Elecciones o taxistas: ¿por qué el Gobierno no le subió a la gasolina en octubre?
Tras 12 aumentos consecutivos, el Gobierno decidió frenar por este mes el incremento en la gasolina argumentando que busca concretar la compensación económica para los taxistas. Para algunos esta parece más una medida política (en mes de elecciones regionales) que técnica, para otros es una decisión aceptable teniendo en cuenta la inflación.
El Gobierno decidió mantener sin modificación los precios de la gasolina y el ACPM para octubre de 2023: la venta al público de la gasolina se mantendrá en $13.964 por galón y del ACPM en $9.065 por galón, en promedio.
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El Gobierno decidió mantener sin modificación los precios de la gasolina y el ACPM para octubre de 2023: la venta al público de la gasolina se mantendrá en $13.964 por galón y del ACPM en $9.065 por galón, en promedio.
Con esta decisión, el Gobierno frena los aumentos en la tarifa de la gasolina tras 12 subidas consecutivas, una medida que llega por sorpresa, teniendo en cuenta que el Ministerio de Hacienda ha defendido los incrementos. La política de ajuste que el Gobierno inició en septiembre del año pasado, tiene el objetivo de cerrar progresivamente la brecha que existe entre el precio nacional e internacional de los combustibles y así reducir el déficit acumulado que tiene el Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles (FEPC).
El FEPC es, básicamente, un mecanismo mediante el cual, con el dinero público, se abarata artificialmente la gasolina y el diésel en el país, por debajo de los precios que se registran en el mercado internacional. Para finales del año pasado, el fondo acumulaba un saldo de $32 billones, según las cuentas del Ministerio de Hacienda. La medida de subir la gasolina (también se espera que en algún momento suba el ACPM), no es popular entre la población, pero ha generado buenos comentarios por parte de expertos en el tema, que aseguran que es lo más responsable con las finanzas públicas.
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Tras la decisión, Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, explicó que en medio del proceso de concertación con el gremio de taxistas, el Gobierno “ha encontrado un cuello de botella que le impide seguir adelante”, teniendo en cuenta que de 300.000 taxistas, solo 40.000 se han inscrito en la plataforma. La decisión, según el jefe de la cartera, es congelar el precio mientras se resuelve la compensación acordada. En declaraciones a medios de comunicación, Bonilla sostuvo que los incrementos se retomarán.
Vale recordar que tras las manifestaciones del gremio para exigirle al Gobierno medidas para contrarrestar el golpe al bolsillo que ha significado el incremento del precio promedio por galón del combustible, desde septiembre de 2022 a la fecha ha subido unos $4.700, se anunció una “compensación económica” para los taxistas. Según cálculos del Ministerio de Transporte, la medida, que no ha estado exenta de críticas, costaría cerca de $25.000 millones mensuales.
Ernesto Sandoval, representante Fenaltax, asegura que todavía no es del todo claro cómo se realizará la compensación para los taxistas. “Hay una confusión entre el mismo Gobierno. Seguramente se están poniendo de acuerdo, nosotros todavía no tenemos certeza porque cada tres semanas sale un protocolo diferente para enviar la información: inicialmente se nos indicó que debíamos reportarnos por el RUNT, luego se le solicitó a los organismos de tránsito pasar la información al RUNT. No tenemos certeza”.
¿Qué implica que no suba la gasolina en octubre?
José Manuel Restrepo, quien fue ministro de Hacienda y de Comercio y actualmente es rector de la Universidad EIA, asegura que uno de los avances más importantes del Gobierno “ha sido la implementación de buena parte de lo consignado en el Marco Fiscal de Mediano Plazo del 2022, en donde se hablaba explícitamente de dar pasos en la dirección de cerrar la brecha entre el precio interno y el precio internacional, tanto de la gasolina como del ACPM”.
Sin embargo, como explica Andrés Velasco, director técnico del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF), todavía que hay un diferencial entre el precio regulado y el precio de referencia de la gasolina, que el CARF estima en $600 por galón. “No cerrar ese diferencial implica la causación de un déficit de cerca de $330.000 millones en lo que queda de 2023, que tendrá que ser cubierto por recursos de la Nación en 2024, dentro de los techos de gasto que permite la Regla Fiscal”.
Los cálculos del CARF señala que si la gasolina hubiese subido $400 en octubre, la Nación se habría ahorrado un déficit adicional en el FEPC por $220.000 millones en lo que resta de 2023; con un incremento de $600 el ahorro habría sido de $330.000 millones en lo que queda del año (el déficit que se tendrá que cubrir, según Velasco). Como también explica el director técnico, vale aclarar que la compensación económica para los taxistas es una transferencia directa, que tendrá que estar contenida en el techo de gasto, que es consistente con la Regla Fiscal, pero no tiene efectos sobre el déficit del FEPC, al no hacerse a partir de un precio diferencial.
Para Restrepo, el Gobierno ha ido cerrando “de manera exitosa” el precio de la gasolina (los incrementos en el ACPM no se han iniciado) y lo ha hecho “con prudencia” para evitar que esto genere un incremento en la inflación. Por eso, aunque no hacer el aumento del precio de gasolina en octubre genera un aumento en el déficit de Fondo de Estabilización de Precios de Combustible, dice que la decisión es comprensible y respetuosa del marco fiscal, que indica que las medidas deben tener en consideración el comportamiento de los precios.
En cambio, para Julio César Vera, presidente de la Fundación XUA Energy, lo ideal habría sido avanzar en el ajuste, teniendo en cuenta que no hacerlo tiene implicaciones económicas. “Es valorable que se quieran mitigar los impactos al consumidor, pero por la coyuntura parece más una decisión de carácter político que una decisión económica”. Que la decisión llegue en el mismo mes en el que se definen las elecciones regionales, ha generado críticas.
Cada mes sin ajuste, dice Vera, implica cerca de $95.000 millones. El monto sigue siendo alto si se tiene en cuenta que se suma al del ACPM, que “aproximadamente representa $1,8 billones que está subsidiando el Estado. El precio está por fuera de toda proporción y ha generado problemas en el mercado”.
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El aumento en el precio de la gasolina continuará y el ACPM también empezará a subir, según ha dicho el Gobierno. En este punto, el cuándo es la clave.
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