Por Hidroituango, afectación en la Mojana Bolivarense es grave: Contraloría
De acuerdo con la entidad esta zona está literalmente sin agua y no está recibiendo alimentación para los menores de edad.
Redacción Economía.
Una comisión de la Contraloría General de la República realizó un recorrido por la Mojana Bolivarense. Según la entidad, la visita permitió verificar directamente que la disminución del caudal del río Cauca, tras el cierre de la compuerta de Hidroituango (el pasado 5 de febrero), ha producido graves afectaciones en la vida socio-económica de la región. (Lee también Erosión fue la causa raíz en la emergencia de Hidroituango)
La situación más preocupante que alerta la Contraloría se presenta en el corregimiento de Guacayamayo, del municipio de Achí, en el sur del departamento de Bolívar. De hecho, la comisión asegura que esta zona está literalmente sin agua y no está recibiendo alimentación para los menores de edad.
“La situación actual es de tal gravedad que el equipo pudo visualizar tramos del río que se pueden cruzar a pie, el corregimiento de Guacamayo no tiene agua pues su única fuente de abastecimiento es este afluente, a lo que se suma que la sede educativa no tiene servicio sanitario y no se cuenta con recursos para invertir en el mantenimiento de la sede”, indicó el contralor delegado para la Participación Ciudadana, Luis Carlos Pineda Téllez, que encabeza la comisión de la CGR que realiza esta inspección.
La Contraloría agregó que “continuará el recorrido por toda la zona de influencia del río Cauca con el fin de recopilar todas las denuncias de los actores que requieran atención la emergencia humana, estructural y ambiental generada por el proyecto Hidruitango, así como la crisis socio - económica que se presenta en la región”.
El viernes pasado se conoció el informe de Skava Consulting, firma noruego-chilena contratada por EPM, que revela las causas de la emergencia que se presentó en Hidroituango en abril de 2019. Según el estudio la "causa física" sería la "erosión progresiva" de una zona de debilidad de la roca en el piso del túnel de desviación del río Cauca, puesto en operación en 2017 y el único que en abril del año pasado estaba habilitado para evacuar el caudal.
El informe agrega que esta zona, erosionada por el paso del agua, no fue "tratada" ni "protegida" por una deficiencia en el diseño durante la etapa de asesoría. Una diferencia en las presiones del agua que por allí corría ocasionó una socavación y el posterior colapso de roca y materia orgánica, añadió Skava. Eso fue lo que, en últimas, taponó definitivamente el túnel de desviación.
Una comisión de la Contraloría General de la República realizó un recorrido por la Mojana Bolivarense. Según la entidad, la visita permitió verificar directamente que la disminución del caudal del río Cauca, tras el cierre de la compuerta de Hidroituango (el pasado 5 de febrero), ha producido graves afectaciones en la vida socio-económica de la región. (Lee también Erosión fue la causa raíz en la emergencia de Hidroituango)
La situación más preocupante que alerta la Contraloría se presenta en el corregimiento de Guacayamayo, del municipio de Achí, en el sur del departamento de Bolívar. De hecho, la comisión asegura que esta zona está literalmente sin agua y no está recibiendo alimentación para los menores de edad.
“La situación actual es de tal gravedad que el equipo pudo visualizar tramos del río que se pueden cruzar a pie, el corregimiento de Guacamayo no tiene agua pues su única fuente de abastecimiento es este afluente, a lo que se suma que la sede educativa no tiene servicio sanitario y no se cuenta con recursos para invertir en el mantenimiento de la sede”, indicó el contralor delegado para la Participación Ciudadana, Luis Carlos Pineda Téllez, que encabeza la comisión de la CGR que realiza esta inspección.
La Contraloría agregó que “continuará el recorrido por toda la zona de influencia del río Cauca con el fin de recopilar todas las denuncias de los actores que requieran atención la emergencia humana, estructural y ambiental generada por el proyecto Hidruitango, así como la crisis socio - económica que se presenta en la región”.
El viernes pasado se conoció el informe de Skava Consulting, firma noruego-chilena contratada por EPM, que revela las causas de la emergencia que se presentó en Hidroituango en abril de 2019. Según el estudio la "causa física" sería la "erosión progresiva" de una zona de debilidad de la roca en el piso del túnel de desviación del río Cauca, puesto en operación en 2017 y el único que en abril del año pasado estaba habilitado para evacuar el caudal.
El informe agrega que esta zona, erosionada por el paso del agua, no fue "tratada" ni "protegida" por una deficiencia en el diseño durante la etapa de asesoría. Una diferencia en las presiones del agua que por allí corría ocasionó una socavación y el posterior colapso de roca y materia orgánica, añadió Skava. Eso fue lo que, en últimas, taponó definitivamente el túnel de desviación.