PIB de Estados Unidos superó las expectativas: ¿cómo afectará al dólar?

Las cifras de crecimiento económico de Estados Unidos en el segundo trimestre de 2024 sorprendieron para bien: 2,8 % en proyección anual, contra 1,4 % en el primer trimestre, según la primera estimación que publicó el Departamento de Comercio este jueves.

Las cifras de crecimiento económico de Estados Unidos en el segundo trimestre de 2024 sorprendieron para bien: 2,8 % en proyección anual, contra 1,4 % en el primer trimestre, según la primera estimación que publicó el Departamento de Comercio este jueves.

Si bien los analistas anticipaban un crecimiento más fuerte este trimestre, se inclinaban por uno de 1,9 % para el período abril-junio, según el consenso publicado por briefing.com y citado por la Agencia AFP.

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El Departamento de Comercio explicó que este fortalecimiento tiene que ver con el alza de los gastos de consumo, tanto de bienes como de servicios, y con el crecimiento de la inversión privada en inventario en las empresas.

Los datos son una buena noticia para el presidente Joe Biden y para su vicepresidenta, Kamala Harris, quien ahora es candidata del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales del 5 de noviembre y buscará defender los logros económicos del gobierno.

Biden elogió los resultados y dijo que son prueba de que el país tiene la “economía más fuerte del mundo”.

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Los buenos resultados podrían inquietar a los inversionistas, que esperaban un debilitamiento de la economía estadounidense. Con menos crecimiento parecía más factible la idea de un recorte de tasas de interés por parte de la Reserva Federal en septiembre.

Álvaro Humberto Ojeda, vicepresidente ejecutivo de Values AAA, banca de inversión, asegura que los resultados del PIB de Estados Unidos pueden afectar el valor del dólar en Colombia a través de cambios en la política monetaria, flujos de capital, el sentimiento del mercado y las dinámicas comerciales. “Es crucial para los actores económicos en Colombia monitorear estos indicadores para anticipar movimientos en el tipo de cambio y planificar en consecuencia”.

En esta coyuntura, en la que el mercado esperaba tres recortes de tasas de interés este año y aún no ha ocurrido ninguno, los datos de crecimiento económico son particularmente relevantes. Los tipos de interés se mantienen en máximos en más de 20 años, de 5,25-5,50 %.

El crecimiento robusto del PIB suele interpretarse como una señal de una economía fuerte, pese a las tasas de interés, lo que puede llevar a la Reserva Federal (FED) a mantener su política monetaria restrictiva para contener la inflación que se moderó en 2023, pero se mantiene en un nivel superior a la meta de 2 % anual.

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Las tasas de interés más altas en Estados Unidos, señala Ojeda, “hacen que los activos denominados en dólares sean más atractivos para los inversionistas, aumentando la demanda de dólares y, por ende, su valor frente a otras monedas, incluido el peso colombiano”. Es decir, tasas más altas en ese país por más tiempo se pueden traducir en un dólar más fuerte, especialmente, porque países como Colombia están en una senda de reducción de tipos de interés.

Las tasas altas encarecen el crédito y enfrían el consumo y la inversión para poder contener el aumento de los precios. Por ahora no se esperan recortes de tasas en la próxima reunión que tendrá la FED a fin de mes. Las primeras bajas, según las expectativas del mercado antes de que se conocieran los datos de crecimiento económico, llegarían en septiembre.

Ojeda explica que “un crecimiento económico fuerte puede atraer flujos de capital desde mercados emergentes hacia activos estadounidenses debido a la percepción de mayor seguridad y rendimientos más altos. Esto puede resultar en una salida de capitales de Colombia y otros mercados emergentes, ejerciendo presión a la baja sobre el peso colombiano”.

El dato de crecimiento económico que se conoció este jueves no es el único clave de la semana. Este viernes el Departamento de Comercio publicará el índice PCE de inflación, cifra vital para que la Reserva Federal determine su política monetaria. La información dará una idea más clara de hacia dónde podrían moverse las tasas en los próximos meses.

Diego Franco, jefe de Inversiones de Franco Capital Asset Management, dice que pese a los buenos resultados del PIB, hay otros indicadores que muestran “un comportamiento débil”, de ahí que sostiene que todavía no se puede descartar una posible recesión más adelante. “Hay indicadores en la economía que son tardíos. Aunque el PIB fue mayor a las expectativas, hay segmentos como el de vivienda, tarjetas de crédito y subdivisiones del empleo que se vienen deteriorando”.

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Por otro lado, Ojeda explica que los datos del PIB influyen en el sentimiento general del mercado: un informe de PIB positivo puede aumentar la confianza en la economía global, lo que se traduce en mayor volatilidad en los mercados de divisas. En contraste, un informe particularmente negativo puede generar incertidumbre y aversión al riesgo, beneficiando al dólar como refugio seguro y depreciando el peso colombiano.

¿Qué rumbo podría tomar el dólar en Colombia?

Predecir el futuro del dólar es complicado (por no decir imposible), teniendo en cuenta que su comportamiento se ve afectado por variables nacionales e internacionales.

Después de los datos económicos de esta semana, el siguiente evento que podría afectar el comportamiento de la tasa de cambio es la reunión de la Reserva Federal el próximo 31 de julio. No solo tiene impacto la decisión, sino también las declaraciones que realice el banco central.

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▶️ En la última Encuesta Mensual de Expectativas de Analistas Económicos del Banco de la República, la mayoría proyecta que la tasa de cambio en julio cerrará entre y $3.900 y $4000.

▶️ Los analistas que participaron en la Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo de junio (última disponible) consideran que la tasa de cambio se ubicará en $4.080 para cierre de 2024, lo que evidencia un ligero aumento frente al pronóstico del mes anterior ($4.000).

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