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El 2023 arrancó con el alza de varios precios de importantes productos y servicios consumidos por los colombianos. Uno de estos es el de la gasolina que, desde el año pasado, se había anunciado iba a experimentar una serie de incrementos debido al billonario déficit que presenta el Fondo para la Estabilización de los Precios del Combustible (FEPC).
Como su nombre lo indica, este fondo fue creado para absorber las disparadas alzas que experimenta el precio internacional del combustible, manteniéndolo estable en el territorio nacional y mitigando, por ejemplo, el alza en otros productos como el de los alimentos por cuenta de la carestía en su transporte.
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Sin embargo, debido al complejo panorama internacional que se ha experimentado en los últimos meses, con alzas impulsadas por el conflicto entre Rusia y Ucrania, por ejemplo, el precio del combustible registró considerable áreas, lo que aumento el déficit en el fondo, haciéndolo insostenible.
Para evitar mayores afectaciones en el presupuesto de la nación, se decidió una reducción paulatina en la cobertura del subsidio al combustible, aumentando en $200 el precio del galón por mes (aunque el precio del ACPM se congeló hasta junio del presente año).
El caso es que enero inició con el galón de gasolina $400 más costoso, lo que implica afectaciones para aquellos que dependen económicamente de la movilidad, como los taxistas.
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Uno de los representantes de este gremio, Hugo Ospina, dijo en entrevista con El Espectador, que los taxistas se están viendo afectados “toda vez que casi el 35 % de su productividad se está yendo a las manos de Ecopetrol o los combustibles”. Ante lo que consideran como un elevado costo de la gasolina, podrían entrar en paro nacional a las cero horas del próximo 24 de enero.
Lo anterior, si no logran reunirse con el Gobierno Nacional previamente. Ospina le dijo a este medio que se pondrá en contacto con las carteras relacionadas (Transporte y Energía) para que los escuchen y comprendan sus reclamos.
“Proponemos que se revise el valor del etanol de manera urgente en Colombia, ya que un galón de etanol cuesta $23.000, y del 12 % del valor del etanol se le incluye a la gasolina. Estamos hablando de más de $2.400 ¿Quién regula el valor del etanol en Colombia? ¿Quién regula el valor del biodiesel? Eso es un privado al garete poniendo los valores que quiere en una situación de orden nacional”, añadió Ospina.
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Este líder gremial prevé que el aumento de la gasolina traerá afectaciones en el bolsillo de los hogares colombianos, ya que subirá el precio del transporte de productos como los alimentos. En el servicio del taxi, estos costos ya se vieron trasladados al usuario final, ya que las tarifas registraron una variación interanual de $700.
La respuesta, según Ospina, no estaría en aplicar una tarifa diferencial para transportadores de pasajeros y de carga, ya que eso sería abrir la puerta para convertirlos en “pimpineros” (revenderían el combustible a precios inferiores a los que se consiguen en una estación de abastecimiento de combustible).
Al ser un país productor de combustible, para Ospina es acertado que se deje de ver el servicio con un sentido comercial y se vuelque más hacia lo social, de allí que considera relevante que se revisen las fórmulas con las que se calculan los precios ya que, asegura, se están beneficiando privados en el exterior a costa de un conductor que pasa 14 horas del día al volante.
Lo cierto es que el subsidio a los combustibles ha llegado a niveles insostenibles en el país, y elevar los precios parece ser la única alternativa en el corto plazo.
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