora en esta materia.
La conclusión no pudo ser otra: “El mercado laboral de Colombia no funciona bien”, comenta Levy, al agregar que uno de sus principales malestares son los deficientes incentivos para la protección social. Explica que, aunque encuentra loable que se brinde protección en salud tanto a formales como a informales, interpreta que esto es un desestímulo para la formalidad, pues se puede llegar al razonamiento de que no tiene sentido ser un trabajador formal si, en materia de salud, se va a recibir el mismo beneficio siendo informal.
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También están las falencias en los mecanismos para proteger a los trabajadores contra el despido, pues se encontró que el aparato judicial dedicado a los temas laborales no es robusto y que muchas empresas se aventuran a realizar acciones contrarias a la ley, especialmente las micro y pequeñas, sabiendo que es poco probable que se les imponga una sanción.
Al respecto, el ministro de Trabajo, Ángel Custodio Cabrera, aseguró que actuará para aumentar la planta de inspectores, para llegar a lugares del país que no se han alcanzado. Para esto planea incorporar unos 200 inspectores, además de poner al servicio unas inspecciones móviles.
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La Misión también consideró que el salario mínimo en Colombia es muy alto, pero no en cuanto al acceso a la canasta básica familiar, sino en comparación al promedio de lo que recibe un trabajador en el país (en la urbe el 50 % gana menos de un salario mínimo, mientras que en la ruralidad la cifra se eleva al 70 %). Explican que esto es problemático, pues se erige como una barrera para aquellos que aspiran a cotizar pensión o acceder a otros beneficios que brinda la formalidad.
Sobre esto, Cabrera detalló que continúa celebrando que el salario mínimo haya alcanzado el millón de pesos en 2022, pero que entiende la posición de la misión que, entre otras cosas, propone eliminar el salario mínimo como piso o umbral para entrar a la formalidad y cotizar en los regímenes pensionales disponibles en Colombia.
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A estos malestares se suma que el sistema de formación para el trabajo no conecta con las demandas del sector productivo, por lo que muchos egresados no logran encontrar trabajo en aquello para lo cual se capacitaron.
En esta larga lista de pendientes, la Misión también recomendó adelantar políticas o reformas en materia pensional, pues es una realidad que solo uno de cada tres cotizantes logrará pensionarse al alcanzar su jubilación. “Para la mayoría de los trabajadores, la contribución del 16 % es un impuesto que reduce los incentivos a la formalidad, mientras que el régimen no contributivo y el sistema BEPS tienen muy pocos participantes”, detalló.
Finalmente están los problemas relacionados con el género, que no solo se evidencian en la brecha laboral y salarial (donde las mujeres se ven menos favorecidas), sino que se ha encontrado que, en promedio, estas cuentan con un mayor grado de escolaridad en comparación con los hombres, por lo que sus conocimientos y habilidades se estarían subutilizado.
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Para la Misión de Empleo es importante que todo este diagnóstico sea analizado con detenimiento, en pro de la formulación de políticas o reformas que permitan mejorar el mercado laboral en el país. Sin embargo, advierten que el remedio no se basa en una única solución, sino en varias que tienen que articularse de forma milimétrica, pensando cómo unas pueden impactar a las otras.
El ministro de Trabajo aseguró que recibe este informe, y que trabajará en los próximos días para presentarle al país una ruta que busque adelantar esta lista de pendientes, en la que se atenderán, como prioridad, los temas relacionados con la informalidad y justicia laboral. “En los próximos días veremos los primeros resultados”, dijo.
No obstante, es mucho el trabajo por hacer y se sabe que gran parte de este pasará al próximo mandato que se asuma en Colombia tras la salida del presidente Iván Duque. Así pues, los resultados presentados por la Misión quedan a disposición de los interesados en avanzar en las eventuales reformas pensionales y laborales que se verán en el país.