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Fugas, incendios, intoxicaciones por monóxido de carbono y hasta explosiones son algunas de las consecuencias de unas instalaciones de gas defectuosas. Para evitar estos escenarios, la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) estipula que los inmuebles en Colombia deben estar al día con la revisión periódica de gas.
Esta inspección es obligatoria para casas, apartamentos y locales comerciales y debe hacerse cada 60 meses (cinco años aproximadamente), según la Resolución 059 de 2012 emitida por la CREG. Es decir que, si la última revisión la hicieron en marzo de 2020, por ejemplo, el plazo empieza a correr el primer día hábil de noviembre de 2024 y vencerá en marzo de 2025.
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La revisión periódica de gas tiene como objetivo garantizar el buen funcionamiento de redes, tuberías, accesorios y equipos (también llamados gasodomésticos).
Si se trata de una vivienda o un local comercial en arriendo, ¿quién paga la revisión periódica? La siguiente información evitará confusiones y malentendidos.
Costos de la revisión
Las empresas encargadas de la revisión periódica de gas calculan la tarifa de esta inspección según el tipo de inmueble.
Vanti, por ejemplo, cobra a los inmuebles residenciales (casas o apartamentos) una tarifa de $82.000. Además, si dicha inspección no se realiza en los plazos estipulados, esta empresa cobrará una tarifa adicional de $33.057.
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Para locales comerciales, el costo de esta inspección se calcula de acuerdo con sus niveles de consumo de gas. La tarifa inicia en $102.201 y puede incrementar según la categoría en que esté ubicado el inmueble.
¿Paga el arrendador o el arrendatario?
Es común que arrendadores y arrendatarios se “pasen la pelota” cuando se trata de la revisión periódica de gas. Lo que ninguno puede olvidar es que, de no realizarse, el servicio puede ser suspendido.
Para saber quién debe asumir la tarifa de esta inspección es necesario remitirse al Artículo 1993 del Código Civil, que regula las reparaciones indispensables no locativas en inmuebles en alquiler.
Abogados consultados por este diario coinciden en que las revisiones periódicas de gas pueden considerarse como una reparación indispensable no locativa.
Así las cosas, la norma establece que el arrendador (el dueño del inmueble) está obligado a reembolsar al arrendatario (quien ocupa la vivienda o utiliza el local comercial) las reparaciones indispensables no locativas. Por lo tanto, el arrendatario deberá asumir en un primer momento el pago de la inspección, pero dicho monto puede ser deducido del canon mensual de arrendamiento o reembolsado por el arrendador en los días siguientes, dependiendo de lo acordado entre las partes.
Si quiere saber cuándo se cumple el plazo para la revisión periódica de gas, solo basta con tomar su factura y mirar en la parte inferior izquierda: debajo de sus consumos en el mes y el valor a cancelar, aparecerá cuánto tiempo le queda hasta la siguiente inspección.
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