Valle del Cauca: la economía más expuesta por la caída del puente en río La Vieja
La caída del puente, conocido como El Alambrado, es el segundo golpe en infraestructura vial que recibe el departamento. Primero fue el derrumbe en Rosas, Cauca, que dificultó la conexión con el sur occidente del país y ahora se complica el paso al Eje Cafetero y el centro.
El departamento del Valle del Cauca ha tenido que sortear dos obstáculos importantes en cuanto a la infraestructura vial que lo conecta económica y socialmente con otras regiones del país. Lo que más preocupa a los habitantes y empresarios es que esto derive en mayores costos de transporte que encarezcan todavía más los productos.
El primer golpe fue un derrumbe que taponó la vía Panamericana a la altura de Rosas (Cauca), el 9 de enero de este año. De este modo se interrumpió el tránsito entre Cauca, Nariño y Valle del Cauca. La solución definitiva (hay una temporal) no ha sido finalizada y los empresarios de la región estiman que las pérdidas pueden ascender a $3 billones.
Ahora el departamento debe sortear el desplome del puente que cruza el río La Vieja para unir al Valle del Cauca con Quindío, que sucedió este 12 de abril. Además, tras el hecho hubo dos personas muertas, policías, y otras 15 quedaron heridas.
A todas luces es el departamento del Valle del Cauca el que queda más expuesto a los sobrecostes en transporte derivados de la obligación de usar rutas alternas que añaden kilómetros, galones de gasolina y tiempos de espera.
El departamento “comunica al sur occidente con el resto del país, que ya lleva varios meses afectado por el derrumbe en la vía Panamericana, a la altura de Rosas. Esto se suma la falta de avances en proyectos viales importantes para la región, como la vía Mulaló-Loboguerrero”, expresó Claudia Calero, presidenta de Asocaña.
Calero subrayó la importancia del departamento en materia alimentaria. En este punto coincide Edwin Maldonado, director ejecutivo del Comité Intergremial y Empresarial del Valle del Cauca, quien explicó que la mayor preocupación es la incidencia que pueda tener esta problemática en la inflación”.
“Nos vimos afectados en el suministro de productos agrícolas con el cierre en la Panamericana, pero lo reemplazamos con productos de otras zonas, por ejemplo, del Eje Cafetero. El departamento también es un proveedor de productos agrícolas”, agregó Maldonado.
Los insumos agrícolas es lo que más preocupa a los cultivadores de café del Eje Cafetero. “Los vehículos transportan las materias primas del para los fertilizantes y demás elementos agrícolas, así como productos alimenticios y otros. Se pueden generar unos sobrecostos que afecten la economía cafetera”, aseguró el director ejecutivo del comité de cafetos del Quindío, José Martín Vásquez.
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Una razón más para la inflación
La caída del puente en el corredor Bogotá - Buenaventura parece ser una razón más para que sigan creciendo los costos de los productos, porque “no solo perjudica al transporte, sino a todo el país”, como dice Henry Cárdenas Cruz, presidente de Fedetranscarga.
Por su parte, Colfecar (uno de los mayores gremios de transporte de carga) asegura que el colapso del puente afecta la conectividad directa de 12 departamentos del centro y suroccidente del país. Valle del Cauca podría sufrir efectos especialmente agudos.
Esta es una mala noticia para una ciudad como Cali que supera la inflación nacional en categorías como transporte y alimentos, pues en el último año han sido del 16,97 y 23,25 %, respectivamente, según los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE). Además, en esta capital transitan más de 28.000 pasajeros al año (28.257 en 2022,)
“Esta situación se suma a los problemas del puente Barragán, inhabilitado desde octubre, lo que ha afectado gravemente el norte del Valle. Cali ha sufrido muchísimo por la inflación de alimentos y prevemos que aumente por esta razón”, aseguró Luis Fernando Perez, presidente de la Cámara de Comercio de Cali.
Y es que, aunque hay vías alternas en buenas condiciones, estas implican “un aumento en recorrido de 70 kilómetros y, teniendo en cuenta que se va a trasladar un tráfico de alrededor de 8.00 vehículos al día, se va a generar congestión y sobre costos que pueden estar por el 20 %”, explicó Maldonado.
Las estimaciones del gremio de carga indican que esos kilómetros de más se traducen tres horas de camino. En promedio serán 16 horas entre Bogotá y Buenaventura, teniendo en cuenta la congestión en la vía alterna Armenia-Pereira-Cartago.
Los costos logísticos aumentarán porque, además del combustible extra, el desvío implica que los conductores tendrán que pagar dos peajes (con la vía original solamente pagaban uno). “Calculamos que para las tractomulas los costos en la ruta Bogotá-Buenaventura aumentarán $400.000″, según Fedetranscarga.
El impacto será tanto para lo que sube del sur al centro del país, como lo que baja del centro hacia el sur. “Los productos que llegan a plazas de mercado en Bogotá o en el Eje Cafetero, perderán competitividad”, considera Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia.
“El Valle del Cauca y el norte del Cauca es la principal región productora agrícola y agroindustrial, es el mayor productor de azúcar, alimentos procesados, proteína blanca y cítricos. Además, varias de las principales empresas farmacéuticas y fabricantes e importadoras de productos de aseo y cuidado personal operan en esta región”, resaltó Carlos Andrés Pérez, consultor y analista económico del departamento.
Lea: Estas son las rutas alternas que habilitaron tras la caída del puente La Vieja.
Se encarece lo que entra y sale
El consumo de los hogares no es el único renglón de la economía que puede resentir lo sucedido. El comercio exterior queda muy expuesto, debido a la importancia que tiene el Puerto de Buenaventura, ya que por él se mueve el 21 % de la carga del país.
Valle del Cauca es uno de los principales productores de azúcar a nivel nacional y este producto encabeza la lista de exportaciones de la región, renglón que creció 37 % en ventas internacionales el año pasado, en comparación con 2021, de acuerdo con cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Aunque, no se espera mayor traumatismo en lo que respecta al proceso productivo de azúcar, bioetanol y energía, “pues no tenemos tránsito de nuestras operaciones por esta vía. Sin embargo, se generará presiones en los costos de los fletes y del transporte”, informó Asocaña.
“El enclave portuario de Buenaventura es el principal punto de entrada de materias primas, maquinaria y equipo para varias industrias, entre ellas la industria de alimentos y la de productos de aseo. Las empresas productoras que operan en otras regiones como Antioquia, Bogotá y el eje cafetero tendrán dificultades para poder acceder a estos insumos y equipos”, destacó Pérez.
Por otro lado, el departamento produce 20 % de los huevos y 15 % del pollo que se consume en el país, según la Andi. Esto explica que el maíz sea uno de los principales productos de importación del Valle porque es uno de los insumos para la alimentación de las aves y, en caso de encarecerse el producto, podría subir también el valor final del producto.
En relación con el Quindío, el panorama no es más tranquilizador. Este es uno de los centros de producción de café en el país y es el principal producto de exportación del departamento, renglón que creció más de 100 % en sus ventas internacionales entre 2022 y 2021.
A los productores les preocupan los sobrecostos en los insumos que entran tanto por el puerto de Buenaventura, como por el de Barranquilla. El aumento de precios “logísticos es inmediato, se ven reflejados incluso desde ayer, que se empezaron a desviar los vehículos por la vía Cartago-Risaralda- Armenia. Posiblemente, se empiezan a reflejar en esas economías de la región en el corto plazo para los agricultores y todo el departamento”, dijo el director cafeto del Quindío.
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Lo que pide el Valle
El puente El Alambrado fue construido en 1968 por el entonces Ministerio de Obras Públicas. Y el pasado 6 de marzo, el Concesionario Autopistas del Café había entregado los resultados del último estudio de patología geotécnica que no arrojó ningún resultado negativo.
“(El puente) ha tenido un mantenimiento recurrente. Su última patología, de hace tres meses, no reportó fallas o preocupaciones que generaran afectaciones importantes en su operación y en su capacidad”, señaló el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
La entidad desde ya tiene varias hipótesis. William Camargo, presidente de la ANI, en una entrevista con Blu Radio dijo que podría deberse a un aumento de cargas en la estructura, falla en el mantenimiento o a un “elemento de afectación provocado por mano humana”. Según el funcionario, “en el momento, no se descarta la hipótesis de atentado”.
Entre tanto, el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, aseguran que la solución definitiva podría estar lista en 120 días. El concesionario propone reemplazar la estructura por un nuevo puente metálico.
En el corto plazo, Maldonado pide medidas de choque para el control del tráfico en la vía alterna, por el aumento de la circulación de los vehículos. Además de “un puente de emergencia que permita habilitar el ´punto de conectividad lo más pronto posible”.
La posibilidad de tener una infraestructura de emergencia ya está siendo evaluada por la Brigada de Ingenieros Militares. Ellos realizan el estudio preliminar y confirmación de medidas para establecer si sus capacidades y elementos técnicos se ajusta a la necesidad.
“El puente que pretendemos instalar, en caso de que sea viable, será de un solo carril con una capacidad de 52 toneladas“, explicó el coronel Javier Alexander Gómez, jefe de estado mayor de la brigada.
Por su parte, Calero considera que “es muy preocupante lo que está ocurriendo en materia de infraestructura vial en la región y debe ser una prioridad para el país avanzar en soluciones”.
Lo que piden ella y Maldonado, desde el Comité Intergremial Empresarial Valle del Cauca, es importante una doble calzada entre Calarcá (Quindío) y Uribe (Valle) porque es un corredor que no cuenta con las condiciones para el volúmen que maneja.
“La productividad, desarrollo y bienestar de los habitantes de Colombia, por el aporte que desde acá se da en materia alimentaria al país, pasa por contar con las vías necesarias y es algo a lo que hay que ponerle mayor atención”, finaliza Calero.
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El departamento del Valle del Cauca ha tenido que sortear dos obstáculos importantes en cuanto a la infraestructura vial que lo conecta económica y socialmente con otras regiones del país. Lo que más preocupa a los habitantes y empresarios es que esto derive en mayores costos de transporte que encarezcan todavía más los productos.
El primer golpe fue un derrumbe que taponó la vía Panamericana a la altura de Rosas (Cauca), el 9 de enero de este año. De este modo se interrumpió el tránsito entre Cauca, Nariño y Valle del Cauca. La solución definitiva (hay una temporal) no ha sido finalizada y los empresarios de la región estiman que las pérdidas pueden ascender a $3 billones.
Ahora el departamento debe sortear el desplome del puente que cruza el río La Vieja para unir al Valle del Cauca con Quindío, que sucedió este 12 de abril. Además, tras el hecho hubo dos personas muertas, policías, y otras 15 quedaron heridas.
A todas luces es el departamento del Valle del Cauca el que queda más expuesto a los sobrecostes en transporte derivados de la obligación de usar rutas alternas que añaden kilómetros, galones de gasolina y tiempos de espera.
El departamento “comunica al sur occidente con el resto del país, que ya lleva varios meses afectado por el derrumbe en la vía Panamericana, a la altura de Rosas. Esto se suma la falta de avances en proyectos viales importantes para la región, como la vía Mulaló-Loboguerrero”, expresó Claudia Calero, presidenta de Asocaña.
Calero subrayó la importancia del departamento en materia alimentaria. En este punto coincide Edwin Maldonado, director ejecutivo del Comité Intergremial y Empresarial del Valle del Cauca, quien explicó que la mayor preocupación es la incidencia que pueda tener esta problemática en la inflación”.
“Nos vimos afectados en el suministro de productos agrícolas con el cierre en la Panamericana, pero lo reemplazamos con productos de otras zonas, por ejemplo, del Eje Cafetero. El departamento también es un proveedor de productos agrícolas”, agregó Maldonado.
Los insumos agrícolas es lo que más preocupa a los cultivadores de café del Eje Cafetero. “Los vehículos transportan las materias primas del para los fertilizantes y demás elementos agrícolas, así como productos alimenticios y otros. Se pueden generar unos sobrecostos que afecten la economía cafetera”, aseguró el director ejecutivo del comité de cafetos del Quindío, José Martín Vásquez.
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Una razón más para la inflación
La caída del puente en el corredor Bogotá - Buenaventura parece ser una razón más para que sigan creciendo los costos de los productos, porque “no solo perjudica al transporte, sino a todo el país”, como dice Henry Cárdenas Cruz, presidente de Fedetranscarga.
Por su parte, Colfecar (uno de los mayores gremios de transporte de carga) asegura que el colapso del puente afecta la conectividad directa de 12 departamentos del centro y suroccidente del país. Valle del Cauca podría sufrir efectos especialmente agudos.
Esta es una mala noticia para una ciudad como Cali que supera la inflación nacional en categorías como transporte y alimentos, pues en el último año han sido del 16,97 y 23,25 %, respectivamente, según los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE). Además, en esta capital transitan más de 28.000 pasajeros al año (28.257 en 2022,)
“Esta situación se suma a los problemas del puente Barragán, inhabilitado desde octubre, lo que ha afectado gravemente el norte del Valle. Cali ha sufrido muchísimo por la inflación de alimentos y prevemos que aumente por esta razón”, aseguró Luis Fernando Perez, presidente de la Cámara de Comercio de Cali.
Y es que, aunque hay vías alternas en buenas condiciones, estas implican “un aumento en recorrido de 70 kilómetros y, teniendo en cuenta que se va a trasladar un tráfico de alrededor de 8.00 vehículos al día, se va a generar congestión y sobre costos que pueden estar por el 20 %”, explicó Maldonado.
Las estimaciones del gremio de carga indican que esos kilómetros de más se traducen tres horas de camino. En promedio serán 16 horas entre Bogotá y Buenaventura, teniendo en cuenta la congestión en la vía alterna Armenia-Pereira-Cartago.
Los costos logísticos aumentarán porque, además del combustible extra, el desvío implica que los conductores tendrán que pagar dos peajes (con la vía original solamente pagaban uno). “Calculamos que para las tractomulas los costos en la ruta Bogotá-Buenaventura aumentarán $400.000″, según Fedetranscarga.
El impacto será tanto para lo que sube del sur al centro del país, como lo que baja del centro hacia el sur. “Los productos que llegan a plazas de mercado en Bogotá o en el Eje Cafetero, perderán competitividad”, considera Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia.
“El Valle del Cauca y el norte del Cauca es la principal región productora agrícola y agroindustrial, es el mayor productor de azúcar, alimentos procesados, proteína blanca y cítricos. Además, varias de las principales empresas farmacéuticas y fabricantes e importadoras de productos de aseo y cuidado personal operan en esta región”, resaltó Carlos Andrés Pérez, consultor y analista económico del departamento.
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Se encarece lo que entra y sale
El consumo de los hogares no es el único renglón de la economía que puede resentir lo sucedido. El comercio exterior queda muy expuesto, debido a la importancia que tiene el Puerto de Buenaventura, ya que por él se mueve el 21 % de la carga del país.
Valle del Cauca es uno de los principales productores de azúcar a nivel nacional y este producto encabeza la lista de exportaciones de la región, renglón que creció 37 % en ventas internacionales el año pasado, en comparación con 2021, de acuerdo con cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Aunque, no se espera mayor traumatismo en lo que respecta al proceso productivo de azúcar, bioetanol y energía, “pues no tenemos tránsito de nuestras operaciones por esta vía. Sin embargo, se generará presiones en los costos de los fletes y del transporte”, informó Asocaña.
“El enclave portuario de Buenaventura es el principal punto de entrada de materias primas, maquinaria y equipo para varias industrias, entre ellas la industria de alimentos y la de productos de aseo. Las empresas productoras que operan en otras regiones como Antioquia, Bogotá y el eje cafetero tendrán dificultades para poder acceder a estos insumos y equipos”, destacó Pérez.
Por otro lado, el departamento produce 20 % de los huevos y 15 % del pollo que se consume en el país, según la Andi. Esto explica que el maíz sea uno de los principales productos de importación del Valle porque es uno de los insumos para la alimentación de las aves y, en caso de encarecerse el producto, podría subir también el valor final del producto.
En relación con el Quindío, el panorama no es más tranquilizador. Este es uno de los centros de producción de café en el país y es el principal producto de exportación del departamento, renglón que creció más de 100 % en sus ventas internacionales entre 2022 y 2021.
A los productores les preocupan los sobrecostos en los insumos que entran tanto por el puerto de Buenaventura, como por el de Barranquilla. El aumento de precios “logísticos es inmediato, se ven reflejados incluso desde ayer, que se empezaron a desviar los vehículos por la vía Cartago-Risaralda- Armenia. Posiblemente, se empiezan a reflejar en esas economías de la región en el corto plazo para los agricultores y todo el departamento”, dijo el director cafeto del Quindío.
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Lo que pide el Valle
El puente El Alambrado fue construido en 1968 por el entonces Ministerio de Obras Públicas. Y el pasado 6 de marzo, el Concesionario Autopistas del Café había entregado los resultados del último estudio de patología geotécnica que no arrojó ningún resultado negativo.
“(El puente) ha tenido un mantenimiento recurrente. Su última patología, de hace tres meses, no reportó fallas o preocupaciones que generaran afectaciones importantes en su operación y en su capacidad”, señaló el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
La entidad desde ya tiene varias hipótesis. William Camargo, presidente de la ANI, en una entrevista con Blu Radio dijo que podría deberse a un aumento de cargas en la estructura, falla en el mantenimiento o a un “elemento de afectación provocado por mano humana”. Según el funcionario, “en el momento, no se descarta la hipótesis de atentado”.
Entre tanto, el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, aseguran que la solución definitiva podría estar lista en 120 días. El concesionario propone reemplazar la estructura por un nuevo puente metálico.
En el corto plazo, Maldonado pide medidas de choque para el control del tráfico en la vía alterna, por el aumento de la circulación de los vehículos. Además de “un puente de emergencia que permita habilitar el ´punto de conectividad lo más pronto posible”.
La posibilidad de tener una infraestructura de emergencia ya está siendo evaluada por la Brigada de Ingenieros Militares. Ellos realizan el estudio preliminar y confirmación de medidas para establecer si sus capacidades y elementos técnicos se ajusta a la necesidad.
“El puente que pretendemos instalar, en caso de que sea viable, será de un solo carril con una capacidad de 52 toneladas“, explicó el coronel Javier Alexander Gómez, jefe de estado mayor de la brigada.
Por su parte, Calero considera que “es muy preocupante lo que está ocurriendo en materia de infraestructura vial en la región y debe ser una prioridad para el país avanzar en soluciones”.
Lo que piden ella y Maldonado, desde el Comité Intergremial Empresarial Valle del Cauca, es importante una doble calzada entre Calarcá (Quindío) y Uribe (Valle) porque es un corredor que no cuenta con las condiciones para el volúmen que maneja.
“La productividad, desarrollo y bienestar de los habitantes de Colombia, por el aporte que desde acá se da en materia alimentaria al país, pasa por contar con las vías necesarias y es algo a lo que hay que ponerle mayor atención”, finaliza Calero.
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